Escribe:
Carlos Aguilar
Tenía
19 años cuando encontraron a su padre sin vida en un campo desierto en la
provincia de Jauja en 1990. Vladimir Cerrón Rojas, candidato presidencial de
Perú Libertario, cree que la muerte de su progenitor no solo lo marcó
emocionalmente sino también fortaleció sus convicciones
políticas.
El
candidato presidencial cuenta que su padre Jaime Cerrón Palomino fue
vicerrector de la Universidad Nacional del Centro del Perú de Huancayo,
dirigente de izquierda muy conocido en la región, pero que no militó en partido
alguno pese a la popularidad que tuvo.
El 8
de junio de 1990 el catedrático Jaime Cerrón fue secuestrado. Diez días después
su cuerpo fue hallado en un paraje de Jauja. Han pasado desde entonces 25 años
de su asesinato y hasta ahora nadie sabe por qué o quiénes lo mataron. Vladimir
Cerrón sospecha que fue un grupo paramilitar llamado “Escorpio” quien torturó y
asesinó a su padre.
Rumbo
a Cuba
Con 20
años de edad Vladimir Cerrón se fue becado a Cuba a estudiar medicina
humana. La carrera de ingeniería que estudiaba en Huancayo la abandonó porque,
explica, en el fondo siempre quiso sanar a los enfermos. En La Habana, Cerrón
maduró sus ideas políticas al mismo tiempo que se hizo un médico. Varios años
después regresó al país acompañado de la doctora cubana Elizabeth Páez, su
actual esposa.
El
2006 fue su oportunidad de ingresar a la política, cuando le ofrecen postular
como candidato al gobierno regional de Junín por el movimiento Perú Libre. El
2010 vuelve a competir en las regionales para esta vez ganar y quedarse en
dicho cargo hasta el 2014.
Sin
embargo, su gestión ha sido cuestionada y su imagen no ha sido bien
percibida por un grueso de la población huancaína. Incluso surgieron denuncias
en su contra que, aunque no han sido acogidas formalmente por el Ministerio
Público, las dudas no han sido aclaradas a decir de sus detractores.
Todos
son iguales
En su
defensa, Cerrón afirma que no existe político que esté ajeno a ser denunciado.
Jura que jamás ha tomado un sol de las arcas del gobierno regional de Junín
para uso personal o para la creación de su partido.
Al ex
funcionario regional no le preocupa que hablen de él, resta importancia a las
críticas por el retraso en la culminación de las obras en su gestión. Asegura
que jamás hizo negocios con Martín Belaunde Lossio, procesado por el presunto
delito de asociación ilícita y peculado, y espionaje o denominado “caso
Centralita”.
Sostiene
que solo vio dos veces a Martín Belaunde Lossio. La primera cuando vino a Lima
a pedir ayuda a los medios de comunicación al ser despedido arbitrariamente del
seguro de salud. Conoció al empresario en el local del diario La Primera, ahora
llamado UNO.
La
segunda vez fue en el 2011 cuando le pidieron que Perú Libertario apoye en la
segunda vuelta al entonces candidato Ollanta Humala. Cerrón aceptó y no por
Humala sino –dice– por su posición antifujimorista.
Sin
embargo, existen fotografías que demuestran que Cerrón Rojas y su esposa
Elizabeth Páez conocían a Belaunde Lossio. Estas imágenes fueron publicadas
como parte de un informe del portal La Mula.pe. En dicha publicación se
afirmaba que Cerrón y Belaunde Lossio visitaban al congresista nacionalista
Víctor Isla.
A
Vladimir Cerrón la adhesión al Partido Nacionalista solo le duró seis meses,
pues él señala, sin ofrecer detalles, que “hubo irregularidades que no podían
permitirse” en una organización política.
Al
candidato presidencial no le entran balas ni cuando la comisión parlamentaria
lo interrogó por las presuntas actividades ilícitas del ex asesor Martín
Belaunde Lossio. En dicha comisión se halló responsabilidad administrativa y
penal al ex presidente de esa región Vladimir Cerrón por los presuntos delitos
de asociación ilícita para delinquir y colusión.
Según
el grupo investigador, SIMA (Servicios Industriales de La Marina) suscribió un
convenio con el gobierno regional de Junín y posteriormente lo hizo con las
subcontratistas que en realidad eran empresas de propiedad de Martín Belaunde
Lossio.
Pese a
este aparente vínculo, Cerrón dice que no tiene nada que ocultar y que si la
prensa quiere una explicación, pues que se la pidan al SIMA.
De
otro lado, dice ser un político de la izquierda provinciana del Perú y no de
las izquierdas limeñas porque se dejan financiar por ONG. Según afirma el
candidato presidencial, esto no puede ser posible, ya que esos recursos vienen
de los Estados Unidos que “es el imperialismo y la verdadera izquierda es
antimperialista”.
Ha
señalado que todos los seres humanos tienen el derecho de hacer con su vida lo
que deseen. Sin embargo, dice estar en contra de la Unión Civil porque es “el
eslabón para que los homosexuales puedan adoptar niños”.
Por
eso Cerrón dice estar en contra de este proyecto de ley de de Unión Civil
“porque a los niños no se les puede criar en un escenario que no es
natural”. “Si quieren la Unión Civil que renuncien a la adopción de niños”,
declaró, y agregó que no es homofóbico.
No
obstante su posición de rechazo a la Unión Civil, Cerrón dice que el aborto en
los casos de violación sexual debería ser un tema a debatirse.
No hay comentarios:
Publicar un comentario