ELECCIONES 2016: NO HAY CENTRO PARA TANTA GENTE

  Nota Bene

La táctica en cada país obedece las determinaciones de las circunstancias de la lucha de clases y la posibilidad de éxitos estratégicos. Por regla general, en cada batalla se hace frente al enemigo de forma ortodoxa pero se le vence de manera heterodoxa. Ese es el quid. Ninguna batalla es idéntica y el éxito depende en gran medida de la capacidad de innovación de los estrategas en la experimentación de la confrontación.

Edgar Bolaños Marín

Tacna, 21 julio 2015

Por Gustavo Pérez Hinojosa

Hemos tomado prestado el título de una hermosa salsa del Gran Combo de Puerto Rico, que creemos define la increíble situación pre-electoral en que nos encontramos, donde la derecha, conociendo su desprestigio y sintiéndose desenmascarada viene buscando fabricar un nuevo “outsider” (como lo fueron Fujimori, Toledo y Humala, en su momento) y disfrazándose de centro mientras que las denominadas fuerzas de “izquierda” también buscan presentarse como “centro-izquierda” y un candidato “centrista” para mostrarse moderados y light y “engañar” a la derecha y al pueblo.

Dudamos mucho que un frente de “centro izquierda” logré engañar a la derecha a la que aún la “izquierda” mas inofensiva le repele como lo demostró la expulsión de los moderados y hasta renegados del Gobierno Humalista inicial, pero cabe preguntarse ¿Es que resulta honesto y digno presentarse ante la clase obrera y el pueblo como “centristas” porque tenemos vergüenza de ser de “izquierda” para que “engañada” voté por nosotros?.

Pensamos que no, y que lo que ello revela en mayor o menor medida es la renuncia abierta a los ideales y principios revolucionarios (la táctica más audaz no implica en forma alguna su renuncia).

Uno de ellos, quizás el más importante, es el reemplazo del Estado burgués, que ha dejado de representar los intereses de las grandes mayorías, por un nuevo aparato surgido desde las bases que recoja la participación combativa de los Municipios, Comunidades Campesinas y Nativas y Frentes de Defensa en las luchas populares, en Asambleas Locales y Regionales y culmine en una Asamblea Nacional Popular; en vez de plantear la restauración de la Cámara de Senadores para simplemente tener más curules y mejor situación económica personal.

Eso no está en juego en las próximas elecciones y de allí lo limitado de los reales objetivos del movimiento socialista peruano, la clase obrera y el pueblo pues la historia ha demostrado con el sacrificio heroico del Gobierno de Salvador Allende los límites de la participación revolucionaria en los procesos electorales burgueses.

Convengamos pues que los “grandes objetivos” de la participación revolucionaria en este próximo proceso electoral no son más que el de obtener curules y puestos o cargos en el nuevo Gobierno que se alcance y convengamos que si en el caso de los curules ello encierra la posibilidad de su utilización como tribuna revolucionaria y crítica del sistema, en el caso de los puestos y cargos no significa más que simple supervivencia y “puestofagia”.

De allí que el llamado a las mas amplia unidad de las fuerzas de “izquierda” y populares para convertirse en supuesta alternativa de “centro” que derrote en las próximas elecciones a la alternativa de derecha no es más que ayudar a que un sector de la derecha derrote electoral y temporalmente al otro, como lo ha demostrado el apoyo popular a Fujimori, Toledo y Humala.

No sirve a las actuales circunstancias la aplicación mecánica del Frente Único Antijapones chino ni del Frente Unico Antifascista de Dimitrov pues no estamos ni ante una invasión extranjera ni ante una amenaza fascista sino a un simple proceso electoral burgués ante el cual además nos presentamos sin un serio trabajo de masas allí donde la lucha contra la explotación asalariada (piensese nomás en la alternativa “izquierdista” del Proyecto de Ley General de Trabajo con$en$suado), el ecocidio y despojo de las tierras por las transnacionales mineras, lo hacen posible y necesario.

En tal sentido nos manifestamos en abierta oposición a la “alternatibia” de una gran unidad en un frente con parte de la derecha para derrotar a la derecha y obtener el triunfo de la derecha, como ha venido sucediendo históricamente en los últimos procesos electorales y nos manifestamos por la más amplia unidad de las fuerzas del movimiento socialista peruano, obreras y populares en torno no a una simple táctica electorera sino a un Programa que recoja las más sentidas necesidades y aspiraciones de éstas, llevando como representantes a los mas compañeros que se han distinguido en la dirección de las últimas luchas populares y representantes de lo mejor de las nuevas generaciones, convocando a los compañeros mayores y más experimentados a su apoyo y acompañamiento desde las bases. Frente al nuevo proceso electoral no nos sirve, salvo como experiencia negativa, la de los compañeros que ocupando cargos representativos en el Estado burgués se volvieron contra sus compañeros del movimiento socialista y contra el pueblo.

Junio 2015