13-05-2014
Mario
Hernandez (MH): Tenemos en línea a Guillermo
Almeyra. No voy a decir que estamos viviendo juntos, pero sí en comunicación
permanente porque ayer a la noche hicimos una larga entrevista en “¿Sin
Salida?”, que se emite los martes de 20:00 a 21:00 por FM La Boca (90.1), sobre
la situación político-social de México, donde Guillermo vivió muchos años y lo
visitó a comienzos de este año. Hoy vamos a volver, ya que habíamos abordado el
tema en un par de oportunidades anteriores, a la situación de Ucrania donde se
ha producido una masacre en Odessa, un asesinato de más de 30 personas quemadas
vivas.
Matías
Eskenazi (ME): Podríamos hablar de un verdadero
pogromo.
MH: Efectivamente.
Guillermo
Almeyra (GA): Lo que los diarios soslayan es
que en Ucrania, más allá de las diferencias nacionales y en parte étnicas,
porque los tártaros tienen una posición distinta, hay esencialmente una
violenta lucha de clases.
Los
sectores más pobres y trabajadores están en Ucrania del Sur y Oriental, que
eran y son las regiones más prósperas, donde hay obreros mineros como en
Ucrania Oriental y agrícolas. Esta gente no tolera la política criminal del
grupo de Kiev que aplica a rajatablas la decisión del FMI, que corresponde al cierre
de buena parte de las industrias que están precisamente en Ucrania Oriental y
del Sur. Incluso, llegaron a prohibirles el uso de la lengua rusa que es su
propia lengua. No solo los afecta desde el punto de vista económico, sino que
los agrede, los insulta y, entonces, han reaccionado.
Por
el lado de Ucrania Occidental, el grupo de Kiev está financiado por Europa
Occidental y EE. UU. que quieren integrar a Ucrania a la OTAN en clara posición
anti-rusa. También está compuesto, en su parte más agresiva, por grupos nazis.
Hay
que tener en cuenta que durante la II Guerra Mundial, en Ucrania Occidental, el
ejército nazi reclutó una división entera de ucranianos contra los rusos.
Además, ahí no hubo casi resistencia contra la ocupación nazi, mientras que en
Ucrania Oriental la resistencia fue enorme y ahí estuvieron los partisanos.
Hubo más muertos que en el gueto de Varsovia en proporción a la población.
Están
todos estos problemas, la lucha de clases hoy, la historia reciente, la
posición frente a los nazis, el problema étnico, a esto se agrega que los
sectores dominantes en Kiev están deseosos de integrarse, en una posición
totalmente subordinada, con el capital financiero, sobre todo alemán, mientras
la nueva burguesía rusa, nacida de la acción mafiosa para apropiarse de los
bienes colectivos, no tiene capacidad internacional como las burguesías alemana
y estadounidense.
En
Ginebra, Rusia no tuvo en cuenta a los trabajadores de Ucrania oriental
ME: Mencionabas la lucha de clases larvada por
detrás de un conflicto que aparece en los medios y los discursos, tanto de EE.
UU. como de la Unión Europea (UE) y el gobierno ruso, como un conflicto
meramente geopolítico y por intereses nacionales. Estas cosas están mezcladas
porque en Ucrania tenemos el intento que data desde la perestroika de tratar de
correr la frontera más cerca de Rusia, la reconstitución de este país y el
intento de reafirmar su poder pero, al mismo tiempo, el problema de la crisis
económica, de la política de ajuste en Europa, que ha planteado un fermento que
está por detrás, tanto de los movimientos en Kiev de la Plaza Maidán como en el
este, que es la demanda de trabajo, contra el ajuste, de reivindicaciones
democráticas. Todo esto queda tapado, oculto, desdibujado detrás de las
intervenciones imperialistas cruzadas de EE.UU., la UE y Rusia.
GA: El intento de presentar a los que intentan formar
repúblicas independientes en Donetsk, en la parte oriental, como si fueran
simples marionetas de Putin, esconde el hecho concreto que el gobierno capitalista
ruso en Ginebra negoció sin siquiera conversar con ellos previamente. Ahora
pide que vayan a Ginebra, pero antes firmó medidas que van incluso totalmente
en contra de la legislación internacional como que ningún ruso pueda cruzar la
frontera y no tuvo en cuenta en lo más mínimo a los trabajadores de Ucrania
oriental que tienen su propia dinámica y se mueven por sus propias iniciativas.
Piden hablar ruso pero también quieren crear repúblicas independientes, no
anexadas a Rusia. Además, son bastante radicales, cantan La Internacional,
agitan banderas rojas, lo cual no significa que recuerden al estalinismo sino a
un régimen no-capitalista.
Hay
un proceso que combina una sublevación social que está tomando forma, una lucha
de clases clara, con la intervención geopolítica de Rusia que, por supuesto, no
puede tolerar que le pongan ejércitos enemigos en su frontera, eso ya se vio en
Osetia y Georgia y ahora en Ucrania, sumada a la acción provocativa de la OTAN
que sobrevuela la zona con aviones no tripulados, pero también concentrando
tropas.
ME: Boris Kagarlitsky, con participación activa
en la New Left Review y otros medios de izquierda y
alternativos, planteaba la hipótesis que Crimea se anexó a Rusia, no al revés,
y con esto quería decir que las élites de Crimea vieron una oportunidad para
que Rusia interviniera y los anexara. Una vez que esto sucede, Rusia dice por
todos los medios posibles que no quiere anexarse ninguna otra parte del
territorio ucraniano y, sin embargo, hay movimientos autónomos, porque creer
que los rusos montaron una provocación y sin disparar un solo tiro invadió
media Ucrania es poco creíble, en Odessa, Donetsk, en una cantidad de ciudades
que reclaman esta mezcla ambigua de autonomía dentro de Ucrania y la protección
rusa ante la posible intentona represiva del gobierno de Kiev apoyado por
Occidente.
GA: Crimea fue anexada porque está la base naval
de Sebastopol que tiene un carácter estratégico fundamental para Rusia desde
siempre, con el zarismo y después con la URSS, porque es la base que le permite
llegar al Mediterráneo y de ahí al Atlántico y a través del estrecho del
Bósforo a los Dardanelos, entrando a los grandes océanos. Es la principal base
naval rusa junto con Vladivostok en Siberia, por eso fue anexada, pero el
planteo de Putin no es entrar en conflicto bélico con EE. UU., al contrario,
siendo una pequeña potencia con gran armamento nuclear cada vez más obsoleto y
mal mantenido, no es una potencia mundial.
Rusia
es un país de 165 millones de habitantes cada vez más viejos, desaparecen un
millón por año por envejecimiento, hay una expectativa de vida baja porque ha
retrocedido enormemente el nivel de vida con la restauración del capitalismo,
por eso no está en condiciones de querer tragarse a Europa, al contrario, está
intentando negociar desde una posición de fuerza local.
Por
otro lado, desarrolla su alianza con China que es otra cosa, pero siempre en
función defensiva. Los rusos de ningún modo intentan anexarse parte de Ucrania.
Además, no pueden jugar con fuego en el problema nacional que es candente en la
alianza que han hecho con otros países de la ex URSS que están al oriente y son
muy sensibles al problema nacional y sus gobernantes son esencialmente
nacionalistas como en Kazajstán, Uzbekistán y otros países importantes desde el
punto de vista petrolero, sobre todo.
Hay una cuestión clara, la prensa
internacional estadounidense, pero también los franceses, azuzan la guerra y
quieren mostrar a los rusos como hacían con los japoneses durante de II Guerra,
como monstruos.
Rebelión
ha publicado este artículo con el permiso de los autores mediante una licencia
de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras
fuentes.
http://www.rebelion.org/noticia.php?id=184588
No hay comentarios:
Publicar un comentario