La COTRAPUC saluda, en este día muy especial, a todos los trabajadores en general y a los contratados públicos CAS en particular, en que se conmemora el día Internacional de la clase trabajadora, efemérides que para nosotros reviste especial importancia, ya que nos encuentra en pie de lucha por nuestra estabilidad laboral y la recuperación de nuestros derechos laborales conculcados.
En el mundo entero recordamos y celebramos el día en que los mártires obreros de Chicago ofrendaron su vida en la lucha por los derechos de la clase trabajadora. No es un día de fiesta ni de celebración, sino de especial recordación y compromiso en el combate consecuente por nuestras más sentidas reivindicaciones, y en la necesidad de seguir redoblando nuestro trabajo sindical de unidad y organización para alcanzarlas.
En nuestra historia peruana del movimiento obrero y sindical recordamos al primer mártir obrero Florencio Aliaga y a líderes sindicales asesinados en la lucha por una causa laboral, como Pedro Huillca o Saúl Cantoral, a miles de trabajadores despedidos a través de estos años y a millones de trabajadores explotados y sobre explotados con salarios de hambre por debajo del mínimo vital y con jornadas por encima de las ocho horas diarias.
Los que realmente padecen esta sobreexplotación y conculcación de sus derechos, son más del 70% de la PEA laboral que laboran en las empresas “terceristas” y “Services” de la minería, en las micro y pequeñas empresas en su mayoría informales, los más de 2 millones de campesinos pobres de zonas rurales, los más de 600 mil trabajadores de “regímenes especiales” del sector agro exportador y textil no tradicional y en el sector publico los denominados “por terceros”, “servicios no personales” y los cerca de 200 mil trabajadores CAS sujetos al régimen denigrante del despido “legal” arbitrario y sin causa alguna, en condiciones de precarización laboral. El sindicalismo de clase tiene que nutrirse y crear nuevos referentes en estos sectores. De nada sirven discursos, celebraciones y marchas por el 1º de mayo cuando estas grandes mayorías laborales están sujetas a leyes que perversamente los excluyen y discriminan, en un gobierno llamado irónicamente de “inclusión social”, cuando la jornada de ocho horas y sus plenos derechos laborales solo los tienen menos del 15 % de los más de 18 millones de la población laboral, y los demás no solo no gozan de esos derechos sino que hasta están hasta prohibidos de organizarse, transgrediendo el derecho a la libertad sindical.
Se avecinan despidos masivos de decenas de miles de trabajadores CAS en diferentes entidades de gobierno nacional, local y regional, aplicando la Ley N° 29849 (mal llamada de eliminación progresiva del CAS), que al modificar el DL N° 1057 empeora aún más la situación de inestabilidad laboral, desconociendo totalmente el tiempo de servicios de estos trabajadores (¡No es posible que a un trabajador con 12 o 15 años de servicios se le despida arbitrariamente y no tenga derecho a reponerse).
Si bien este Gobierno no estableció el Decreto Legislativo Nº 1057, con la promulgación de este engendro legal, que empeora el Gobierno de Ollanta, demuestra su carácter antilaboral y antisindical, y sella su abierta traición a lo comprometido en su Campaña, convertido hoy en un títere de la oligarquía minera y del gran capital financiero. El Ollanta de hoy se quita la máscara y aplica mayor exclusión a los trabajadores y mayor represión a los pueblos que luchan por su dignidad, como el derecho al agua y defensa de los recursos naturales.
En caso particular los CAS, nada tenemos que celebrar, sino marchar para seguir comprometiéndonos en la lucha por la derogatoria de este nefasto régimen laboral, por sensibilizar a la opinión pública para que se solidaricen con nuestra causa. Celebrar o hacer jolgorio cuando este 30 de abril muchos CAS ya están despedidos, cuando les dicen que no les renovaran el contrato en mayo o junio, y nos dicen que todavía el próximo año nos otorgarán nuestros 30 días de vacaciones y nuestros aguinaldos porque no hay dinero.
De nada sirve que en una plataforma escribas la derogatoria mientras pactas a espaldas de los trabajadores CAS y no propones nada concreto para ir eliminando y derogando este perverso régimen laboral. No es la hora del “engaña muchachos”, ya la lucha y el continuo maltrato nos enseña a darnos cuenta quien lucha con convicción y quien defiende realmente nuestros intereses.
Nuestras propuestas de lucha para derogar el CAS pasan, primero, por plantear la Acción de Inconstitucionalidad a esta Ley, como lo está proponiendo el congresista Yonny Lescano; segundo, modificar, momentáneamente, antes de que termine mayo, esta ley, a fin de evitar que mayores despidos so pretexto de exigir que se firmen nuevos Contratos CAS, en vez de Adendas, y para ello sometan a Concurso Público a quienes vienen laborando en este régimen laboral antes de la publicación de la Ley Nº 29849 o cuando se produzca el paso al nuevo Régimen de Servicio Civil, como plantea el congresista Julio Gago; y tercero, plantear una Acción de Amparo reclamando la inaplicación, por inconstitucionales, de los incisos f) y h), del Artículo 10ª del Decreto Legislativo Nº 1057, modificado por la Ley N 29849, sobre la resolución arbitraria e injustificada y vencimiento, del contrato que lo propondremos como gremios. Estas son las acciones jurídicas más inmediatas por realizar y para movilizar a la gente lo antes posible, los dirigentes tenemos que realizar propuestas viables y tener resultados concretos, tener una plataforma y nunca conseguir nada es traficar con las reivindicaciones laborales.
¡ABAJO LA MALDITA LEY APAZA – VILLENA!
¡ABAJO EL GOBIERNO DE OLLANTA HUMALA TRAIDOR A LOS TRABAJADORES Y AL PUEBLO PERUANOS Y SIRVIENTE DE LA OLIGARQUÍA MINERA Y LAS TRANSNACIONALES!
¡UNIDAD DE CLASE DE LOS TRABAJADORES EN LA DEFENSA CONSECUENTE DE SUS DERECHOS!
¡VIVA EL DIA INTERNACIONAL DE LUCHA DEL PROLETARIADO!
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