El pueblo
venezolano reclama el poder popular para profundizar la Revolución
¡Comunas
o nada!
Voz
21-11-2013
Testimonios de dos aguerridos
comuneros socialistas y bastiones de la Revolución Bolivariana
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Amado Rivero tiene 65 años y es obrero.
Su principal obra es la construcción de la Comuna Socialista Che Guevara, del
municipio de Palavecino, en el Estado de Lara, Venezuela.
De
día pega ladrillos; en las noches, supervisa los cimientos de la comuna de la
que es vocero. En sus ratos libres, escribe para varios blogs y desde esas
trincheras que ofrecen los medios alternativos defiende la necesidad del Estado
Comunal.
En
la comuna Che Guevara hay aproximadamente 18 mil habitantes. Ésta es una de las
1.401 comunas que contabilizó el Censo Comunal 2013, además de los 40.035
Consejos Comunales, y las 71.521 organizaciones sociales, según los resultados
del Ministerio del Poder Popular para las Comunas.
Si
bien las cifras de las comunas son alentadoras, Amado Rivero aclara que solo
hay 123 registradas o pre-registradas y que la meta es formar al menos 3 mil
comunas, con un buen nivel ideológico socialista.
¨Una
vez alcanzado ese nivel, de más del 60% del territorio nacional cubierto por
comunas, seremos nosotros quienes impulsemos una nueva Constituyente Nacional
para crear el Nuevo Estado Comunal Socialista¨, afirma Rivero.
De
las comunas se ha dicho que son de papel o han sido reducidas a meras
organizaciones productivas, rurales desconociendo como enfatiza Rivero, que son
las bases de la Revolución Bolivariana, y que reemplazarán a los municipios
como base primaria, como lo propuso Hugo Chávez en su reforma constitucional,
añade el líder comunero.
Para
los enemigos de las comunas y su poder popular, que según Rivero, están dentro
del mismo Estado, él tiene una respuesta contundente: ¨Una vez se concreten
como formas de gobierno; no podrán ser de papel porque están formadas por
líderes, hombres y mujeres que no tienen un sueldo, que no les importa pasar un
día sin comer. Ese es el miedo que tienen, que los líderes unidos con sus
pueblos jamás serán vencidos¨.
El
pueblo está hambrieto de poder popular! En opinión de Modesto Emilio Guerrero,
biógrafo de Chávez, desde el año 2002 se desató un fenómeno de poder social y
formas de organización de los trabajadores y pobres.
¨
(…) De hecho, y sin mucha conciencia de su propio proceso de conjunto, ese
movimiento ha comenzado a practicar formas democráticas, no jerárquicas, de
relación social, contrarias a las impuestas por el Estado existente¨, afirma
Guerrero en su columna El Poder Popular después de Chávez.
Por
eso, al igual que Rivero, en Caracas, José Uriepero, otro valiente comunero,
profundiza la Revolución en la Comuna Socialista El Cementerio y protege sus
conquistas.
En
esta comuna localizada en el municipio Bolivariano Libertador, en el distrito
capital, tienen dos empresas de propiedad social directa comunal y otra para la
comercialización y venta de quesos y charcutería.
Gracias
a éstas dos últimas, productores agropecuarios y pecuarios de los Estados de
Tachira y Guarico venden sus productos en la capital, generan empleos directos
y venden a precios económicos. Con las ganancias, ayudan a la población y
otorgan becas estudiantiles, todo en la comuna.
¨Nuestra
comuna no ha recibido dinero de parte del Estado venezolano. De hecho, esta es
la verdadera autogestión. Se propone la economía solidaria donde se busca
beneficiar más a la comunidad que a la generación de dinero¨, aclara Ulperio.
Además,
la comuna tiene un fondo social como mecanismo de respuesta inmediata a crisis;
sin dejar de presionar al gobierno en temas como la calidad de los servicios,
la educación, la seguridad y la vivienda, etc.
El
objetivo es demostrar que las comunidades organizadas son capaces de generar
recursos. De éstos se benefician todos los habitantes sin distinción de credo e
ideología política, aun cuando, la mayoría de los comuneros activos son
Revolucionarios como José.
Indudablemente
la comuna es la base fundamental de la sociedad socialista porque ella impulsa
los valores de solidaridad, respeto, tolerancia, y humildad. El cultivo de
estos valores son los que salvarán nuestras sociedad, de lo contrario vamos
definitivamente hacia nuestra destrucción como sociedad¨, afirma Uriepero.
Fernanda
Sánchez J. Periodista, magíster en relaciones internacionales y sindicalista.
Publicado
en Voz, Noviembre 13, 2013.
Rebelión
ha publicado este artículo con el permiso de la autora mediante una licencia de
Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras
fuentes.
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