SIGLO XXI - QUINTO LUSTRO - "Un nuevo orden emerge de la desintegración del capitalismo que irá reemplazando la célula económica (familia) por una nueva matriz reproductiva (comunas) que cumplirá funciones defensivas, judiciales, productivas y administrativas."
martes, 30 de agosto de 2011
Ponencia 24/08/2011: SOCIALISMO PERUANO
Han transcurrido más de ocho décadas desde la Gestión de la Primera Generación, La Generación de la Creación Heroica del Socialismo Peruano, indudablemente nos referimos al referirnos a ésta generación al Amauta José Carlos Mariátegui. La piedra miliar, el cimiento histórico del Socialismo marxista en su forma nacional, el Socialismo Peruano, es la obra del Amauta JCM. El Amauta con su universal contribución a la afirmación y construcción del socialismo en nuestro país, nos enseña que el Socialismo por su contenido es universal y por tanto, solo es provechoso, fecundo, obrando como guía en el pensamiento y la acción que adquiere en una realidad concreta su forma nacional. Por eso, para la nueva peruanidad que se inscribe en el proceso de la lucha por el Cambio Social, no solo basta citar, sino sobre todo, aplicar de modo consecuente y fiel, lo que el Amauta señalaba: “Aplicar el método marxista en el conocimiento y definición de los problemas peruanos”, no encontró él, mejor modo de darle forma nacional, con los elementos y materiales de nuestras propia realidad peruana, al socialismo marxista en nuestro país; y que es, precisamente, lo que tanta falta nos hace como arma en la Preparación de la Organización para el Cambio Social.
El Socialismo Peruano, para su asimilación, defensa y desarrollo, tiene un guía notable en el pensamiento como en la acción, en el Camino de Mariátegui
En nuestro estudio, investigación, análisis, consciente y con un propósito definido de Cambio, debe estar bien en alto aquella sentencia tan materialista como idealista, del Amauta JCM. Con este gran paso decisivo, seguramente se estará haciendo acreedor a la Invitación a la Vida Heroica, el activista que hoy se reclama del Socialismo Peruano, porque eso es parte indesligable en la afirmación y construcción del Socialismo Peruano, que hoy pone en primer lugar la Preparación de su Organización.
Como ilustración de lo señalado líneas arriba, repasemos como el proletariado universal enseña.
I.-La revolución bolchevique. No fue burda imitación, ni menos imposición. Se nutrió de sus propios activistas: militantes de base, cuadros y dirigentes. Tuvo su propia literatura nutrida con su propia realidad. LENIN: Acerca de la Dialéctica, El Desarrollo del Capitalismo en Rusia, El Estado y la Revolución, Qué Hacer. Así, asimilando conscientemente su forma nacional de Socialismo marxista en Rusia pudo triunfar la revolución bolchevique y formar parte hoy, de la verdad universal de la doctrina marxista.
II.- La revolución china. Tan poco fue una burda imitación, ni mucho menos parodia de imitación. Su propia realidad concreta nutrió su organización con sus militantes de base, cuadros y dirigentes. Forjo creadoramente su propia literatura marxista como producto de su estudio e investigación de su realidad concreta con el propósito definido de transformarla. MAO ZEDON: Tesis Filosóficas, La Revolución China y el Partido Comunista, Sobre al nueva Democracia, Reformemos nuestro Estudio. Solo asimilando conscientemente su forma nacional de Socialismo marxista en China, pudo la revolución proletaria en china alcanzar la victoria y ser parte hoy de la verdad universal de la doctrina marxista.
III.- La Revolución cubana. No es imitación ni imposición. Fiel a la actividad creadora del proletariado universal, solo pudo triunfar asumiendo conscientemente su forma nacional de Socialismo marxista en Cuba. Su factor humano constituyo una organización singular: Movimiento Frenteunitario. Forjo su propia literatura con el claro propósito de crear una realidad nueva. Fidel Castro, Ernesto Guevara. Solo así, pudo triunfar la revolución cubana y ser parte hoy de la verdad universal de la doctrina marxista.
Como podemos apreciar el Socialismo es universal por su contenido y nacional por su forma.
IV.-El SOCIALISMO PERUANO no es ni calco (como imitación) ni copia (como imposición) . Su organización se nutre de sus propios activistas conscientes, convictos y confesos. Por eso, forjo y continúa forjando creadoramente su propia literatura con el estudio e investigación con decidido propósito del Cambio Social. JOSE CARLOS MARIATEGUI: Construcción Ideológica: Defensa del Marxismo; Construcción Teórica: Siete Ensayos de Interpretación de la Realidad Peruana; Construcción Política: Ideología y Política; Construcción Orgánica: Invitación a la Vida Heroica. Solo asimilando, defendiendo y desarrollando en su forma nacional el Socialismo marxista es como puede ser conducido a la victoria la lucha por el Cambio Social, El Resurgimiento del Perú: El Pero Integral, la nueva peruanidad de costa, sierra y selva. Si lo dicho son realidades concretas, ¿qué le falta al Socialismo Peruano para no ser parte ya de la verdad universal de la doctrina marxista?
Para los activistas que se reclaman del Socialismo Peruano, vivimos la época de la epopeya del trabajo. Comprendemos, entendemos, que el Socialismo es la más noble causa que lucha por la reivindicación del trabajo emancipado. El Socialismo Peruano hace más de ochenta años que se inscribió en pensamiento y acción en la lucha por ese alto ideal.
Hoy, que la Preparación de la organización ocupa el primer plano en la lucha por ese alto ideal, decimos como el Amauta que sentimos la política elevada a la altura de la religión y la religión elevada a la altura de la política. Por eso, la pregunta puntual, ¿SE ACEPTA LA FORMA NACIONAL DEL SOCIALISMO MARXISTA?
Nota.- Ponencia presentado por Héctor Félix, en la Casa Museo José Carlos Mariátegui, en la Mesa Redonda realizado el 24.08.2011, sobre el Socialismo Peruano. La misma que cumplimos en difundir conforme a la petición de Miguel Aragón, que en su saludo a Pavel Ortega, del día 26.08.11., pide que los expositores envíen un resumen o una versión in extenso de sus intervenciones. Petición oportuna y necesaria que debe servir para promover el intercambio virtual.
Domingo Suárez
29.08.2011
domingo, 28 de agosto de 2011
HABÍA UNA VEZ UNA PROCESION DE LA BANDERA
En el Octogésimo Segundo Aniversario de la Reincorporación de Tacna al Perú recordamos el incidente que dio origen a la Marcha de la Bandera. Recordémoslo en la palabra autorizada de quién vivió los hechos, don Federico Barreto que a la letra dice:
Yo, que he nacido en Tacna y que he pasado allí mi niñez y parte de mi juventud, he sido testigo presencial de esos episodios que recuerdo siempre con orgullo. Ocurrió el caso en 1901. Era por entonces Intendente accidental de Tacna el general don Salvador Vergara. Una institución tacneña, La Sociedad de Auxilios Mutuos "El Porvenir", quiso un día hacer bendecir en la iglesia parroquial un magnífico estandarte de seda, bordado en oro; pero, como en aquellos días habían prohibido las autoridades chilenas exhibir banderas peruanas en la ciudad, fue menester enviar una misión de socios a la intendencia a recabar el permiso correspondiente. La negativa del general Vergara fue rotunda.
- No quiero banderas en las calles- dijo. Provocan manifestaciones patrióticas y esas manifestaciones dan origen a contra manifestaciones que ponen en peligro el orden público.
Y no hubo medio de hacerle variar la resolución. Días después, ya en vísperas del 28 de julio, la Sociedad "El Porvenir", que deseaba celebrar de alguna manera el día de la patria, volvió a solicitar el permiso deseado, y el intendente volvió a denegarlo.
-Lleven el estandarte a la iglesia en una caja- dijo y en la misma forma vuelven con él al local de la Sociedad. Así nos ahorramos un conflicto.
Insistió la comisión, alegando que en Tacna todas las colectividades extranjeras, incluso la China, enarbolaban su bandera cuando les placía y que no era justo que sólo, los peruanos que estaban en suelo propio, se viesen privados de esta libertad.
Una idea extraña, sabe Dios de qué alcances posteriores, debió cruzar en ese momento por el cerebro del general Vergara, pues, cambiando repentinamente de tono, dijo:
Tienen ustedes el permiso que solicitan; pero con la condición de que me garanticen, bajo responsabilidad personal, que al conducir la bandera por las calles, el pueblo peruano no hará manifestación alguna de carácter patriótico. Exijo, desde luego, de un modo concreto, que no haya aclamaciones, ni vivas, ni el más leve grito que signifique, ni remotamente, una provocación para el elemento chileno.
Los miembros de la comisión se miraron un tanto desconcertados, estimando, sin duda, demasiado aventurado el compromiso que se le imponía; pero, resueltos a todo, lo aceptaron, poniendo así en grave riesgo su responsabilidad.
Está bien señor Intendente - dijo Justo Marín - conteniendo su indignación. No se oirá un solo grito en las calles durante la procesión del estandarte.
Así recordaba “el cantor del cautiverio”, Federico Barreto Bustíos, a quienes inmortalizaron aquel momento inolvidable. El valor y la entereza de nuestros abuelos quedó sellado en esas celebres palabras: No se oirá un solo grito en las calles durante la procesión del estandarte. Palabras de Justo Marín, altivo luchador tacneño, que se malquistara el ánimo de todos los intendentes de la ocupación por su inflexible espíritu de peruanidad. Año tras año, los 28 de agosto, los tacneños de siempre, honramos la memoria de quienes abrieron el camino de la peruanidad en 1901, legándonos un sublime acto de fidelidad a la patria ausente.
Durante los 49 años de ocupación chilena en Tacna, no pocos hombres, mujeres y niños, se entregaron con abnegación a la patria ausente poniendo en riesgo sus vidas. Uno de esos fue Don Justo Marín. El rubricó el documento exigido por el intendente Chileno Salvador Vergara. Algunos años después tuvo que refugiarse en el valle de Sama, en ese entonces, frontera del Perú con Chile. Otros patriotas no tuvieron la misma suerte: en Tacna entre 1925 - 26 fueron asesinados, Juan Berríos Espinoza, José Carlos Guisa, Manuel Albarracín García, José Gambetta Correa y su hijita de 8 años, José Pastor Hidalgo Carrasco, Juan Carlos Lanchita Cáceres, Pedro Rodolfo Rejas, Raúl Liendo, Alfredo Llangato, Manuel Machicado y Manuel Espinoza Cuellar; en Pachía, Víctor Hume; en Calana, Santiago Vildoso y los hermanos Aquilino y Juan Gonzáles Rejas. En Calientes: Nicolás Cornejo y José Ale Berrios. En Azufrera Aguas Calientes: Juan Vargas Barreda. En Palca: Aurelio Flores, José Melchor y Manuel Quispe y el niño Juan Sufra. En la Quebrada del Caplina: José Rosa, Juan y Mariano Lanchipa. En Arica: Miguel Herrera Salas, Teofilo Vilca. En Azapa: Lorenzo Zegarra, Manuel Cruz, Cripiano Quispe, Juan Odzon, Paula Flores de Oviedo. En el Pago de Ayca: los hermanos Sebastián y José Silvestre Ibarra, Lorenzo Cohaila y su nieto René. En Lluta: Lorenzo Humire. En Villa Industrial: Mateo Luque, Humberto Colque y Eufemia Ponce. En Huanune: Doroteo y Elisa Cárdenas, Gregorio Cache. En Paucarini: Miguel Romero e hijo. En Challaviento: Florentino Apaza. En Tarata antes del retorno de esta provincia al Perú: Silvestre López y Manuel Primero Franco. En Putre: Antonio Mollo. Años antes, desde 1922, la lista de caídos en manos del ejército y paramilitares chilenos referida por Basadre. En Tacna: Pascual Davis, Pedro Quina Castañón, Juan de la Cruz Quea, Juan Espinoza Cuellar, Julio Gil Lanchita, Carlos Lanchipa Cáceres, Manuel Villa, Manuel Calisaya, Angel Gil, José Manuel Carpio. Manuel Llanque, Filomena Liendo de Gandolfo, Pedro López, Pascual García, Bernardo Terán, Pedro Siles, Ambrosio Arias. En Pocollay: Miguel Reynoso, José Puente Arnao, Manuel Godinez, Miguel Soto Sufra. En Palca: Vicenta Flores, José Luis Vicente, Dámaso Vicente, Andrea Mamani, Bartolomé Cárdenas. En Caplina: José Rosa y Juan Casimiro Lanchipa. En Uchusuma: 20 obreros cuyos nombres se ignoran y cuyos cadáveres fueron arrojados a un pozo de la mina. En Maure y Mamuta: Pascual Mamani, Paulino Mamani, su esposa y seis hijos, Marcelino Flores y dos hijas, Miguel Romero, Manuel Coaquea. En Palquilla: Manuel Lina. En Tarata: Máximo Ticona, Juan Sánchez, Pascual Mamani, Pablo Mamani, Donato Mamani, José Flores, Miguel Gonzalez, Rufino Calca, Eusebio Flores, Santos Marín, Fermín Cohaila.
Poco se recuerda a los hombres, mujeres y niños que dieron su vida por el Perú en la Tacna y Arica cautivas. Son ellos los grandes VENCEDORES, a quienes hay que rendir un justo homenaje. Y NO a los traidores que fueron los primeros en atribuirse avemarías ajenas. La verdad en la historia tiene un solo color. Podrán maquillarla, podrán embellecerla, podrán falsificarla; pero, con el tiempo, los cosméticos se desmoronan y la verdad se impone pese a quien le pese.
Tacna, 28 de agosto 2011
Edgar Bolaños Marín
sábado, 27 de agosto de 2011
EL TRATADO DE 1929: EL TRATADO DE LA TRAICIÓN A TACNA Y ARICA
EL TRATADO DE 1929
Muchos creen que en 1929 el Perú, débil y aislado, no tenía otra alternativa que la aceptación de una ruptura en la continuidad geográfica, histórica y económica del pequeño territorio de Tacna y Arica. ¿Fue ésa la realidad de entonces? Si lo era, había que darle un puerto a Tacna. Leguía aceptó la fórmula representada por la salida al mar en la zona de La Yarada. Hasta allí obró con lógica dentro de su estrategia. Esta solución era mejor que la posteriormente adoptada. Pero, de modo brusco, opinó que no era viable establecer un nuevo puerto seguro y apropiado. Figueroa Larraín envió el 16 de abril de 1929 el cablegrama confidencial número 90 con un texto que ante los tacneños, ante los ariqueños, ante los peruanos y ante la historia resulta feroz: “Como se ve, U.S. estaba en lo cierto al venirme asegurando que el señor Leguía no quería el puerto sino el dinero”.[1]
Así fue como llegó a ser aceptado el memorándum chileno según el cual ese país otorgó al Perú, dentro de los 1575 metros de la Bahía de Arica, un malecón de atraque para vapores de calado y para su aduana y, en ésta, un terminal de la vía férrea de Tacna, todo construido por cuenta de Chile; establecimientos y zonas donde el comercio y el transito peruanos gozarían de la independencia del más amplio puerto libre. Esos ofrecimientos fueron luego especificados en los artículos 5º y 6º del tratado del 3 de junio de 1929. En el mismo pacto, el articulo 11º ordenó la construcción en el Moro de Arica de un monumento a la paz. La cláusula 3 del protocolo complementario señaló que debían ser retirados los viejos cañones que en ese histórico lugar eran exhibidos. Sin embargo, ellos pueden ser vistos actualmente en las plazas de la misma ciudad.[2]
Nada eficaz y práctico se dijo en ninguno de aquellos solemnes documentos acerca de las facilidades necesarias y permanentes en relación con los pasajeros, los equipajes, las relaciones económicas y el tráfico diario entre Taca y Arica. La división de ambas provincias sólo hubiera podido ser aceptable con el establecimiento sólido de dichas garantías. Tampoco –inmenso error que implicaba una ingratitud- el gobierno peruano dedicó inmediatamente un centavo de los 6 millones de dólares que recibió para invertirlos en beneficio de Tacna amputada. Sólo algunos años después, ya bajo un régimen político distinto, unas gotas de ese torrente cayeron sobre aquel suelo ávido. [3]
El tratado de paz de 1929 otorgó además al territorio chileno las azufreras del Tacora y sus dependencias que no pertenecían a la provincia de Arica. Según dijo el embajador Figueroa Larraín, los propietarios de ellas eran chilenos. Así quedo separada Tacna de su cerro tradicional. Y, sobre todo, fue interdicta una fácil vía entre esa ciudad y Bolivia mediante un habilísimo acto cubierto con las vestiduras de la inocencia. Leguía no sugirió siquiera la idea de que los propietarios antedichos transfieran sus derechos.
No se dio el trabajo de buscar informes detallados sobre la realidad económica de la ciudad y de la zona que el Perú recuperaba y acerca del futuro de ellas. Tacna quedó como el único departamento costeño del Perú sin puerto. Se habla de la mediterraneidad de Bolivia; Tacna es mediterránea. Y así, bajo las condiciones más desfavorables, cuidadosamente ocultadas por las apariencias de un tratado en el que los dos antiguos rivales efectuaban concesiones idénticas, volvió el terruño de Vigil y de Inclán a la patria heredad entre discursos fraternos y desbordes de champaña. Más tarde, cuando Ríos Gallardo llegó a Lima como entusiasta Embajador de Chile, celebró entrevistas con Leguia y algunos de sus funcionarios en torno a las relaciones comerciales entre los dos vecinos reconciliados. Se habló de establecer sociedad mixtas para la explotación del petróleo y el azúcar, esto es, de dos productos peruanos; de unificar las flotas mercantes (la nuestra era mucho más débil); de formar una empresa aérea común; de rebajar los derechos en los aranceles por etapas; y de marchar sin trastornos hacia una unión aduanera entre Chile, Arequipa, Puno, Cusco, Moquegua y Tacna. Nada de eso se concretó, al derrumbarse el régimen legista en agosto de 1930.
Y ¿qué vino después? Tacna, “la ciudad heroica”, “el altar de la peruanidad”, según los discursos que se prodigan, sobre todo en el mes de agosto, no fue en realidad sino una nueva zona periférica, sometida al colonialismo interior emanado de Lima. La estructura del Estado y de la economía semicapitalista, y los varios organismos que poseen, de acuerdo con el modelo estatal, una estructura jerarquizada y centralizada, fomentaron los desniveles que en sí llevaba la interiorización de esta lejana vida provinciana cuya población resultó así, como masas, otra minoría nacional. Producida la creciente emigración que llega de Puno, nada se hizo por detenerla o por concentrarla, o por integrarla a la tacneñidad; nada por supervigilar lo que tras ella se oculta de contrabando, de manipulación de drogas, de alejamiento en relación con la identidad nacional. No hubo planes coherentes y sistemáticos para el desarrollo de Tacna, proceso que no consiste únicamente en la necesaria tarea de darle agua, es decir, “pintar de verde” su tierra, sino depende de lo que investiguen conjuntamente los etnohistoriadores, los antropólogos, los geógrafos, los sociólogos, los economistas, los lingüistas, los educadores, trabajando con libertad y eficacia sobre el submundo urbano inflado por el éxodo rural proveniente de los Andes del Sur y sobre el campo en cuyas parcelas diminutas la reforma agraria ha hecho enmiendas no siempre justas ni atinadas.
Fuente: Jorge Basadre, La vida y la historia, tercera edición, 2007, XXIV. El tratado de 1929, Pág. 397-400
[1] Rios Gallardo, Conrado: Chile y Perú: Los pactos de 1929. Santiago: Editorial Nascimento, 1959, p. 309.
[2] En la cumbre del Morro están un museo militar, la tumba del soldado desconocido chileno y un busto de Arturo Prat con la siguiente inscripción:
Capitán Prat, Padre Nuestro/ desde el firmamento de tu gloria / derrama luz inextinguible sobre / los senderos de Chile, para que sea / grande y feliz en la paz, y si / algún día el huracán de la / guerra azota el suelo patrio, / condúcenos con los destellos / de tu espada indómita hacia / donde se triunfa o se muere. / La Armada a la ciudad de Arica / 21 de mayo de 1955
[3] Sobre la inexactitud de la versión según la cual tácitamente el tratado de 1929 abrió el camino para una ulterior salida de Bolivia l mar a través de Arica, véase el libro Apertura de Jorge Basadre (Lima, 1978).Conrado: Chile y Perú: Los pactos de 1929. Santiago: Editorial Nascimento, 1959, p. 309.
viernes, 26 de agosto de 2011
QUE ESTÁ PONIENDO EN EVIDENCIA LA LUCHA ESTUDIANTIL EN CHILE
Un talón de Aquiles
Por Manuel Ossa (*)
El Presidente Sebastián Piñera, dio en el clavo al proclamar el 19 de Julio, durante una inauguración del DUOC, que la educación "es un bien de consumo". Un mes después tuvo una reunión con directivos de la Corporación de la Producción y del Comercio y de la Sociedad Nacional de Agricultura. Detonante de esa reunión no podía ser otro, pensamos, que la educación y la discusión que universitarios y secundarios, seguidos de sus profesores y maestros, han desencadenado en la opinión pública del país. Lo pensamos, porque tres días antes, Lorenzo Constans, Presidente de la CPC, había propuesto ya una "agenda corta" para la solución del conflicto. Estaba en juego la educación como negocio. O el cese del mecanismo que así la promueve. O la debacle del sistema financiero del país en su conjunto. "Manejo de crisis", debió llamarse esa reunión clave. El acuerdo tiene que haber sido total, o "global", como se dice hoy en el espíritu del tiempo. En todo caso, hubo acuerdo de no gravar a los empresarios con nuevos impuestos para la educación.
Si todo se vende como bien de consumo, y si el sistema económico-financiero vive o muere según que esa premisa se cumpla, y si los estudiantes están poniendo en cuestión que el sistema educativo siga en esta feria libre de compra y venta, entonces es claro que los estudiantes están apuntando al talón de Aquiles del sistema en su conjunto, un punto vulnerable en cuya salvaguarda se le va la vida.
Secundarios y universitarios lo han visto con más claridad, justeza y oportunidad que muchos de nosotros, sus aliados o sus opositores. El ministro Hinzpeter se preguntó hace algunos meses por qué los estudiantes lo mezclan todo en la misma olla: el destino del cobre, las represas de HidroAysén, el petróleo de Magallanes, y ... la educación. Hacen política, acusó, y para ello reciben instrucciones partidarias. Se equivocó en lo de las instrucciones, pero acertó en lo de hacer política, aunque para él la política sea una cosa distinta y nada tenga que ver con lo que los estudiantes entienden bajo el mismo término.
Es posible mostrar con argumentos la centralidad política tanto del lema presidencial de una educación como "bien de consumo", como de la indignación estudiantil que se le resiste y apunta a lo contrario.
Desde que la tasa de ganancia de los grandes consorcios productivos trasnacionales comenzó a declinar - hasta llegar a un 50% - entre los años 60 y 70 por efecto combinado de la competencia, la saturación de mercados, los movimientos obreros o sociales y la consiguiente alza de los salarios, y otros, los capitales "globalizados" comenzaron a buscar otras fuentes que acumularan en sus arcas nuevas ganancias para suplir las que iban en merma (1). Es en razón de esta búsqueda que desde fines de los años 70 o comienzos de los 80 se asiste a un proceso de cambio que, a más tardar tras la crisis asiática de 1997-1999 y como consecuencia del aumento de liquidez que se produce entonces, deja atrás los antiguos modelos fordista y taylorista de producción como principales medios de maximizar las ganancias. Entretanto, y en virtud de los cambios estructurales que se han ido produciendo, los trabajadores han diferenciado su propio formato y sus expectativas. En efecto, con el desarrollo de la informática ha ido de la mano una elevación del nivel cultural de los mismos, de lo cual se deriva el que se requiera de ellos una forma de participación en la empresa no solo corporal, sino de toda su subjetividad. Se requiere, en otras palabras, que sean intelectualmente creativos y estén emocionalmente comprometidos con la empresa, la cual junto con confiarles tareas más sofisticadas, tiene medios para atarlos a sus propios objetivos.
El capitalismo está, pues, cambiando de fase. Se ha pasado, según los analistas citados, del "capitalismo industrial" al "capitalismo cognitivo". Así ha ido transformándose la configuración de las empresas, tanto en sus productos, dotados cada vez más de elementos "inmateriales" (memorias electrónicas o "inteligencia" robótica al servicio de trabajadores del intelecto), como por la distribución de posiciones y tareas dentro de ellas. El dueño o principal accionista de la empresa se "retira" parcialmente a administrar la renta que ella le devenga, mientras delega en bien pagados gerentes o managers su poder y dominio directo sobre la empresa, transformada ahora en un mecanismo para hacer negocios. Bajo los managers de primera línea, se forma un cuerpo escalonado de "ejecutivos" que llegan a confundirse con los que antiguamente se llamaban trabajadores u obreros. Pero, insensible y paradójicamente, estos trabajadores "cognitivos" han sido o están siendo despojados o expropiados de sus capacidades intelectuales, de su creatividad, en suma de su subjetividad, pues ella está, de ahora en adelante, al servicio y bajo el control de la empresa.
En esta fase del capitalismo, en que la extracción de valor a partir del trabajo asalariado se ha vuelto cada vez más problemática, el capital acumulado, entre otras por las AFP, en los institutos de crédito y el que se transa en las bolsas de comercio se presta a manejos que se constituyen en nuevas fuentes de ganancias, debido a la versatilidad del mundo financiero. De ahí un primer deslizamiento del capital productivo al capital financiero como fuente de ganancia.
El segundo deslizamiento se produce cuando los capitalistas comienzan a mirar con otros ojos algunos bienes considerados históricamente como bienes comunes, y que por lo tanto eran administrados principalmente por los estados a nombre y en provecho de las respectivas comunidades nacionales. Entre estos bienes se cuentan las aguas y la energía, los caminos, la salud, pero también las viviendas que proporcionaban antiguamente algunas empresas a sus trabajadores - como la población Yarur, o los campamentos mineros de Sewell y Chuquicamata, o la misma ciudad baja de Lota - y que luego los estados subvencionaban como viviendas sociales. Todos estos bienes han sido o están siendo privatizados para convertirse en nuevas fuentes de ganancia, principalmente en el caso de las viviendas, mediante el mecanismo del crédito que hace subir a la estratósfera su valor y aumenta en la misma proporción las ganancias de los pulpos inmobiliarios - hasta que la burbuja revienta, como en el caso de las subprimes estadounidenses.
En la línea de bienes considerados hasta hace algunos lustros como comunes o sociales está la educación. Por ello se la ofrecía gratuitamente y de buena calidad para todos, desde la escuela primaria (hoy básica) hasta la técnica o universitaria. Por razones ideológicas o por prejuicios religiosos, esa educación pública no fue muy frecuentada por los hijos e hijas de los católicos llamados "pudientes" de nuestro país. En países como Francia o Alemania, donde tales prejuicios no tienen tanto peso social, la educación pública gratuita, ha sido la que elige la mayoría de la clase media académica o del mundo de los negocios.
En todo caso, hoy ha cambiado la mirada de los capitalistas sobre la educación. Ésta se ha vuelto "bien de consumo", es decir, un producto que se intercambia en el mercado de los valores monetarios; se ha vuelto una "inversión", como también lo explicó Piñera, y por consiguiente es uno de los nichos de donde el capital privado puede extraer ganancia, al mismo tiempo que un lugar privilegiado donde los inversores privados puedan comenzar a manipular y controlar los cerebros que más adelante habrán de servir, como "capital cognitivo", a las empresas.
Lo que está sucediendo ante nuestros ojos en Chile lo han visto con particular claridad antes que nada los más directamente afectados: los secundarios y los estudiantes técnicos y universitarios. Ellos nos están haciendo ver a todos que el negocio de la educación o la educación como negocio se está convirtiendo en una burbuja tanto o más peligrosa que la de empresas del retail como La Polar. Pues, por un lado, este sistema educacional no consigue mejorar la calidad de los conocimientos impartidos - a ojos vistas no es éste su principal propósito -, y por otro lado, carga un endeudamiento gigantesco y de por vida sobre las espaldas de las familias y de la gran mayoría de los futuros profesionales, los cuales, por añadidura, están lejos de tener asegurados los puestos de trabajos de donde sacarían los medios con que pagarían sus deudas.
Al resistir y demostrarse en contra de este modelo, los estudiantes y escolares están, pues, atacando uno de los talones de Aquiles de la actual fase del modelo capitalista. Lo saben ellos. Por eso engloban otras piezas del mismo sistema en su protesta. Lo saben también los financistas, como Piñera, que ven peligrar una fuente de donde extraer sus ganancias, en el momento en que varias de las que tenían entran en crisis.
20 de Agosto, 2011
Notas: (1) Ver los análisis en que se inspira el presente artículo, redactado con la colaboración de socios de la Corporación Plataforma NEXOS: son los capítulos de Christian Marazzi, "La violencia del capitalismo financiero", p. 21-61, y de Carlo Vercellone, "Crisis de la ley del valor y devenir
REDESCUBRIENDO EL ENTERO PARTIDARIO IV
META Y PUNTO DE PARTIDA
A manera de presentación.-
(23 de agosto de 2011)
Por Miguel Ángel Aragón
Hace un año, en agosto de 2010, a través de las listas y grupos de correo afines enviamos el siguiente esquema de estudio, que un colaborador tuvo a bien colocarle el nombre de Reflexiones sobre la historia del partido del proletariado.
En el lapso transcurrido hemos recibido varias consultas, comentarios y opiniones, y de manera conjunta continuamos nuestras lecturas y estudios siguiendo el itinerario propuesto en el esquema mencionado.
Para los interesados, que recién se inician, o que necesiten poner orden en sus estudios sobre el tema, les recomendamos prestar atención prioritaria a dos de los temas propuestos, que resultan ser las claves para el desarrollo de todo el esquema.
El primero es la meta, el objetivo final que nos proponemos alcanzar con la reivindicación de la organización política del proletariado, la cuestión del Estado Socialista. Sobre ese tema anteriormente hemos comentado varias veces, y lo seguiremos comentando más adelante.
El segundo es el punto de partida, investigar en qué momento se encuentra actualmente el movimiento socialista peruano. Para evaluar la situación actual resulta muy necesario y conveniente responder la siguiente pregunta ¿porque motivos en el año 1919 Mariátegui no aceptó la propuesta de constituir el Partido Socialista?
Revisando con atención lo que el mismo Mariátegui escribió diez años después, en mayo de 1929, podemos encontrar la respuesta a esa pregunta.
En la Cuarta Tesis de Mayo de 1929, Antecedentes y Desarrollo de la Acción Clasista, José Carlos Mariátegui señaló las condiciones objetivas y subjetivas que lo llevaron a no aceptar la propuesta que había presentado Luís Ulloa de constituir el Partido Socialista en el año 1919.
CONDICIONES OBJETIVAS PARA CONSTITUIR EL PARTIDO
Entre las condiciones objetivas JCM anotó “el periodo (año 1919) no es propicio para la organización socialista”.
Tenemos que preguntarnos en qué criterios se basó JCM para hacer tal afirmación.
Tenemos que investigar cuales fueron las diferencias entre 1927 año en el cual Mariátegui considera necesario realizar una revisión de métodos y conceptos y colocar en primer plano la organización partidaria, y el año 1919, año en el cual no aceptó la propuesta de Ulloa de constituir de inmediato el Partido Socialista.
En segundo lugar tenemos que preguntarnos seriamente cual es la diferencia entre las condiciones actuales (lustro de 2011 a 2015) y las condiciones en las cuales se constituyó el comité organizador del partido del proletariado peruano en octubre de 1928.
En tercer lugar, tenemos que preguntarnos y respondernos seriamente ¿Actualmente el periodo es propicio para la organización socialista?
Aquí tenemos que mencionar que así como “la revolución no se puede predecir a plazo fijo”, la constitución, reconstitución o reivindicación de la organización partidaria tampoco se pueden predecir a plazo fijo. Siempre tenemos que partir de las necesidades sociales y políticas reales, y no de los caprichos personales.
Conocemos los reveses de personas saturadas de idealismo y personalismo caudillista que intentaron construir “su partido” el año 2002 y fracasaron; y luego volvieron a intentarlo en febrero de 2009 y volvieron a fracasar; y ahora, sin extraer lecciones de sus errores, subjetivamente se han propuesto constituir su partido el 22 de junio de 2018. Y la mayoría nos preguntamos, ¿porque “no antes”, o porque “no después”?
La historia no se ha hace por simples caprichos personales, ni tampoco la historia se hace “celebrando acontecimientos históricos del pasado”. Ningún cambio importante en la historia del proletariado ha ocurrido en homenaje o conmemoración de un hecho precedente, sino que los cambios siempre han ocurrido cuando las condiciones objetivas lo exigían, y cuando las condiciones subjetivas estaban realmente preparadas para ese necesario cambio.
CONDICIONES SUBJETIVAS PARA CONSTITUIR EL PARTIDO
Entre las condiciones subjetivas del año 1919 JCM menciona las siguientes:
1.- “Nuestra Época (publicada en junio y julio de 1919) no trae un programa socialista; pero aparece como un esfuerzo ideológico y propagandístico en este sentido”.
Esa era la primera condición subjetiva necesaria para constituir el partido. Así ha ocurrido en la experiencia del Partido Comunista de Marx y Engels, que primero se elaboró la propuesta de programa, y después se constituyó la Liga Comunista. Similar ha sido la experiencia del POSDR(b) dirigido por Lenin en Rusia. También esa ha sido la experiencia del Partido Socialista del Perú dirigido por Mariátegui, primero se elaboró la propuesta de programa en junio de 1927, y después se constituyó el partido en octubre de 1928.
Si revisamos las características de las minúsculas organizaciones político-partidarias que actualmente existen en nuestro país, resulta demasiado fácil comprobar que la mayoría no cuenta y “no trae un programa socialista”. Esos minúsculos grupos, al carecer de un programa, solamente se mantienen unidos en torno a “la lealtad a algún caudillo personalista”.
2.- La segunda condición subjetiva que reclamó Mariátegui en 1919 fue mucho más importante todavía. En“Antecedentes…” JCM anotó: “Una parte de los elementos que lo componen (al Comité de Propaganda Socialista), dirigida por Luís Ulloa, se propone la inmediata transformación del grupo en partido; la otra parte, en la que se cuentan precisamente los iniciadores de su fundación (J.C. Mariátegui, C. Falcón, y otros) sostienen que debe ser mantenido como Comité de Propaganda y Organización Socialista, mientras su presencia no tenga arraigo entre las masas”.
Esta fue la condición determinante para que no se constituya el Partido Socialista del Perú en 1919, como pretendía Luís Ulloa; y esa misma fue la condición determinante para que no se constituya el Partido Comunista del Perú en 1923, como pretendía César Falcón. Por eso la constitución efectiva se postergó hasta que “su presencia tenga arraigo entre las masas”, y esa condición recién se logró a mediados de 1927, y se pudo materializar en octubre de 1928, así se inició la constitución del “partido de masas e ideas”, habiendo logrado previamente “arraigo entre las masas”.
Si revisamos el panorama actual en nuestro país, la realidad es demasiado evidente para insistir en ella. Ninguna de las minúsculas organizaciones político-partidarias que existen en nuestro medio (en particular en la ciudad de Lima donde son muy abundantes) tiene arraigo entre las masas. Y lo más grave, parece que no les interesa en lo más mínimo superar esa grave limitación, y así pretenden reivindicar el partido de masas e ideas, promoviendo infecundas, engañosas, y confusionistas “coaliciones de partidos”.
Como primera conclusión del estudio y desarrollo de este esquema que reenviamos más abajo, nos reivindicamos en que la tarea principal del presente lustro (2011-2015) sigue siendo el fortalecimiento del frente unido del pueblo peruano.
REFLEXIONES SOBRE LA HISTORIA DEL PARTIDO DEL PROLETARIADO
(Esquema de Investigación a Largo Plazo)
24 de agosto de 2010
Estimados compañeros:
A continuación, compartimos con ustedes la versión revisada y corregida de la Carta que le enviamos hace poco a un compañero, joven él, interesado en un aspecto de la historia del movimiento socialista peruano.
Partiendo del análisis concreto y la evaluación de las luchas del pueblo peruano en los últimos diez años, consideramos que actualmente la tarea central de los socialistas peruanos a Corto Plazo (2010-2015) sigue siendo el fortalecimiento del frente unido del pueblo peruano; y la tarea central a Largo Plazo (2010-2020) será la reivindicación del partido de masas y de ideas del proletariado peruano.
En ese sentido, el esquema de investigación sobre “Tres Estudios” que se propone en la presente carta, lo consideramos como una tarea a resolver a largo plazo. Nuestra tarea concreta del momento es alcanzar presencia efectiva entre los trabajadores, y entre el pueblo peruano en su conjunto. Agradeceremos cualquier otra inquietud y comentario.
Atentamente
Miguel Ángel Aragón
A continuación la carta mencionada.
CARTA A UN COMPAÑERO: PROPUESTA DE TRES ESTUDIOS
08 de agosto de 2010
Estimado compañero:
Cuando se trata de hacer una investigación sobre un tema específico, las experiencias del movimiento socialista peruano, y del movimiento socialista mundial, aconsejan combinar armónicamente tres estudios: el estudio de la teoría marxista, el estudio de la historia, y el estudio de la situación actual. (Ver: Mao Zedong, Reformemos nuestro estudio)
Si nos reducimos únicamente al estudio de la situación actual, caemos en una forma de la unilateralidad, y nos podemos desviar al empirismo. Si nos reducimos únicamente al estudio de la teoría marxista, también caemos en otra forma de la unilateralidad, y nos podemos desviar al dogmatismo.
Tanto el empirismo, como el dogmatismo, son dos expresiones del individualismo. Los empiristas solamente reconocen como válida "su propia experiencia personal", que por más esfuerzos que hagan, siempre será muy limitada. Los dogmáticos solamente reconocen como válidas "las ideas adquiridas en los pocos libros que ellos han leído personalmente", despreciando las opiniones discrepantes que otras personas exponen.
Usted se ha fijado, desde hace largo tiempo, un tema de investigación: La Historia del Partido Comunista del Perú. Ese tema, que usted ha elegido, no creo que obedezca a una simple curiosidad intelectual, sino a la necesidad de asumir una posición definida respecto a esa organización. Me parece muy correcto que usted persista en esa investigación, y se esfuerce por superar las limitaciones de información, de las cuales adolecen los miembros de la actual generación. Nuestra responsabilidad, como veteranos, es colaborar con ustedes, para que formen su propia opinión, y apoyándose en sus propios esfuerzos, ustedes lleguen a sus propias conclusiones.
Respecto a la Teoría Marxista.-
En el primer aspecto, la teoría de la construcción del partido del proletariado no se puede reducir únicamente a lo expuesto por Lenin en el libro Que hacer (1902). Ese ha sido un grave error del movimiento socialista mundial, error generalizado por la propaganda unilateral divulgada por la Internacional Comunista(1919-1943). En la actualidad, en nuestro medio, algunos socialistas erróneamente pretenden reducir toda la teoría de la construcción partidaria a las propuestas de ese único libro de Lenin, sin considerar otras obras importantes del mismo autor, o de otros autores, en las cuales se sistematiza la valiosa experiencia organizativa del proletariado.
Para conocer y dominar la teoría de la construcción del partido proletario, debemos de comenzar por estudiar y conocer las propuestas y la práctica concreta de Marx y Engels, desde 1845 hasta 1985, lapso que abarcó la gestión de las dos primeras generaciones del movimiento socialista mundial.
I
De la experiencia de Marx y Engels, entre otros temas, considero que tenemos que estudiar:
-Porqué, y con qué características, se constituyó la Liga Comunista en 1847, y porqué fue autodisuelta en noviembre de 1852, a iniciativa de Marx y Engels.
-Porqué razones Marx y Engels no volvieron a militar en ningún partido entre los años 1852 y 1869, durante un lapso de diecisiete años.
-Porqué Marx y Engels promovieron, en 1864, la constitución de la Asociación Internacional de Trabajadores(AIT), y porqué no promovieron la constitución, o la reconstitución, del Partido Comunista, que había sido autodisuelto doce años antes.
- La AIT fue una organización partidaria, o una organización de frente unido.
-Porque razones la AIT fue autodisuelta después de nueve años de intensa y fecunda actividad organizando y dirigiendo las luchas del proletariado europeo.
II
- Quienes promovieron la constitución del Partido Obrero Socialdemócrata Alemán (POSDA), o Partido Socialista Alemán, en 1869, diecisiete años después de la autodisolución de la Liga Comunista.
- Cual fue la posición de Marx y Engels con respecto al POSDA
- Porqué Marx militó en el POSDA desde 1869 hasta su muerte en 1883, y porqué Engels militó en ese mismo partido, desde 1869 hasta su muerte en 1895.
-El POSDA fue un partido reformista o un partido revolucionario.
-Porque razones Marx y Engels no disputaron la dirección, ni ocuparon cargos dirigentes, en el POSDA .Quienes fueron los principales dirigentes del POSDA, y cuál fue su orientación predominante.
-Suponiendo que la denominación “comunista” fuera la denominación científicamente correcta del nombre del partido proletario, como algunos vociferan, porque razones Marx y Engels NO propusieron que el POSDA se llamara Partido Comunista.
-En 1889 se constituyó la Internacional Socialista , más conocida como II Internacional. Ya fallecido Marx, cual fue la posición de Engels respecto a esa nueva organización internacional. La II Internacional fue una organización reformista, o una organización revolucionaria. Cual debe ser nuestra posición respecto a esa organización internacional del proletariado.
III
De las experiencias posteriores a la propia de Marx y Engels, algunas de las preguntas que debemos plantearnos, consideramos que son las siguientes:
-Después que Lenin escribió los libros Que Hacer (1902) y Un Paso adelante y dos pasos atrás (1904), cual fue la posición del movimiento socialista mundial respecto a sus propuestas de construcción partidaria. Sus propuestas fueron aceptadas por unanimidad, o por el contrario, fueron cuestionadas por destacados dirigentes socialistas.
-Conoce usted el gran debate sostenido el año 1904, entre Rosa Luxemburgo y Lenin, respecto a la organización partidaria del proletariado.
- En 1905 estalló la primera revolución rusa. Si asumimos consecuentemente la posición materialista, debemos de reconocer que la práctica concreta es el único criterio de verdad. Según ese criterio, la experiencia revolucionaria de 1905, a quien le dio la razón, a Luxemburgo o a Lenin.
-Conoce usted la introducción al libro 12 años (1907), en el cual Lenin autocríticamente reconoce algunas de sus limitaciones y errores expuestos en su libro Que Hacer, con respecto a los criterios de organización del proletariado.
- Que cambios introdujo Lenin, entre 1905 y 1917, en su concepción de la construcción de la organización partidaria. Que propuestas del Que Hacer siguieron siendo válidas, y que otras propuestas es necesario revisar y corregir partiendo de las enseñanzas de la experiencia de lucha del proletariado mundial.
IV
-Fue necesaria y correcta la constitución en 1919, de la Internacional Comunista, dirigida por Lenin.
-Cuáles fueron las propuestas centrales de la Internacional Comunista respecto a la construcción partidaria, y cuáles fueron las principales variaciones en sus criterios organizativos, que fueron introducidas en cada una sus diferentes etapas.
-Fue necesaria y correcta la autodisolución de la Internacional Comunista en 1943, a propuesta de Stalin.
V
-El movimiento socialista es un movimiento solamente temporal; o por el contrario, es un movimiento permanente que mantiene ininterrumpida su continuidad desde sus inicios hace más de 150 años en el mundo, y hace más de 90 años en el Perú.
-La organización partidaria del proletariado es, o debe ser, una organización permanente, o solamente una organización temporal. Como explicarse las propuestas de “autodisolución de las organizaciones proletarias”, y como explicarse los periodos en los cuales “no fue necesaria la existencia de partido”, ni era imprescindible militar en una organización partidaria, para continuar haciendo trabajo revolucionario.
-Para la lucha por la instauración del poder, es decir para la revolución socialista, la organización partidaria del proletariado en cada país, es necesaria e imprescindible, eso está demostrado por la práctica concreta de las revoluciones proletarias que se desarrollaron en el siglo XX. Pero, para el gobierno del poder, es decir para la construcción del socialismo, cuando ya se ha instaurado la dictadura del proletariado, el partido no es necesario, y se puede y se debe prescindir de él. Que nos enseña la historia de más de 90 años de experiencia de construcción del socialismo (desde 1917 hasta la actualidad). La dictadura del proletariado en el Perú debe ser la dictadura de un partido, o debe ser la dictadura de una clase.
Esta última pregunta, es la pregunta clave para definir el nombre correcto del partido: O Partido Socialista, con programa socialista (construcción del estado socialista) hasta el inicio de la instauración de la dictadura del proletariado, después se diluye, y el poder lo asume directamente la clase proletaria; o Partido Comunista, con programa comunista, que debe subsistir hasta la culminación de la construcción del socialismo, y el inicio de la época comunista. El problema del nombre del partido es así de simple, problema que otros se empeñan en embrollar, recurriendo a una rebuscada y enrevesada retórica.
En síntesis, el problema de fondo de la construcción partidaria en el presente, es que tipo de estado tenemos como objetivo programático para construir en el futuro. O Estado tipo Comuna (sin burocracia, ni ejército), o Estado burocrático militar (con Partido Comunista y Ejercito Rojo, viviendo parasitariamente y cabalgando encima de los trabajadores). ¿Qué lecciones nos enseñan las valiosas experiencias del inicio de la construcción del socialismo en el siglo XX en la URSS, China, Europa Oriental, Cuba y el Sudeste Asiático?
Estas son algunas de las preguntas de carácter teórico, que debemos de plantearnos seriamente al estudiar los libros fundamentales de los maestros del proletariado: Marx, Engels, Sorel, Luxemburgo, Lenin, Stalin, Mariátegui, Gramsci, Dimitrov, Mao Zedong, Chou Enlai, Ho Chi min, Guevara, y otros.
Sin darnos respuestas a estas, y otras pocas preguntas, simplemente estaremos improvisando, seguiremos jugando irresponsablemente a “construir partido”, nos estaremos engañando a nosotros mismos, a nuestros compañeros de lucha, al proletariado y al pueblo peruano. Es decir estaremos perdiendo el tiempo inútilmente.
Respecto a la Historia del Movimiento Socialista Peruano.-
I
- Es correcto considerar que la historia del movimiento socialista peruano comienza en 1918, con la publicación de la revista Nuestra Época (junio 1918) y la constitución del Comité de Propaganda y Concentración Socialista(noviembre de 1918)
- Porqué razones Mariátegui no aceptó la propuesta de Luís Ulloa de constituir el Partido Socialista en 1919 (revisar Antecedentes y Desarrollo de la Acción Clasista de JCM)
- Porqué razones Mariátegui no aceptó la impositiva propuesta de César Falcón de constituir el Partido Comunista del Perú en 1923 (revisar Carta de César Falcón a Mariátegui de setiembre de 1923)
- Mariátegui adhirió a la Internacional Comunista en 1922, estando todavía en Italia, con motivo del congreso de Livorno del Partido Socialista Italiano. Regresó al Perú en 1923, con la finalidad de organizar un partido de clase. Porque razón Mariátegui, a su regreso al país, se declaró partidario del frente único proletario, aplicando esa política desde 1923 hasta 1930, y porqué no constituyó de inmediato el partido proletario.
- Para hacer trabajo revolucionario, siempre es imprescindible militar en un partido. Que nos enseñan las experiencias de Marx y Engels entre 1852 y 1869, y la experiencia de Mariátegui entre 1918 y 1928.
- Después de diez años de intensa actividad teórica, política y organizativa, recién en 1928, Mariátegui consideró que se habían creado las condiciones, y ya era necesario constituir el Partido Socialista del Perú. ¿Cuales fueron esas condiciones mínimas necesarias para constituir el partido de clase del proletariado peruano, el aspirado y propuesto partido de masas y de ideas?
- Actualmente existen esas condiciones mínimas necesarias, para organizarse partidariamente, o nuevamente estamos jugando irresponsablemente a construir partido, como pretendieron Ulloa en 1919 y Falcón en 1923.
Si no nos planteamos seriamente la última pregunta, partiendo del análisis concreto de la realidad presente, no entenderemos nada de la construcción partidaria, todos nuestros esfuerzos serán en vano, y lo más grave, entramparemos el avance de la lucha por el socialismo en nuestro país.
II
-En la Reunión de Santa Eulalia (Chosica) del 20 de mayo de 1930, dirigida por Eudocio Ravines, simplemente se cambió el nombre del partido, como algunos siguen afirmando; o es que se constituyó otro partido totalmente diferente al Partido Socialista del Perú, tanto en lo teórico, político como orgánico. ¿Cuáles fueron las grandes diferencias, y cuales las pocas coincidencias, entre el PS del P de Mariátegui y el PC del P de Ravines?
Si queremos estudiar la historia del Partido Comunista del Perú, en primer lugar, tenemos que comenzar por respondernos documentada y seriamente esta última pregunta. Todo lo que ocurrió después, ha sido un simple corolario de esa decisión del 20 de mayo de 1930, reunión en la cual se perpetró latrocinio contra la obra de Mariátegui.
-Porqué razones César Vallejo, Armando Bazán, José María Arguedas, Guillermo Rouillon, y muchos otros destacados socialistas peruanos, se mantuvieron y otros se mantienen en la actualidad, distantes de la organización partidaria del PC del P, y sin embargo trabajaron de manera efectiva por el socialismo, y dejaron grandes aportes al desarrollo del socialismo peruano.
-Quienes aportaron de manera más decisiva al desarrollo del socialismo peruano, los nombrados más arriba, o personajes como Jorge del Prado, José Sotomayor, Saturnino Paredes, Alberto Moreno, Abimael Guzmán, y otros más, que durante décadas “militaron orgánicamente” en algunas de las múltiples facciones del PC del P.
III
-En la década de 1940 se realizaron Tres Congresos Nacionales del Partido Comunista Peruano. En la década de 1960 el IV Congreso, y tres Conferencias Nacionales (la IV en 1964, la V en 1965, y la VI en 1969). Debemos de investigar, si en alguno de esos eventos del PCP, se expuso, debatió y aprobó, o simplemente se ignoraron, los documentos que Mariátegui dejó elaborados para el Primer Congreso del Partido Socialista del Perú (es decir los Principios Programáticos de octubre de 1928, y las Cuatro Tesis Anexas al Programa elaboradas en mayo de 1929).
-Si no se tomaron en cuenta esas propuestas de Mariátegui, con que derecho, las diferentes facciones en que se ha dividido, y descompuesto, el PCP se reclaman de haber retomado el Camino de Mariátegui.
-Desde 1960 en adelante, en cuantas facciones se ha descompuesto el PCP. ¿Alguna de esas minúsculas facciones cumple con los requisitos que Mariátegui se reclamó en 1919, para poder constituir partido? Nuevamente, ¿cuáles fueron esos requisitos de 1919?
Respecto a la situación actual.-
Usted conoce mejor que yo, cual es la situación actual de las diferentes facciones en que se dividió, y se sigue dividiendo, el PC del P. En otra oportunidad podremos desarrollar un esquema de investigación para ubicar el carácter, origen, desarrollo y perspectivas, de todas y cada una de esas minúsculas facciones.
Bueno pues, este es un primer esquema de preguntas para poder intercambiar ideas respecto a la historia del PCP. Yo milité con mucha convicción y entusiasmo, en algunas de las variopintas facciones del PCP, durante diecisiete años, entre 1967 y 1984. Desde 1980, comencé a plantearme algunas de estas preguntas, y también a investigar y comenzar a responderme seriamente cada una de ellas. No me arrepiento de haber militado en el PCP en los primeros años de mi acción política, “de los errores se aprende mucho”, y nos prepara para no volver a cometerlos. Actualmente no milito, ni pienso militar, en ninguna de las minúsculas facciones del PC del P existentes en el país. Tampoco le estoy disputando, ni pienso disputarle la “secretaria general” a ninguno de los caudillos personalistas que tienen esa aspiración. Pero si me considero un hombre de tendencia, un hombre de partido, y militante socialista, como lo fueron Marx y Engels entre 1852 y 1869; como lo fue Mariátegui entre 1918 y 1928; y como lo fueron, y lo son, muchos socialistas peruanos que se mantuvieron y se mantienen al margen de la organización del PCP, total “el hábito no hace al monje”.
Soy un convencido que muy pronto se crearan las condiciones objetivas y subjetivas para la REIVINDICACION DEL SOCIALISMO PERUANO. Y espero que me alcancen los años, para colaborar en esa tarea. Tarea histórica que ya no le corresponde a mi generación, la cual se encuentra dispersa y en retirada; si no que le corresponde asumirla y cumplirla a la actual generación, es decir a la cuarta generación del movimiento socialista peruano (1995-2020), es decir a la generación de usted.
La primera generación del socialismo peruano cumplió exitosamente su tarea generacional: concurrir a la creación del socialismo peruano;
La segunda generación también cumplió su tarea: defender y desarrollar el Camino de Mariátegui;
De igual manera, la tercera generación también cumplió, en lo fundamental, su tarea generacional: la reconstitución del socialismo peruano;
Ahora, le toca a la cuarta generación, demostrar en los hechos, que también es capaz de cumplir su propia tarea generacional: reivindicar el socialismo peruano, lo cual se debe de expresar en la preparación de la organización, del pueblo, de la clase y de la vanguardia. Tarea nada fácil, pero realizable. Los activistas de la actual generación ya tienen quince años de experiencia propia (1995-2010) y solamente le quedan diez años por delante (2010-2020). Tienen que acelerar el paso.
Cuáles son las diferencias entre las tareas generacionales de la tercera generación (1970-1995), y la cuarta generación (1995-2020). ¿Considera correcto que se siga proponiendo “la reconstitución del partido”, como se proponía al comenzar la década de 1970?, acaso las tareas centrales no van cambiando con el desarrollo de la historia.
Espero que estas notas, escritas al vuelo, le sirvan para ordenar sus estudios sobre el tema que tanto le interesa.
Saludos
Miguel Ángel Aragón
jueves, 25 de agosto de 2011
LA DESCOLONIZACIÓN, UNA TAREA URGENTE
Dr. Hugo SALINAS
salinas_hugo@yahoo.com
Aureliano Turpo Choquehuanca nos propone reflexionar sobre un tema sumamente importante y de actualidad: la descolonización. En tiempos que consideramos habernos liberado de todas las ataduras con el pasado, es incluso traumático levantar ciertos velos. A pesar de los 200 años transcurridos de “independencia y de vida republicana”, nuestro comportamiento es el de un “colonizado colonizador”. En realidad, no hemos logrado todavía descolonizarnos. “Los distintos tópicos analizados (en su libro), nos dice Aureliano Turpo, esperamos sean de reflexión y de retoma de la sabiduría de nuestros pueblos y naciones ancestrales y contemporáneos, para darle continuidad a nuestro proceso civilizatorio tawantisuyano interrumpido.” Pero, ¿en qué consiste la descolonización? ¿A la puerta del tercer milenio, quienes somos y qué ganamos con descolonizarnos? Son las preguntas que laceran el espíritu de Aureliano.
Sin ninguna duda que la descolonización mental nunca será suficiente para alcanzar nuestra “independencia”. Hay algo más profundo que siempre impedirá una real descolonización. Se trata de un cierto tipo de mecanismos de la actividad económica que sustentan estructuras mentales, institucionales, e incluso de comportamiento del colonizado colonizador. Estos mecanismos, hasta la fecha, no han sido tocados en lo más mínimo.
Cuando los españoles invadieron los pueblos del Abya Yala (América), desde fines del siglo XIV, instalaron un tipo de actividad socio-económica que está en completa contradicción con lo sustancial de la comunidad de ayllus imperante en dichos suelos. La forma de producir que impusieron fue la encomienda, un remedo del feudalismo imperante en España. Una actividad basada en la propiedad privada territorial, parcelada y administrada por siervos, esclavos y gamonales. Los señores de las cortes españolas, mucho más interesados en recuperar y reunificar sus territorios, dejaron pasar el carro de la historia. Siguieron con las normas del feudalismo sin dejar abertura a la industria, el eje de una nueva economía basada en la producción de bienes más allá de los productos primarios de la agricultura. Una nueva economía con patrones y asalariados, que tenían formas de vida y comportamientos diferentes a las del gamonal, del siervo y del esclavo.
Además, el segundo elemento de la actividad socio-económica que los españoles introdujeron fue la repartición individualista del resultado del esfuerzo productivo del conjunto de pueblos y naciones. Es decir que el 100% del resultado de la actividad socio-económica pasó a pertenecer únicamente a los invasores. Una norma ya imperante en el resto del mundo desde hacía aproximadamente diez mil años. Una norma, una vez más, en completa contradicción con la comunidad de ayllus que imperaba en el Abya Yala. De tal forma que, las personas y las comunidades nativas fueron obligadas a transformar su cuadro de vida y comportamiento. Pasaron de un bienestar general hacia la búsqueda enfermiza del bienestar individual. La sociedad cayó “en la trampa de la negación de su yo comunitario, para asimilarse en el yo individualista occidentalizado euro-español.”
La invasión española impuso normas obsoletas y contradictorias con el buen entendimiento entre las personas, su ayllu, su medio ambiente y su desarrollo espiritual. No trajo lo nuevo de la economía, el crecimiento industrial; ni mantuvo lo mejor de la Humanidad, el Vivir Bien, el Hallin Kausay. Solo fue terracidio, genocidio, destrucción de la naturaleza, y del alma de las personas que vivían en la comunidad de ayllus y marcas. Ante ello, ¿qué hicieron los hijos de la Madre Patria?
Personajes como San Martín, Bolívar y Sucre, rompieron la dependencia con España y convirtieron a los colonizados en colonizadores. Paralelamente, reprodujeron la escoria de la Humanidad: una forma de producir (el feudalismo) ya completamente superada en la creación de riquezas y, una repartición individualista del resultado del esfuerzo de todo un pueblo. En breve, continuaron con el terracidio del Abya Yala, el genocidio de los nativos, el desprecio del alma humana, y de la naturaleza; ahondando las grandes diferencias socio-económicas entre unos y otros.
“El orden social en que viven los hombres en una época o en un país dados, precisa Federico Engels, está condicionado por […][1] la producción y la reproducción de la vida inmediata.”[2] Y para que este orden social se desenvuelva dentro de los cánones del Vivir Bien, es indispensable la propiedad comunitaria. Esto nos conducirá a “retomar los valores culturales vivos de nuestra civilización ancestral, como la solidaridad, la reciprocidad, la complementariedad, que dan sentido al nosotros, en franca oposición al yo egocéntrico, individualista, discriminador y racista.” Nos encontramos, entonces, en una “lucha de civilizaciones y no de clases sociales”, puntualiza Aureliano Turpo Choquehuanca, en su libro “La Descolonización”.
Hugo SALINAS
http://www.eumed.net/libros/2010f/863/index.htm
http://bvirtual.bnp.gob.pe/BVIC/Captura/upload/salinas_progresoybienestar.pdf
http://www.alainet.org/active/47366&lang=es (Hacia dónde va la economía-mundo)
sábado, 20 de agosto de 2011
CRISIS Y COLAPSO: Theotonio Dos Santos comenta a Inmanuel Walerstein
¿Se puede comprender el caos?
Theotonio Dos Santos
Alainet
19-08-2011
Algunos comentarios a la entrevista de Immanuel Walerstein
Desde hace muchos años vengo discutiendo con Immanuel (1) y un grupo de compañeros sobre esta situación que preveíamos, basados no solamente en los ciclos largos de Kondratiev. Con todo, tenemos que tener claro algunos puntos que aún resultan polémicos, incluso dentro de nuestro grupo de estudiosos del sistema mundial. Es necesario destacar dos cosas.
Primero, no estamos en una fase desfavorable del ciclo largo, estamos en medio de un periodo de crecimiento. Esto explica que a pesar de las dimensiones colosales de la crisis de la especulación financiera internacional, continúa habiendo crecimiento de la economía mundial. Este ciclo positivo deberá agotarse en aproximadamente 10 años cuando deberemos sustituir el actual patrón tecnológico mundial por un nuevo paradigma cuya introducción exigirá una destrucción masiva de gran parte de la estructura económica mundial y de las varias estructuras nacionales. En ese momento, la crisis actual parecerá un chiste y la idea de caos que maneja Immanuel se aproximará bastante de la realidad de este nuevo periodo.
Segundo, la desproporcionada intervención fiscal del gobierno estadunidense para salvar el sistema financiero actual es similar a la intervención del Japón en el comienzo de la década de 1990 para salvar los absolutamente inútiles bancos japoneses. Ella es peor aún porque los Estados Unidos, además de transferir recursos colosales al sistema financiero casi tan inútil como el japonés, tiene gastos insostenibles como las guerras sucesivas y como las "prevenciones" de guerras megalómanas con las que pretenden someter todo el planeta a su dominio.
Luego, los Estados Unidos no pueden más situarse como la gran "locomotora de la economía mundial", como viene ocurriendo ya en los últimos 10 años. Deberá tener un crecimiento mediocre junto con Europa. A pesar de que ésta podría tener una mejor situación si asumiera su destino euro-asiático y abriera sus economías, sociedades y cultura a una audaz aproximación a Rusia, China e India. Y a la vez apoyara el sur de la Europa para conectarse fuertemente con Turquía, con todo el Oriente Medio, África y América Latina. ¡Abajo el Atlantismo que destruye a Europa!
En cuanto a China, no tiene otro camino que usar sus dólares e incluso sus títulos de la deuda estadounidense para adquirir empresas en toda la economía occidental, utilizando los fondos soberanos que ya tiene y los nuevos que piensa crear. Su destino es convertirse en la principal fuerza económica (y financiera) del capitalismo mundial.
Valga la capacidad de la teoría económica no ortodoxa para comprender estas realidades y actuar sobre ellas. Feliz o infelizmente el capitalismo de estado de China y el de gran parte del llamado Tercer Mundo deberán dirigir la economía mundial a partir de un periodo muy corto. Estamos en plena transición a esta nueva fase.
Luchemos para que ese capitalismo de Estado esté sometido a fuerzas democráticas (es decir, las mayorías sociales y no las "élites" antidemocráticas occidentales, a pesar de sus discursos liberales).
Luchemos para encontrar regímenes políticos que permitan este diálogo constante entre los Estados y los pueblos. Las formas de representación electoral usadas en el Occidente están en plena degradación con un descontento de masas colosal, pues los grandes movimientos de masa del momento no son las rebeliones árabes y sí la ocupación de las calles europeas por las grandes protestas populares.
No extrañen el hecho de que las noticias monitoreadas por la gran prensa internacional no les dejen visualizar esta imagen. Hay toda una nueva agenda a desarrollar en esta nueva situación histórica. América Latina está haciendo un esfuerzo muy positivo en esta dirección. Ella incluye una drástica reforma de los medios de comunicación y una mayor comunicación Sur/Sur. Tenemos que pensar con energía, audacia y creatividad. Inmanuel Wallerstein es uno de los pocos que está en esta trinchera.
Nota:
(1) Wallerstein: Se vienen años de incertidumbre y caos mundial:http://www.rebelion.org/noticia.php?id=134114
Theotonio Dos Santos es Presidente de la Cátedra y Red sobre Economía Mundial y Desarrollo Sostenible de la UNESCO y la ONU. Profesor emérito de la Universidad Federal Fluminense (UFF) de Río de Janeiro. http://theotoniodossantos.blogspot.com
viernes, 19 de agosto de 2011
A 56 AÑOS DE LA PRIMERA EDICION EXTRANJERA DE 7 ENSAYOS DE INTERPRETACION DE LA REALIDAD PERUANA
Ernesto Odebret Zúñiga.
Ha transcurrido más de medio siglo (56 años exactamente) desde la fecha de aparición de la edición en Chile del libro 7 Ensayos de Interpretación de la Realidad Peruana de José Carlos Mariátegui, realizada el año 1955. Efectuada en Chile 27 años después de su primera publicación en el Perú, tiene el mérito y el privilegio de ser la primera edición chilena y la primera edición extranjera de 7 Ensayos de Interpretación de la Realidad Peruana.
El libro del Amauta fue publicado por Editorial Universitaria, empresa editora de la estatal Universidad de Chile, dentro de su colección “América Nuestra “ que creó y dirigió Clodomiro Almeyda Medina, destacado intelectual y político chileno, profesor de esa Universidad y dirigente del histórico Partido Socialista de Chile.
En esta primera publicación chilena de 7 Ensayos de Interpretación de la Realidad Peruana, se descubre hoy -con la perspectiva más clara que da el paso del tiempo- la participación en su edición de varios destacados personajes de la cultura, intelectuales y artistas, de Chile y Perú de esos años, que hoy es necesario recordar y valorar; más aún, en un momento como el actual, en que renacen los esfuerzos por conseguir la indispensable unidad latinoamericana.
La colección de libros “América Nuestra” había sido creada, como lo recuerda en sus memorias Clodomiro Almeyda, para “… abordar los grandes temas de la realidad latinoamericana… ”(1); y luego señala que la segunda publicación que se hizo dentro de la colección “América Nuestra” “… fue la primera edición chilena de Siete Ensayos de Interpretación de la Realidad Peruana, de José Carlos Mariátegui, libro prácticamente desconocido en Chile y sobre el que existe consenso en considerarlo como uno de los primeros y más importantes intentos por aplicar la metodología histórica marxista, con sentido creador, al análisis de la realidad de un país latinoamericano…” (2). Como se puede apreciar por los comentarios de Clodomiro Almeyda, al parecer, 7 Ensayos… era una obra muy conocida entre algunos intelectuales y dirigentes políticos de izquierda, pero era necesario darlo a conocer a sectores más amplios de la sociedad chilena de la época y esa fue una de las tareas que se propuso Almeyda con la publicación del libro de Mariátegui en Editorial Universitaria.
Es importante destacar que Clodomiro Almeyda (1923-1997), con títulos de abogado, de sociólogo, y Licenciado en Filosofía, fue un socialista marxista “convicto y confeso” como lo demostró a lo largo de su vida y en especial en su participación como Ministro de Relaciones Exteriores durante todo el gobierno socialista de la Unidad Popular del Presidente Salvador Allende (1970-1973), y después del golpe militar, en su lucha inclaudicable contra la dictadura de Pinochet. Se considera que fue el “brazo derecho” de Salvador Allende y el segundo personaje más importante de ese histórico gobierno socialista de Chile.
Clodomiro Almeyda también está considerado como uno de los más importantes teóricos marxistas en Chile y entre sus libros más destacados están los títulos: Hacia una Teoría Marxista del Estado, publicada en 1948; Sociologismo e Ideologismo en la Teoría Revolucionaria, publicada en 1972. Además, fue autor de numerosos artículos y ensayos, entre los que se pueden citar : Visión Sociológica de Chile (1957), La Concepción Marxista del hombre (1963), En Torno a la Coexistencia Pacífica (1963); Lenin, Arquetipo del Político Revolucionario (1970), Marx: el más Eminente Pensador de Nuestro Tiempo (1983), Hacia la Unidad Latinoamericana, intervención en el “Encuentro sobre la Deuda Externa de América Latina y el Caribe”, en La Habana 1985, Lección de Moral de Lealtad, discurso en el funeral oficial del Presidente Salvador Allende (4 de Septiembre de 1990).
En el momento de la publicación en Chile de 7 Ensayos de Interpretación de la Realidad Peruana en 1955, gobernaba el país por segunda vez Carlos Ibáñez del Campo (1952 a 1958 ). Éste era un militar en retiro que ya había gobernado antes entre 1927 y 1931. Al iniciarse el gobierno de Ibáñez, el conjunto del movimiento popular chileno experimentaba muchos problemas: la principal central sindical estaba dividida y sus dirigentes políticos de izquierda eran perseguidos. En cuanto a los partidos más importantes de la izquierda chilena: el Partido Comunista, estaba ilegalizado y luchaba en las calles por recuperar su legalidad; el Partido Socialista estaba dividido. Los problemas más importantes del movimiento popular y de los partidos socialista y comunista se habían iniciado durante el gobierno anterior del presidente Gabriel González Videla (1946 a 1952), miembro del Partido Radical, que rompe su alianza política con el Partido Comunista, como resultado de las presiones del gobierno de los Estados Unidos, que iniciaban la aplicación temprana de la llamada “guerra fría” en Chile. González Videla, primero, expulsó a los ministros comunistas de su gobierno y, el año 1948, aprobó una ley llamada Ley de Defensa de la Democracia, que declaró fuera de la ley al Partido Comunista y sin derechos políticos a sus militantes. La figura símbolo de esta época fue el poeta Pablo Neruda, parlamentario del Partido Comunista, que fue desaforado e implacablemente perseguido por el gobierno de González Videla, lo que le obligó a salir clandestino al exilio a Europa por varios años. La alianza de radicales, socialistas y comunistas se había iniciado exitosamente en Chile el año 1938, con la victoria electoral del Frente Popular (algo inédito y único en América Latina), que eligió como presidente al radical Pedro Aguirre Cerda.
El Partido Socialista, por su parte, al inicio del Gobierno de Ibáñez, se encontraba dividido desde el año 1948, como consecuencia de la aprobación en el gobierno de González Videla, de la antes mencionada Ley de Defensa de la Democracia, que ilegalizó al Partido Comunista. Un sector del Partido Socialista, el anticomunista, liderado por Oscar Schnake, y Juan Bautista Rossetti, votó a favor de la Ley que ilegalizó al Partido Comunista y persiguió a su militancia; este sector se quedó además, con el nombre oficial de Partido Socialista de Chile. El sector del Partido Socialista que no aprobó la Ley que ilegalizó al Partido Comunista, liderado por los dirigentes Raúl Ampuero, Eugenio González y Clodomiro Almeyda (el entonces joven dirigente de socialismo chileno de 25 años), a pesar de ser el sector mayoritario, tuvo que cambiar el nombre de su dividido partido, adoptando el nombre de Partido Socialista Popular (1948 a 1957). Esta división del Partido Socialista de Chile duró nueve años, hasta 1957, en que realizaron un Congreso de Unidad, que reunificó las dos facciones en el Partido Socialista de Chile.
Como se pude apreciar, la publicación en 1955 de 7 Ensayos de Interpretación de la Realidad Peruana por Editorial Universitaria, en la colección dirigida por Clodomiro Almeyda, se produce en un momento muy significativo del desarrollo del movimiento popular en Chile que, entre sus prioridades, buscaba recuperar la unidad de sus organizaciones sindicales, la unidad y la legalización de sus principales partidos de izquierda ( socialista y comunista ) y retomar la iniciativa en la lucha por alcanzar el poder.
Singular relieve tiene en esta primera publicación chilena de 7 Ensayos de Interpretación de la Realidad Peruana, el prólogo escrito para esta edición por el periodista y escritor peruano Guillermo Rouillon (1917-1978), reconocido como el más destacado biógrafo de José Carlos Mariátegui. Este prólogo lleva por título Mariátegui el Hombre y el Precursor y es una magnífica presentación de la vida y la obra del Amauta, donde se destaca con especial énfasis los esfuerzos de Mariátegui por despertar “ la conciencia social de los trabajadores y de la inteligencia”; como “ expresión de su misión socialista”.(3). Se puede decir que este prólogo es un magistral boceto escrito por Guillermo Rouillon, de lo que después sería su obra mayor, su reconocida y celebrada biografía en tres tomos de José Carlos Mariátegui titulada La Creación Heroica de José Carlos Mariátegui.
Es interesante conocer (por las variadas y múltiples implicancias que han tenido los exilios políticos apristas durante el siglo XX en Chile) que Clodomiro Almeyda solicitó a Guillermo Rouillon que escribiera el prólogo de esta primera edición chilena de 7 Ensayos de Interpretación de la Realidad Peruana, por recomendación que de Rouillón le hiciera Manuel Seoane, el destacado dirigente aprista que en esos años del siglo pasado, vivía su segundo exilio en Chile, como consta en carta que conserva la Sra. Armida Picón Vda. de Rouillon.(4)
Otro de los ilustres personajes que formó parte del distinguido grupo de intelectuales y de artistas que aportó en la publicación de la primera edición chilena de 7 Ensayos de Interpretación de la Realidad Peruana, fue el destacado pintor y grabador chileno Nemesio Antúnez Zañartu (1918-1993) quien fuera el creador de la portada del libro de la primera edición chilena de 7 Ensayos…, identificada por la estampa con el diseño de la silueta de América Latina.
El pintor Nemesio Antúnez, de larga trayectoria artística, fue profesor en la Escuela de Arte de la Universidad Católica de Chile entre 1959 y 1961. En 1961 asumió como Director del Museo de Arte Contemporáneo de la Universidad de Chile. Entre 1969 y 1973 ocupó el cargo de Director del Museo Nacional de Bellas Artes. En 1974, como consecuencia de golpe militar del 11 de septiembre de 1973 y la implantación de la dictadura de Pinochet, se exilia en Europa. En 1990, a partir del reinicio de la democracia en Chile, reasume como Director del Museo Nacional de Bellas Artes, cargo que ocupó hasta su fallecimiento en 1993.
El cuarto personaje que participó en la primera edición chilena de 7 Ensayos de Interpretación de la Realidad Peruana fue Mauricio Amster (1907-1980 ), prestigioso diseñador gráfico y tipógrafo, que se encargó de la tipografía del libro. Mauricio Amster, nació en Polonia y estudió Artes Gráficas en Berlín. Con 23 años de edad viajó a España donde trabajó en diarios y revistas importantes. En la Guerra Civil española (1936-1939) fue militante republicano y estuvo en el frente como miembro de las famosas Brigadas Internacionales, luchando contra las huestes fascistas de Franco. Luego, por heridas de guerra, pasó a trabajar en el Ministerio de Instrucción Pública, donde creó una “Cartilla Escolar”, con la que miles de soldados analfabetos aprendieron a leer en las trincheras mismas. Al terminar la Guerra Civil, salió al duro exilio en Francia, junto a decena de miles de republicanos derrotados.
El poeta Pablo Neruda, que conocía de cerca las graves dificultades que vivían en Francia los refugiados españoles, gestionó y consiguió en Chile que el gobierno progresista del Frente Popular ayudara a los refugiados republicanos españoles en Francia. El presidente Pedro Aguirre Cerda nombró a Neruda “Cónsul Especial para la Emigración Española en Francia”; con la misión de trasladar a Chile a refugiados españoles.
Pablo Neruda cumplió con su misión y el 3 de Septiembre de 1939 llegaron al puerto de Valparaíso en el barco “Winnipeg” 2.200 refugiados españoles, entre ellos llegó a Chile Mauricio Amster. En Chile, Mauricio Amster desarrolló una brillante actividad profesional y aportó al avance de la actividad editorial. Entre sus contribuciones más destacadas están: el haber publicado un libro de su especialidad Guía para Autores, Editores, Correctores y Tipógrafos, considerado un clásico en el tema, y el haber participado como cofundador de la Escuela de Periodismo de la Universidad de Chile, donde además ejerció como profesor.
Evidentemente Mauricio Amster fue un auténtico internacionalista que contribuyó en los lugares que le tocó vivir con el máximo de su capacidad profesional. Su participación como encargado de la tipografía en la primera edición chilena de 7Ensayos…distingue especialmente esta publicación.
Portada de la primera edición chilena y, a la vez, extranjera
Indudablemente, la primera edición de 7 Ensayos de Interpretación de la Realidad Peruana en Chile el año 1955 reunió a una pléyade de intelectuales y artistas de izquierda de distintas nacionalidades, constituyendo un vivo ejemplo de lo que significa mantener el indispensable espíritu de colaboración, que permite la unidad tan necesaria para conseguir la materialización de una obra como ésta y, más aún, para concretar los grandes objetivos de justicia social en América Latina y en el mundo, ahora.
Notas:
1.- ALMEYDA MEDINA, Clodomiro. Reencuentro con mi Vida. Las Ediciones del Ornitorrinco. Santiago Chile 1987. pp. 154.
2.- ALMEYDA MEDINA, Clodomiro. Ob. Cit. pp. 155.
(Nótese un hecho que llama la atención en el título de esta primera edición chilena de 7 Ensayos …, se ha cambiado el número “7” del título original del libro por la palabra “ Siete”, entonces el título de la edición chilena es: Siete Ensayos de Interpretación de la Realidad Peruana .
3.- ROUILLON, Guillermo. Prólogo: “Mariátegui, el Hombre y el Precursor “.
Libro: Siete Ensayos de Interpretación de la Realidad Peruana. Editorial Universitaria, S.A. Santiago de Chile, 1955. pp. xx-xxi.
4.- Esta es información proporcionada por el sociólogo Antonio Rengifo Balarezo, destacado estudioso de la obra de José Carlos Mariátegui.
INCLUSIÓN SOCIAL Y TRANSFORMACIÓN
Dr. Hugo SALINAS
salinas_hugo@yahoo.com
Una nueva promesa: la inclusión social. Una nueva mecida. ¿Lo será? ¿Qué se entiende por inclusión social? ¿Qué pretende resolver? ¿Es realmente el camino al Gran Cambio, a la Transformación socio-económica que exigen las mayorías? Incluso se pretende hacer de la inclusión social un sinónimo del Gran Cambio. ¿Lo es realmente?
En términos concretos, tal como se le viene utilizando, la inclusión social se orienta a la realización de programas gubernamentales tales como Juntos, el bono juancito pinto, el bono de desarrollo humano, aliméntate ecuador, el combo escolar, la jubilación a los 65 años o las cunamás. El peso de esta corriente es tan fuerte, y la idea de la Transformación tan mezclada con ella que, tal como en la República de El Salvador, ya se ha creado la Secretaria de Inclusión Social. ¿A través de la realización de estos programas se logrará el Gran Cambio?
Comencemos por precisar el contenido de la Transformación. Ella exige la creación de empresas, grandes empresas, con un nuevo tipo de Repartición de sus utilidades. La totalidad de sus utilidades deberán repartirse entre el total de la población del país, en igualdad de condiciones. Es un nuevo mecanismo a crear desde cero. Es este mecanismo que eliminará la pobreza y el desempleo.
En cambio, las políticas de inclusión social, tienen otra forma de financiamiento y sus objetivos son diferentes. Respeta la posición hegemónica de la Repartición Individualista, en donde el 100% de las utilidades pertenecen única y exclusivamente a los propietarios y accionistas de las empresas. Es decir, respeta que el 100% del Resultado Neto del esfuerzo de un país sea apropiado por un puñado de personas. Algo más, el financiamiento de la inclusión social proviene de donaciones del exterior y, fundamentalmente, de impuestos tanto a las personas como a las empresas. Es solamente una acción Redistributiva, parcial y opaca, y en ningún momento una acción tendiente al Gran Cambio, a la Transformación de la sociedad y de la economía.
Así tenemos que el Banco Interamericano de Desarrollo (BID, 2010) en su documento “La Política Social en Bolivia”, explicita que la generación de “mayores ingresos a través del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH) […] ha dado un giro sustancial en la política social […] para mejorar las condiciones de vida de la población boliviana y en especial de la niñez.” Es decir, el financiamiento de la inclusión social proviene de un impuesto a las utilidades y no del uso de la totalidad de las utilidades. No cuestiona la Repartición Individualista de las utilidades. No pone en tela de juicio al mecanismo generador de pobreza y desempleo. Además, se orienta a sectores precisos de la población y no a la totalidad de la población.
De ahí que la CEPAL, (Comisión Económica para la América Latina y el Caribe), en su informe firmado por Mariana Naranjo “Ecuador: análisis de la contribución de los programas sociales al logro de los objetivos del Milenio”, señala que “casi la tercera parte de las inversiones sociales públicas, se realizaron bajo los tradicionales esquemas compensatorios practicados en Ecuador por más de veinte años, los cuales, pese a ser un componente importante de la política social ecuatoriana, evidencian serias limitaciones para contribuir a resolver los problemas de pobreza y desigualdad.”
Los programas de inclusión social, en consecuencia, no se orientan a resolver los problemas de pobreza y desigualdad, como lo exige la mayoría de la población, sino a paliar algunas necesidades de algunos sectores de la población. No es una política del Gran Cambio. No se orienta a eliminar la pobreza y el desempleo. No nos conduce a la ansiada Transformación. Es simplemente, una mecida más.
Lima, 18 de agosto del 2011
--
Hugo SALINAS
http://www.eumed.net/libros/2010f/863/index.htm
http://bvirtual.bnp.gob.pe/BVIC/Captura/upload/salinas_progresoybienestar.pdf
http://bvirtual.bnp.gob.pe/donaciones/hacia_donde_va_la_economia_mundo_3ra_edicion.pdf
jueves, 18 de agosto de 2011
¿REPARTICIÓN O DISTRIBUCIÓN?
Dr. Hugo Salinas
salinas_hugo@yahoo.com
Nuestros antepasados vivían de lo que cogían de los centros de alimentación (ríos, lagunas, bosques, praderas). Digo de una manera eufemística “nuestros antepasados” porque, actualmente, después de 200 mil años de grandes descubrimientos, incrementos de productividad, abundancia de bienes materiales, una gran parte de la población mundial vive todavía de esta manera.
Pero, bueno, todos se dedicaban a la misma actividad: recolección, caza o pesca. La creación de las herramientas de trabajo no cambia en nada el modus vivendi de nuestros antepasados. En cambio, la aparición de la agricultura facilita el desglose de la actividad socio-económica: unos se dedican a la agricultura y otros, a la ganadería; aún cuando muchos de aquellos grupos sociales eran agricultores y pastores a la vez. No obstante, ellos seguían viviendo de lo que producían. Eran economías de autoconsumo.
El progreso humano no se detiene. Esa es la particularidad del Homo Sapiens. Probablemente se comienza por la alfarería, luego sigue en importancia la textilería. Los alfareros, tejedores, en plena expansión, ya no consumen lo que producen. Para vivir deben vender su productos y con el dinero recibido comprar los bienes alimenticios y otros que requieren. Se ha ingresado a una nueva forma de producir y de vivir. Los intercambios con precios expresados en unidades monetarias se imponen. No hay escapatoria.
Y los centros de producción se convierten en inmensas fábricas, en donde los obreros convierten los productos intermediarios y las materias primas en bienes para consumo final o, incluso, para nuevos bienes intermediarios. El patrón de la fábrica tiene que tener mucho cuidado en los costos de producción a fin de obtener un margen de ganancia o utilidad. Y es ahí que nuestros economistas estándar nos han venido engatusando, por ignorancia o por mala fe. Veamos.
De una manera bastante simple digamos que para producir un bien se necesita efectuar gastos en materias primas y salarios. Una vez vendido el bien se obtiene el margen de beneficio o utilidad. Si a estos tres rubros de las cuentas de un empresario le descontamos las materias primas que ya habían estado producidas, lo que queda es precisamente el Valor Agregado por la actividad socio-económica; es decir, salarios + utilidades. A la suma de los dos se le llama también Producto Bruto Interno (PBI) de un país.
Y cuando nuestros gobernantes, políticos y economistas oficiales nos dicen que hay que incrementar el PBI para disminuir o, peor aún, eliminar la pobreza, es un cuento chino como lo diría Andrés Oppenheimer. Incrementar el PBI es, sin lugar a dudas, incrementar la masa de salarios y de utilidades del país. Los salarios se reciben como contraprestación a un esfuerzo realizado. Y las utilidades se reciben como contraprestación ¿de qué esfuerzo? Ninguno. De esta forma, los propietarios de las empresas o sus accionistas se hacen más millonarios de lo que ya son, con el esfuerzo de la fuerza de trabajo del país, y con el aliento de políticos y gobernantes corrompidos e intelectuales al servicio del “Establishement”.
El argumento que oponen para justificar ese robo que se viene practicando desde hace diez mil años es el de que, actualmente, las empresas se crean y desarrollan con el dinero y otros activos de sus propietarios o accionistas. Supongamos que así sea. Entonces, ¿por qué no crear y desarrollar empresas, las empresas más importantes del país, aquellas que producen ingentes utilidades, con el dinero del país? De esta forma, la masa de utilidades pertenecerá a todos los habitantes del país, y en partes iguales.
Si así fuera, pienso, todos los habitantes del país estarían de acuerdo en que el PBI crezca de más en más. Y todos, o la mayor parte, harían lo necesario para que ese PBI crezca de más en más. Me interesaría en que todos trabajen, que se llegue al pleno empleo de los recursos humanos por que, con ello, la parte que me correspondería sería aún más grande. Es decir, generaría un mecanismo de inter-acción humana positiva.
Aparte del incremento creciente que recibiría proveniente de mi parte de la masa de utilidades, mis salarios subirán una vez llegado al pleno empleo. Es la dinámica de las fuerzas de mercado. Y así estaríamos viviendo una economía de mercado con rostro humano.
Caraz, 28 de diciembre 2010
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Hugo SALINAS
http://www.eumed.net/libros/2010f/863/index.htm
http://bvirtual.bnp.gob.pe/BVIC/Captura/upload/salinas_progresoybienestar.pdf
http://www.alainet.org/active/47366&lang=es (Hacia dónde va la economía-mundo)
ESTA CRISIS ES UN MOMENTO, PERO ¿ES UNO DEFINITIVO?
Nota Breve
En Mayo/Junio del 2009, El Diario Ingles desarrollo una serie con el nombre El Futuro del Capitalismo, donde con bastante seriedad diferentes articulistas analizan la crisis y perspectivas del capitalismo. Creo que conocer este análisis de la crisis es importante para impulsar un análisis de la crisis desde una perspectiva socialista. No basta indicar que es una crisis inevitable del capitalismo o que es una manifestación de lo malo que esta el sistema capitalista o que se va a caer de lo descompuesto que está. Les alcanzo la traducción de este articulo de M. Wolf y al final les acompaño el original. Hay un cuadro que no aparece que luego se los hare llegar.
Saludos
Eduardo Vargas
ESTA CRISIS ES UN MOMENTO, PERO ¿ES UNO DEFINITIVO?
Por Martin Wolf Publicado: 19 de mayo de 2009 19:48 Traducción Eduardo Vargas Agosto, 2011
Es la crisis actual un punto de inflexión, con relación a la globalización dirigida por el mercado, el capitalismo financiero y la dominación occidental, por un lado y el proteccionismo, la regulación y el predominio de Asia por el otro? ¿O los historiadores lo juzgaran, en cambio, como un evento causado por tontos, con poco significado? Mi opinión personal es que va a terminar en el medio. No es ni una Gran Depresión, debido a que la política de respuesta ha sido tan determinada, ni es el 1989 del capitalismo.
Vayamos a examinar lo que sabemos y lo que no sabemos de su impacto en la economía, las finanzas, el capitalismo, el Estado, la globalización y la geopolítica.
En la economía, nosotros ya sabemos cinco cosas importantes. En primer lugar, cuando los EE.UU. coge una neumonía, todo el mundo cae gravemente enfermo. En segundo lugar, esta es la crisis económica más severa desde la década de 1930. En tercer lugar, la crisis es global, con un impacto especialmente grave en los países que se especializaron en la exportación de productos manufacturados o que dependían de las importaciones netas de capital.
En cuarto lugar, las autoridades han lanzado el paquete fiscal más agresivo, el mayor estímulo monetario y el mayor rescate financiero nunca antes visto en estas crisis. Finalmente, este esfuerzo ha traído un cierto éxito: la confianza está retornando y el ciclo de inventarios deben traer alivio. Como Jean-Claude Trichet, el presidente del Banco Central Europeo, señaló, la economía mundial está "cerca al punto de inflexión", con lo cual quería decir que la economía está disminuyendo a un ritmo decreciente.
Nosotros también podemos suponer que los EE.UU. liderará la recuperación. Los EE.UU. es una vez mas el país más keynesiano del mundo desarrollado. Podemos suponer también que China, con su paquete de estímulo masivo, será la economía más exitosa en el mundo.
Por desgracia, hay por lo menos tres cosas importantes que no podemos saber.¿Hasta dónde llegarán los excepcionales niveles de endeudamiento y si la caída del valor neto genere un aumento sostenido en el ahorro deseado de los hogares de los antiguos consumidores de alto poder adquisitivo? ¿Cuánto tiempo pueden los actuales déficits fiscales continuar antes que los mercados demanden mayor compensación por el riesgo? ¿Pueden los bancos centrales diseñar una salida no-inflacionaria desde políticas no convencionales?
En las finanzas, la confianza está retornando, con las diferencias entre los activos seguros y los riesgosos declinando a niveles menos anormales y una recuperación (modesta) en los mercados. La administración de los EE.UU. ha dado a su sistema bancario un certificado de salud razonable. Sin embargo, los balances del sector financiero se han disparado en las últimas décadas y la solvencia de los deudores está afectada.
Nosotros podemos suponer que las finanzas se recuperarán en los próximos años. Podemos suponer, también, que sus días de gloria han quedado atrás por décadas, al menos en el Oeste. Lo que no sabemos es hasta qué punto el "desapalancamiento", y la consiguiente depreciación de los balances en la economía vaya. Tampoco sabemos con cuánto éxito el sector financiero verá los intentos externos de imponer un régimen regulador más eficaz. Los políticos deberían haber aprendido de la necesidad de rescatar los sistemas financieros rellenos con instituciones demasiado grandes e interconectados para fracasar. Me temo que los intereses concentrados abrumarán al interés general.
¿Qué sobre el futuro del capitalismo, sobre la que el Financial Times ha creado esta fascinante serie? Sobrevivirá. El compromiso de ambos, China e India, a una economía de mercado no ha cambiado, a pesar de la crisis, aunque ambos estarán más nerviosos acerca de las finanzas sin restricciones. La gente en el lado de libre mercado insistirá en que el fallo debe ser ubicado más a la puerta de los reguladores que a la de los mercados. Hay una gran verdad en esto: los bancos son, después de todo, los más regulados de todas las instituciones financieras. Pero este argumento fallará políticamente. La disposición a confiar en el libre juego de las fuerzas del mercado en las finanzas ha sido dañada.
Nosotros podemos suponer, por tanto, que la era de un modelo hegemónico de la economía de mercado ha pasado. Los países se adaptaran, como siempre lo han hecho, la economía de mercado a sus propias tradiciones. Pero lo harán con más confianza. Como Mao Zedong podría haber dicho: "Dejen que mil flores capitalistas florezcan”. Un mundo con muchos capitalismos será complicado, pero divertido.
Menos claras son las implicaciones para la globalización. Sabemos que la inyección masiva de fondos del gobierno ha "desglobalizado" parcialmente las finanzas, con un gran costo para los países emergentes. Sabemos, también, que la intervención estatal en la industria tiene un tinte nacionalista fuerte. Sabemos, también, que pocos líderes políticos están dispuestos a hacer algo que sea muy diferente a lo que la mayoría de la gente opine respecto del libre comercio.
La mayoría de los países emergentes concluirán que la acumulación de enormes reservas de moneda extranjera y limitar el déficit en cuenta corriente es una buena estrategia. Esto es probable que genere una nueva ronda de desestabilización global de "desequilibrios". Esto parece una consecuencia inevitable de un orden monetario internacional defectuoso. Nosotros no sabemos cuan bien la globalización sobrevivirá a todos estos esfuerzos. Tengo la esperanza, pero no tan confiado.
El Estado, mientras tanto, está de vuelta, pero también parece siempre que está más en bancarrota. Los ratios de la deuda del sector público y del producto interior bruto parece probable que se dupliquen en muchos países avanzados el impacto fiscal de una gran crisis financiera puede, se nos ha recordado, ser tan costosa como una gran guerra.
Esto, entonces, es un desastre que los gobiernos de las economías avanzadas con lento crecimiento no pueden permitirse que se vea repetido en una generación. El legado de la crisis también limitará la generosidad fiscal. El esfuerzo por consolidar las finanzas públicas dominará la política por años, quizás décadas. El Estado está de vuelta, por lo tanto, pero será el Estado como intruso entrometido, pero no un gran gastador.
Por último, pero no menos importante, ¿qué es lo que significa la crisis para el orden político mundial? Aquí sabemos tres cosas importantes. La primera es que la creencia de que el Occidente, aunque ampliamente rechazado por el resto, por lo menos sabía cómo manejar un sistema financiero sofisticado, se ha desvanecido. La crisis ha dañado el prestigio de los EE.UU., en particular, bastante mal, aunque el tono del nuevo presidente ha ayudado. La segunda es que los países emergentes y, sobre todo China , son actores centrales, como se mostró en la decisión de tener dos reuniones seminales del Grupo de las 20 principales naciones, a nivel de jefes de gobierno. Ahora son elementos vitales en la formulación de políticas globales. La tercera es que se están haciendo esfuerzos para reformar la supremacía global, notablemente con el aumento de los recursos que están siendo dados al Fondo Monetario Internacional y con la discusión de los cambios de peso de los países dentro de éste.
Nosotros todavía sólo podemos adivinar como es que los cambios radicales en el orden político mundial resultaran. Los EE.UU. es probable que emerja como el líder imprescindible, despojado de las ilusiones del "momento unipolar. La relación entre los EE.UU. y China se convertirá en más central, con la India esperando su turno. El relativo peso económico y el poder de los gigantes asiáticos parece seguro que iran en aumento. Europa, mientras tanto, no está teniendo una buena crisis. Su economía y su sistema financiero han demostrado ser mucho más vulnerables que lo que muchos esperaban. Sin embargo, hasta qué punto un conjunto de instituciones reformadas y reequilibradas por la cooperación internacional, reflejaran las nuevas realidades es, hasta ahora, desconocido.
¿Cuál es entonces el resultado final? Mi conjetura es que esta crisis aceleró algunas de las tendencias y ha demostrado que otras - en particular aquellas en crédito y deuda - son insostenibles. Se ha dañado la reputación de la economía. Esto dejará un amargo legado para el mundo. Pero todavía no ha podido marcar ningún hito histórico. Para parafrasear lo que la gente dice sobre la muerte de los reyes: "El capitalismo ha muerto, larga vida al capitalismo."
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Future of Capitalism
This crisis is a moment, but is it a defining one?
By Martin Wolf Published: May 19 2009 19:48 | Last updated: May 19 2009 19:48
Is the current crisis a watershed, with market-led globalisation, financial capitalism and western domination on the one side and protectionism, regulation and Asian predominance on the other? Or will historians judge it, instead, as an event caused by fools, signifying little? My own guess is that it will end up in between. It is neither a Great Depression, because the policy response has been so determined, nor capitalism’s 1989.
Let us examine what we know and do not know of its impact on the economy, finance, capitalism, the state, globalisation and geopolitics.
On the economy, we already know five important things. First, when the US catches pneumonia, everybody falls seriously ill. Second, this is the most severe economic crisis since the 1930s. Third, the crisis is global, with a particularly severe impact on countries that specialised in exports of manufactured goods or that relied on net imports of capital.
Fourth, policymakers have thrown the most aggressive fiscal and monetary stimuli and financial rescues ever seen at this crisis. Finally, this effort has brought some success: confidence is returning and the inventory cycle should bring relief. As Jean-Claude Trichet, president of the European Central Bank, remarked, the global economy is “around the inflection point”, by which he meant that the economy is now declining at a declining rate.
We can also guess that the US will lead the recovery. The US is again the advanced world’s most Keynesian country. We can guess, too, that China, with its massive stimulus package, will be the most successful economy in the world.
Unfortunately, there are at least three big things we cannot know. How far will exceptional levels of indebtedness and falling net worth generate a sustained increase in the desired household savings of erstwhile high-spending consumers? How long can current fiscal deficits continue before markets demand higher compensation for risk? Can central banks engineer a non-inflationary exit from unconventional policies?
On finance, confidence is returning, with spreads between safe and risky assets declining to less abnormal levels and a (modest) recovery in markets. The US administration has given its banking system a certificate of reasonable health. But the balance sheets of the financial sector have exploded in recent decades and the solvency of debtors is impaired.
We can guess that finance will make a recovery in the years ahead. We can guess, too, that its glory days are behind it for decades, at least in the west. What we do not know is how far the “deleveraging” and consequent balance-sheet deflation in the economy will go. We also do not know how successfully the financial sector will see off attempts to impose a more effective regulatory regime. Politicians should have learnt from the need to rescue financial systems stuffed with institutions deemed too big and interconnected to fail. I fear that concentrated interests will overwhelm the general one.
What about the future of capitalism, on which the Financial Times has run its fascinating series? It will survive. The commitment of both China and India to a market economy has not altered, despite this crisis, although both will be more nervous about unfettered finance. People on the free- market side would insist the failure should be laid more at the door of regulators than of markets. There is great truth in this: banks are, after all, the most regulated of financial institutions. But this argument will fail politically. The willingness to trust the free play of market forces in finance has been damaged.
We can guess, therefore, that the age of a hegemonic model of the market economy is past. Countries will, as they have always done, adapt the market economy to their own traditions. But they will do so more confidently. As Mao Zedong might have said, “Let a thousand capitalist flowers bloom”. A world with many capitalisms will be tricky, but fun.
Less clear are the implications for globalisation. We know that the massive injection of government funds has partially “deglobalised” finance, at great cost to emerging countries. We know, too, that government intervention in industry has a strong nationalist tinge. We know, as well, that few political leaders are prepared to go out on a limb for free trade.
Most emerging countries will conclude that accumulating massive foreign currency reserves and limiting current account deficits is a sound strategy. This is likely to generate another round of destabilising global “imbalances”. This seems an inevitable result of a defective international monetary order. We do not know how well globalisation will survive all such stresses. I am hopeful, but not that confident.
The state, meanwhile, is back, but it is also looking ever more bankrupt. Ratios of public sector debt to gross domestic product seem likely to double in many advanced countries: the fiscal impact of a big financial crisis can, we have been reminded, be as costly as a large war. This, then, is a disaster that governments of slow-growing advanced economies cannot afford to see repeated in a generation. The legacy of the crisis will also limit fiscal largesse. The effort to consolidate public finances will dominate politics for years, perhaps decades. The state is back, therefore, but it will be the state as intrusive busybody, not big spender.
Last but not least, what does the crisis mean for the global political order? Here we know three important things. The first is that the belief that the west, however widely disliked by the rest, at least knew how to manage a sophisticated financial system has perished. The crisis has damaged the prestige of the US, in particular, pretty badly, although the tone of the new president has certainly helped. The second is that emerging countries and, above all, China are now central players, as was shown in the decision to have two seminal meetings of the Group of 20 leading nations at head of government level. They are now vital elements in global policymaking. The third is that efforts are being made to refurbish global governance, notably in the increased resources being given to the International Monetary Fund and discussion of changing country weights within it.
We can still only guess at how radical the changes in the global political order will turn out to be. The US is likely to emerge as the indispensable leader, shorn of the delusions of the “unipolar moment”. The relationship between the US and China will become more central, with India waiting in the wings. The relative economic weight and power of the Asian giants seems sure to rise. Europe, meanwhile, is not having a good crisis. Its economy and financial system have proved far more vulnerable than many expected. Yet how far a set of refurbished and rebalanced institutions for international co-operation will reflect the new realities is, as yet, unknown.
What then is the bottom line? My guess is that this crisis accelerated some trends and has proved others – particularly those in credit and debt – unsustainable. It has damaged the reputation of economics. It will leave a bitter legacy for the world. But it may still mark no historic watershed. To paraphrase what people said on the death of kings: “Capitalism is dead; long live capitalism.”
En Mayo/Junio del 2009, El Diario Ingles desarrollo una serie con el nombre El Futuro del Capitalismo, donde con bastante seriedad diferentes articulistas analizan la crisis y perspectivas del capitalismo. Creo que conocer este análisis de la crisis es importante para impulsar un análisis de la crisis desde una perspectiva socialista. No basta indicar que es una crisis inevitable del capitalismo o que es una manifestación de lo malo que esta el sistema capitalista o que se va a caer de lo descompuesto que está. Les alcanzo la traducción de este articulo de M. Wolf y al final les acompaño el original. Hay un cuadro que no aparece que luego se los hare llegar.
Saludos
Eduardo Vargas
ESTA CRISIS ES UN MOMENTO, PERO ¿ES UNO DEFINITIVO?
Por Martin Wolf Publicado: 19 de mayo de 2009 19:48 Traducción Eduardo Vargas Agosto, 2011
Es la crisis actual un punto de inflexión, con relación a la globalización dirigida por el mercado, el capitalismo financiero y la dominación occidental, por un lado y el proteccionismo, la regulación y el predominio de Asia por el otro? ¿O los historiadores lo juzgaran, en cambio, como un evento causado por tontos, con poco significado? Mi opinión personal es que va a terminar en el medio. No es ni una Gran Depresión, debido a que la política de respuesta ha sido tan determinada, ni es el 1989 del capitalismo.
Vayamos a examinar lo que sabemos y lo que no sabemos de su impacto en la economía, las finanzas, el capitalismo, el Estado, la globalización y la geopolítica.
En la economía, nosotros ya sabemos cinco cosas importantes. En primer lugar, cuando los EE.UU. coge una neumonía, todo el mundo cae gravemente enfermo. En segundo lugar, esta es la crisis económica más severa desde la década de 1930. En tercer lugar, la crisis es global, con un impacto especialmente grave en los países que se especializaron en la exportación de productos manufacturados o que dependían de las importaciones netas de capital.
En cuarto lugar, las autoridades han lanzado el paquete fiscal más agresivo, el mayor estímulo monetario y el mayor rescate financiero nunca antes visto en estas crisis. Finalmente, este esfuerzo ha traído un cierto éxito: la confianza está retornando y el ciclo de inventarios deben traer alivio. Como Jean-Claude Trichet, el presidente del Banco Central Europeo, señaló, la economía mundial está "cerca al punto de inflexión", con lo cual quería decir que la economía está disminuyendo a un ritmo decreciente.
Nosotros también podemos suponer que los EE.UU. liderará la recuperación. Los EE.UU. es una vez mas el país más keynesiano del mundo desarrollado. Podemos suponer también que China, con su paquete de estímulo masivo, será la economía más exitosa en el mundo.
Por desgracia, hay por lo menos tres cosas importantes que no podemos saber.¿Hasta dónde llegarán los excepcionales niveles de endeudamiento y si la caída del valor neto genere un aumento sostenido en el ahorro deseado de los hogares de los antiguos consumidores de alto poder adquisitivo? ¿Cuánto tiempo pueden los actuales déficits fiscales continuar antes que los mercados demanden mayor compensación por el riesgo? ¿Pueden los bancos centrales diseñar una salida no-inflacionaria desde políticas no convencionales?
En las finanzas, la confianza está retornando, con las diferencias entre los activos seguros y los riesgosos declinando a niveles menos anormales y una recuperación (modesta) en los mercados. La administración de los EE.UU. ha dado a su sistema bancario un certificado de salud razonable. Sin embargo, los balances del sector financiero se han disparado en las últimas décadas y la solvencia de los deudores está afectada.
Nosotros podemos suponer que las finanzas se recuperarán en los próximos años. Podemos suponer, también, que sus días de gloria han quedado atrás por décadas, al menos en el Oeste. Lo que no sabemos es hasta qué punto el "desapalancamiento", y la consiguiente depreciación de los balances en la economía vaya. Tampoco sabemos con cuánto éxito el sector financiero verá los intentos externos de imponer un régimen regulador más eficaz. Los políticos deberían haber aprendido de la necesidad de rescatar los sistemas financieros rellenos con instituciones demasiado grandes e interconectados para fracasar. Me temo que los intereses concentrados abrumarán al interés general.
¿Qué sobre el futuro del capitalismo, sobre la que el Financial Times ha creado esta fascinante serie? Sobrevivirá. El compromiso de ambos, China e India, a una economía de mercado no ha cambiado, a pesar de la crisis, aunque ambos estarán más nerviosos acerca de las finanzas sin restricciones. La gente en el lado de libre mercado insistirá en que el fallo debe ser ubicado más a la puerta de los reguladores que a la de los mercados. Hay una gran verdad en esto: los bancos son, después de todo, los más regulados de todas las instituciones financieras. Pero este argumento fallará políticamente. La disposición a confiar en el libre juego de las fuerzas del mercado en las finanzas ha sido dañada.
Nosotros podemos suponer, por tanto, que la era de un modelo hegemónico de la economía de mercado ha pasado. Los países se adaptaran, como siempre lo han hecho, la economía de mercado a sus propias tradiciones. Pero lo harán con más confianza. Como Mao Zedong podría haber dicho: "Dejen que mil flores capitalistas florezcan”. Un mundo con muchos capitalismos será complicado, pero divertido.
Menos claras son las implicaciones para la globalización. Sabemos que la inyección masiva de fondos del gobierno ha "desglobalizado" parcialmente las finanzas, con un gran costo para los países emergentes. Sabemos, también, que la intervención estatal en la industria tiene un tinte nacionalista fuerte. Sabemos, también, que pocos líderes políticos están dispuestos a hacer algo que sea muy diferente a lo que la mayoría de la gente opine respecto del libre comercio.
La mayoría de los países emergentes concluirán que la acumulación de enormes reservas de moneda extranjera y limitar el déficit en cuenta corriente es una buena estrategia. Esto es probable que genere una nueva ronda de desestabilización global de "desequilibrios". Esto parece una consecuencia inevitable de un orden monetario internacional defectuoso. Nosotros no sabemos cuan bien la globalización sobrevivirá a todos estos esfuerzos. Tengo la esperanza, pero no tan confiado.
El Estado, mientras tanto, está de vuelta, pero también parece siempre que está más en bancarrota. Los ratios de la deuda del sector público y del producto interior bruto parece probable que se dupliquen en muchos países avanzados el impacto fiscal de una gran crisis financiera puede, se nos ha recordado, ser tan costosa como una gran guerra.
Esto, entonces, es un desastre que los gobiernos de las economías avanzadas con lento crecimiento no pueden permitirse que se vea repetido en una generación. El legado de la crisis también limitará la generosidad fiscal. El esfuerzo por consolidar las finanzas públicas dominará la política por años, quizás décadas. El Estado está de vuelta, por lo tanto, pero será el Estado como intruso entrometido, pero no un gran gastador.
Por último, pero no menos importante, ¿qué es lo que significa la crisis para el orden político mundial? Aquí sabemos tres cosas importantes. La primera es que la creencia de que el Occidente, aunque ampliamente rechazado por el resto, por lo menos sabía cómo manejar un sistema financiero sofisticado, se ha desvanecido. La crisis ha dañado el prestigio de los EE.UU., en particular, bastante mal, aunque el tono del nuevo presidente ha ayudado. La segunda es que los países emergentes y, sobre todo China , son actores centrales, como se mostró en la decisión de tener dos reuniones seminales del Grupo de las 20 principales naciones, a nivel de jefes de gobierno. Ahora son elementos vitales en la formulación de políticas globales. La tercera es que se están haciendo esfuerzos para reformar la supremacía global, notablemente con el aumento de los recursos que están siendo dados al Fondo Monetario Internacional y con la discusión de los cambios de peso de los países dentro de éste.
Nosotros todavía sólo podemos adivinar como es que los cambios radicales en el orden político mundial resultaran. Los EE.UU. es probable que emerja como el líder imprescindible, despojado de las ilusiones del "momento unipolar. La relación entre los EE.UU. y China se convertirá en más central, con la India esperando su turno. El relativo peso económico y el poder de los gigantes asiáticos parece seguro que iran en aumento. Europa, mientras tanto, no está teniendo una buena crisis. Su economía y su sistema financiero han demostrado ser mucho más vulnerables que lo que muchos esperaban. Sin embargo, hasta qué punto un conjunto de instituciones reformadas y reequilibradas por la cooperación internacional, reflejaran las nuevas realidades es, hasta ahora, desconocido.
¿Cuál es entonces el resultado final? Mi conjetura es que esta crisis aceleró algunas de las tendencias y ha demostrado que otras - en particular aquellas en crédito y deuda - son insostenibles. Se ha dañado la reputación de la economía. Esto dejará un amargo legado para el mundo. Pero todavía no ha podido marcar ningún hito histórico. Para parafrasear lo que la gente dice sobre la muerte de los reyes: "El capitalismo ha muerto, larga vida al capitalismo."
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Future of Capitalism
This crisis is a moment, but is it a defining one?
By Martin Wolf Published: May 19 2009 19:48 | Last updated: May 19 2009 19:48
Is the current crisis a watershed, with market-led globalisation, financial capitalism and western domination on the one side and protectionism, regulation and Asian predominance on the other? Or will historians judge it, instead, as an event caused by fools, signifying little? My own guess is that it will end up in between. It is neither a Great Depression, because the policy response has been so determined, nor capitalism’s 1989.
Let us examine what we know and do not know of its impact on the economy, finance, capitalism, the state, globalisation and geopolitics.
On the economy, we already know five important things. First, when the US catches pneumonia, everybody falls seriously ill. Second, this is the most severe economic crisis since the 1930s. Third, the crisis is global, with a particularly severe impact on countries that specialised in exports of manufactured goods or that relied on net imports of capital.
Fourth, policymakers have thrown the most aggressive fiscal and monetary stimuli and financial rescues ever seen at this crisis. Finally, this effort has brought some success: confidence is returning and the inventory cycle should bring relief. As Jean-Claude Trichet, president of the European Central Bank, remarked, the global economy is “around the inflection point”, by which he meant that the economy is now declining at a declining rate.
We can also guess that the US will lead the recovery. The US is again the advanced world’s most Keynesian country. We can guess, too, that China, with its massive stimulus package, will be the most successful economy in the world.
Unfortunately, there are at least three big things we cannot know. How far will exceptional levels of indebtedness and falling net worth generate a sustained increase in the desired household savings of erstwhile high-spending consumers? How long can current fiscal deficits continue before markets demand higher compensation for risk? Can central banks engineer a non-inflationary exit from unconventional policies?
On finance, confidence is returning, with spreads between safe and risky assets declining to less abnormal levels and a (modest) recovery in markets. The US administration has given its banking system a certificate of reasonable health. But the balance sheets of the financial sector have exploded in recent decades and the solvency of debtors is impaired.
We can guess that finance will make a recovery in the years ahead. We can guess, too, that its glory days are behind it for decades, at least in the west. What we do not know is how far the “deleveraging” and consequent balance-sheet deflation in the economy will go. We also do not know how successfully the financial sector will see off attempts to impose a more effective regulatory regime. Politicians should have learnt from the need to rescue financial systems stuffed with institutions deemed too big and interconnected to fail. I fear that concentrated interests will overwhelm the general one.
What about the future of capitalism, on which the Financial Times has run its fascinating series? It will survive. The commitment of both China and India to a market economy has not altered, despite this crisis, although both will be more nervous about unfettered finance. People on the free- market side would insist the failure should be laid more at the door of regulators than of markets. There is great truth in this: banks are, after all, the most regulated of financial institutions. But this argument will fail politically. The willingness to trust the free play of market forces in finance has been damaged.
We can guess, therefore, that the age of a hegemonic model of the market economy is past. Countries will, as they have always done, adapt the market economy to their own traditions. But they will do so more confidently. As Mao Zedong might have said, “Let a thousand capitalist flowers bloom”. A world with many capitalisms will be tricky, but fun.
Less clear are the implications for globalisation. We know that the massive injection of government funds has partially “deglobalised” finance, at great cost to emerging countries. We know, too, that government intervention in industry has a strong nationalist tinge. We know, as well, that few political leaders are prepared to go out on a limb for free trade.
Most emerging countries will conclude that accumulating massive foreign currency reserves and limiting current account deficits is a sound strategy. This is likely to generate another round of destabilising global “imbalances”. This seems an inevitable result of a defective international monetary order. We do not know how well globalisation will survive all such stresses. I am hopeful, but not that confident.
The state, meanwhile, is back, but it is also looking ever more bankrupt. Ratios of public sector debt to gross domestic product seem likely to double in many advanced countries: the fiscal impact of a big financial crisis can, we have been reminded, be as costly as a large war. This, then, is a disaster that governments of slow-growing advanced economies cannot afford to see repeated in a generation. The legacy of the crisis will also limit fiscal largesse. The effort to consolidate public finances will dominate politics for years, perhaps decades. The state is back, therefore, but it will be the state as intrusive busybody, not big spender.
Last but not least, what does the crisis mean for the global political order? Here we know three important things. The first is that the belief that the west, however widely disliked by the rest, at least knew how to manage a sophisticated financial system has perished. The crisis has damaged the prestige of the US, in particular, pretty badly, although the tone of the new president has certainly helped. The second is that emerging countries and, above all, China are now central players, as was shown in the decision to have two seminal meetings of the Group of 20 leading nations at head of government level. They are now vital elements in global policymaking. The third is that efforts are being made to refurbish global governance, notably in the increased resources being given to the International Monetary Fund and discussion of changing country weights within it.
We can still only guess at how radical the changes in the global political order will turn out to be. The US is likely to emerge as the indispensable leader, shorn of the delusions of the “unipolar moment”. The relationship between the US and China will become more central, with India waiting in the wings. The relative economic weight and power of the Asian giants seems sure to rise. Europe, meanwhile, is not having a good crisis. Its economy and financial system have proved far more vulnerable than many expected. Yet how far a set of refurbished and rebalanced institutions for international co-operation will reflect the new realities is, as yet, unknown.
What then is the bottom line? My guess is that this crisis accelerated some trends and has proved others – particularly those in credit and debt – unsustainable. It has damaged the reputation of economics. It will leave a bitter legacy for the world. But it may still mark no historic watershed. To paraphrase what people said on the death of kings: “Capitalism is dead; long live capitalism.”