Posiblemente, haya muchos eventos
conmemorativos este 14 de junio, fecha del nacimiento del amauta. Pero, la
realidad actual de los activistas del movimiento socialista nacional dista
mucho de ser revolucionaria. Por tanto, cabe recordar el mensaje de Mariátegui
al primer Congreso Obrero de Lima, cuyo texto cobra actualidad “El marxismo,
del cual todos hablan pero que muy pocos conocen y, sobre todo, comprenden, es
un método fundamentalmente dialéctico. Esto es, un método que se apoya
íntegramente en la realidad, en los hechos. No es, como algunos erróneamente
suponen, un cuerpo de principios de consecuencias rígidas, igual para todos los
climas históricos y todas las latitudes sociales” Cuyo texto, se cita en varios
escritos. Pero, poco se ha asimilado de manera correcta.
Así mismo, la realidad actual de la clase trabajadora del Perú del siglo XXI, dista mucho de tener una orientación marxista, y requiere asimilar el siguiente pasaje que obra en el mismo documento. Publicado en "Amauta", Nº 5, Año II, enero de 1917 (págs. 35 y 36), con motivo del segundo Congreso obrero de Lima. Que dice: Antes de concluir estas líneas quiero deciros que es necesario dar al proletariado de vanguardia, al mismo tiempo que un sentido realista de la historia, una voluntad heroica de creación y de realización. No basta el deseo de mejoramiento, el apetito de bienestar. Las derrotas, los fracasos del proletariado europeo tienen su origen en el positivismo mediocre con que pávidas burocracias sindicales y blandos equipos parlamentarios cultivaron en las masas una mentalidad sanchopancesca y un espíritu poltrón. Un proletariado sin más ideal que la reducción de las horas de trabajo y el aumento de los centavos del salario, no será nunca capaz de una gran empresa histórica. Y así como hay que elevarse sobre un positivismo ventral y grosero, hay que elevarse también por encima de sentimientos e intereses negativos, destructores, nihilistas. El espíritu revolucionario es espíritu constructivo. Y el proletariado, lo mismo que la burguesía, tienen sus elementos disolventes, corrosivos, que inconscientemente trabajan por la disolución de su propia clase.
Mariátegui ponía una voluntad de
hierro, que decuplicaba sus energías. Ni el mal estado de su salud, quebrantada
desde temprana edad y el trabajo agobiador y sobrehumano, ni la difícil
situación económica pudieron socavar su voluntad y obligarlo a suspender el
trabajo.
Sobre cuyas dificultades, en sus apuntes autobiográficos, nuestro amauta señala: “En 1924 estuve, como ya lo he contado, a punto de perder la vida. Perdí una pierna y me quedé muy delicado. Habría seguramente ya curado del todo con una existencia reposada. Pero ni mi pobreza ni mi inquietud espiritual me lo consienten”
Este modelo de vida revolucionaria, es la que falta en los nuevos activistas del movimiento socialista nacional. Algunos pueden tener buena memoria. Algunos, leemos simplemente, sin analizar lo que leemos y menos tenemos capacidad de sintetizar para lograr un determinado sistema. Como señala Milciades Ruiz, en su obra Razonando con la Dialéctica, “No estamos acostumbrados a pensar dialécticamente porque la cultura de la dominación no lo permite, pues no le conviene que los dominados despierten. Entonces vivimos alienados por la distorsión interesada de la verdad. Actuamos por reflejo condicionado ante los estímulos del sistema de dominación vigente y nuestras reacciones neurológicas provocadas, nos hacen responder a intereses ajenos”
Cabe reiterar que toda la producción teórica del amauta, está contenida en las Obras completas en veinte volúmenes y las Revistas: Nuestra Época, Mundial y Variedades, la insuperada Amauta y el diario El Tiempo.
Luego de transcurrido 130º años del nacimiento del fundador del Socialismo Peruano, es necesario volver al estudio de estas obras y prepararnos para celebrar dignamente el Centenario de 7 Ensayos de Interpretación de la Realidad Peruana y la constitución del Partido Socialista Peruano (1928 octubre 2028)
Asimismo, es necesario señalar que es
sabido que el método de investigación del amauta fue el método científico. Y
conforme a ese método el gran revolucionario proletario, supo acumular
conocimientos, enriquecer su memoria con el conocimiento de todos los valores
nacionales e internacionales que le antecedieron. Sin regatear esfuerzos para
perfeccionar sus conocimientos. Cuya actitud estaba impregnada de un amor
inmenso a la clase trabajadora oprimido.
Pero, además del método científico, es necesario destacar el conjunto de hábitos intelectuales, técnicas de estudios, modo de indagación, tiempo de dedicación al estudio, la constancia en la búsqueda de la verdad. Actitud práctica que sólo es posible constatar en la vida de un verdadero revolucionario. Y en lucha permanente contra toda vulgarización y simplismo teórico, trasmitió a las masas sus conocimientos científicos.
Es necesario trabajar y presentar
algún avance revolucionario cada 14 de junio, para darle a esta fecha un
contenido cada vez más exitoso y no un simple recuerdo del nacimiento del gran
amauta.
14.06.2024
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