SIGLO XXI - QUINTO LUSTRO - "Un nuevo orden emerge de la desintegración del capitalismo que irá reemplazando la célula económica (familia) por una nueva matriz reproductiva (comunas) que cumplirá funciones defensivas, judiciales, productivas y administrativas."
miércoles, 8 de febrero de 2012
FEDERICO BARRETO (1862 – 2012)
FEDERICO BARRETO
SESQUICENTENARIO
1862 – 2012
I
El 8 de febrero se recuerda el Sesquicentenario de Federico Barreto Bustíos, poeta peruano conocido como El Cantor del Cautiverio. Motivo importante para llamar la atención y realizar como se merece y en todo el país esta Gran Conmemoración.
Federico Barreto nació el 8 de febrero de 1862 en Tacna. Tenía 17 años cuando el inicio de la Guerra del Pacífico. Sufrió la guerra, la derrota, la ocupación del agresor. Por eso se entregó a una intensa y ejemplar actividad intelectual, periodística.
A los 24 años fue cofundador del semanario El Progresista (1886), y luego del Círculo Vigil (1888) Integró el grupo literario La Bohemia Tacneña, y su revista Letras, donde colaboraron, de 1896 a 1898 escritores como Rubén Darío (Nicaragua), José Enrique Rodó (Uruguay), Clemente Palma y José Santos Chocano (Perú)
Con su hermano José María Barreto fue codirector del diario La Voz del Sur. Por supuesto, este diario agitaba la peruanidad, contra la “chilenización” de Tacna, territorio ocupado. La respuesta del invasor fue el asalto, saqueo, destrucción de las imprentas (1911)
Siguió activando. En 1912 publicó su poemario Algo mío, edición rápidamente agotada. En 1925, ante la posible realización de un “plebiscito” que decidiría la suerte de Tacna y Arica, integró resueltamente la Comisión de Propaganda de la Delegación Peruana. Con esta experiencia escribió y publicó Frente al Morro (de Arica), diario de la vida a bordo del navío Ucayali, anclado frente al puerto de Arica.
Su obra constituyó la versión poética del espíritu del pueblo. Es recordado su poema El Festín de los Cuervos, requisitoria contra los traficantes de guerra.
Pero también tuvo tiempo para la poesía amorosa. Su poema Último Ruego, fue musicalizado como vals, y con el nombre de Ódiame traspasó las fronteras y siempre tiene actualidad, por su tratamiento dialéctico de la relación odio-indiferencia.
En 1927 publicó su poemario Aroma de Mujer. Viajó a Francia, murió en Marsella el 30 de octubre de 1929, precisamente el año en que Tacna volvió al seno de la Patria. Repatriados sus restos, ahora reposan en el Cementerio General de Tacna.
Según su crítico Ricardo González Vigil, su obra tiene influencia poética de Manuel José Quintana y de José Joaquín de Olmedo, principalmente. Este último poeta era nacido en Guayaquil, cuando ese puerto aún era parte del Perú. Como ellos, “reivindicó los valores cívico-patrióticos” Y, en general su estilo está marcando por el romanticismo y el modernismo, escuelas afines a su posición ante la realidad del país en los años de su vida, en especial el amor al país natal.
Tacna tiene mucho de qué enorgullecerse. Tiene personajes que lucharon contra el colonialismo, que lucharon por la Independencia, que lucharon por el desarrollo de la región. Y tiene personajes que lucharon contra el agresor, enfrentándolo en heroicas batallas. Federico María Barreto, padre del poeta, fue coronel de infantería del ejército peruano, que seguía la escuela francesa. Esta escuela fue vencida en la guerra franco-prusiana (que originó la histórica Comuna de París en 1871) Los prusianos enseñaron su escuela al agresor de la Guerra del Pacífico. Fue, pues, actualización de escuelas y no superioridad de un pueblo sobre otro lo que ocasionó el resultado en esta guerra de agresión. Es lo que debemos dilucidar en este Sesquicentenario.
Y Federico Barreto está íntimamente ligado a estas vicisitudes históricas. Procuró con su pluma y su prosa enseñar las causas de la tragedia
II
ÓDIAME, POR FAVOR
Ódiame, por favor, yo te lo pido.
Ódiame sin medida ni clemencia;
Odio yo quiero más que indiferencia,
Porque el rencor
Hiere menos que el olvido,
Si tú me odias, quedaré yo convencido,
De que me amaste, mujer, con insistencia.
Pero ten presente,
De acuerdo a la experiencia,
Que tan sólo se odia lo querido.
Qué vale más,
Yo humilde, tú orgullosa;
Qué vale más, tu débil hermosura.
Piensa que en el fondo de la tumba
Llevaremos la misma vestidura.
Si tú me odias, quedaré yo convencido,
De que me amaste, mujer, con insistencia.
Pero ten presente,
De acuerdo a la experiencia,
Que tan sólo se odia lo querido.
Federico Barreto
Federico Barreto está, pues, presente en las actividades actuales de Tacna y el país entero. En su lucha por la dignidad nacional; por el crecimiento, desarrollo, progreso del pueblo peruano.
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