domingo, 15 de enero de 2017

CAMARGO CORREA PROVOCA TERREMOTO POLÍTICO EN BRASIL QUE LLEGARÁ AL PERÚ




Colaboración. Constructora brasileña negocia con el Ministerio Público un acuerdo para que 40 de sus principales directivos y socios relaten cómo y desde qué cuentas bancarias se pagaron sobornos por obras públicas en Brasil y Perú. Las delaciones incluirán los pagos en el caso 'Castillo de Arena' en gobierno de Toledo y García.

Escribe: César Romero
 
Acorralada por el Ministerio Público y las delaciones premiadas, la constructora Camargo Correa Ingeniería y Construcción, la tercera más grande de Brasil, decidió negociar una "súper delación" con las autoridades

El inicio de la negociación fue revelado ayer en un reportaje del periodista Daniel Pereira, en la revista Veja. Las delaciones amenazan con provocar un nuevo terremoto político en nuestro vecino amazónico.

"Otro fin del mundo" tituló la revista. Esto, cuando el primer fin del mundo está en pleno desarrollo, como es la decisión de la constructora Odebrecht de colaborar con la justicia y propiciar que 77 de sus directivos se acojan a la delación premiada.

Los acuerdos de colaboración de Odebrecht están en fase de aprobación que debe concluir a fines de febrero o las primeras semanas de marzo. Entonces se conocerá a quién, desde qué cuentas y cuánto pagó Odebrecht a políticos y funcionarios de Brasil y otros países de Latinoamérica.

40 delaciones

Camargo Correa ha decidido hacer lo mismo. Veja señala que los abogados de la empresa negocian que 40 ejecutivos, incluidos accionistas, narren todo lo que saben de las cuentas bancarias en el exterior que fueron utilizadas para el pago de propinas que se habrían realizado a más de 200 políticos y funcionarios del Ejecutivo y el Legislativo.

Las negociaciones se realizan en Curitiba, sede de la Fuerza de Tarea de Lava Jato, y Brasilia, lo que supone que altos funcionarios del Estado, incluido el actual presidente Michel Temer, serán citados por los delatores.

Hasta ahora, Camargo Correa había negado el pago sistemático de soborno. El 2015, Camargo Correa confesó algunos crímenes y pagó 700 millones de reales de indemnización para seguir operando.

Dos de sus principales directivos, Dalton Avancini y Eduardo Leite, firmaron acuerdos de delación premiada y relataron pagos de "propinas" en contratos con Petrobras, Electrobras y Electronuclear, con lo cual dieron por superado cualquier problema con la justicia.

Previamente, el 2009 habían logrado que la Corte Suprema archive una investigación contra ellos por lavado de activos y evasión de divisas, conocido como 'Castillo de Arena'.

En Lima, Camargo Correa ha recordado esto en comunicados y cartas dirigidos a los medios de comunicación, cada vez que se les menciona en el caso Lava Jato. Pues bien, todo esto va a cambiar.

Veja señala que la empresa promete incluso “exhumar el cadáver de la operación 'Castillo de Arena'. Es decir, permitir que las pruebas, planillas y manuscritos con órdenes de pago, que habían sido declaradas ilegales hace ocho años, puedan ser utilizadas por el Ministerio Público, junto con sus declaraciones.

De suceder esto, conmocionará el ambiente político brasileño. La Fiscalía quiere saber incluso si Camargo Correa pagó 'propinas' para enterrar el caso.

En la ejecución de 'Castillo de Arena', la policía federal encontró referencias a pagos a integrantes de siete partidos políticos, incluyendo el actual presidente Michel Temer, citado 21 veces en los documentos de esa operación y también dos de sus ministros.

"Si Camargo Correa saca los esqueletos del armario, puede complicar a otros dos ministros, el actual titular de Educación, Mendoça Filho, citado en Castillo de Arena como beneficiario de 100 mil reales, cuando era candidato a prefecto de Recife en 2008", recordó Veja.

También a Gilberto Kassab, ministro de Comunicaciones. Según 'Castillo de Arena', un auxiliar del ministro recibió un millón de reales para facilitar la liberación de un terreno. La transacción ocurrió cuando Kassab era prefecto de Sao Paulo.

La negociación

Veja indica que Camargo Correa decidió negociar con el Ministerio Público, luego de que los fiscales descubrieron por otra delación premiada que no habían contado todo lo que sabían de los sobornos.

Sergio Machado, ex presidente de Transpetro que se ha acogido a la delación premiada, relató pagos realizados por Camargo Correa y Queiroz Galvao en la construcción de dos navíos, en el gobierno de Lula, el 2010.

De acuerdo con la declaración de Machado, Camargo y Queiroz Galvao acordaron pagar 'propinas' por ese contrato de 1% del valor del contrato, es decir, 27 millones de reales. Los pagos se realizaron al ex presidente de Transpetro y su hijo, Expedito Ponte Neto, también delator, usando una cuenta secreta en el paraíso fiscal de Andorra, en Europa.

Machado identificó a los directivos de Camargo Correa que participaron en todo el proceso para constituir las empresas y las cuentas en el exterior donde se hicieron los pagos.

Mencionó a Pietro Bianchi, encargado del manejo de las cuentas en el exterior, Antonio Miguel Márquez, ex presidente del Consejo de Administración.

Entonces, Camargo Correa decidió colaborar. Las condenas por corrupción pueden superar los 100 años de cárcel y las multas económicas son por miles de millones de dólares.

Se sentirá en el Perú

De concretarse la colaboración de Camargo Correa y resucitar 'Castillo de Arena', el sismo se sentirá hasta el Perú. En un USB incautado a Pietro Gavina Bianchi, ex director y consultor del Grupo Camargo Correa, se encontraron una planillas de pagos donde aparecen los apellidos Toledo y García.

El documento tenía como título “Previsão de Capiles Tramo IV–Interoceânica”. 'Capiles' significa 'propina' en portugués, como se denomina a una coima.

Uno de los documentos, según la policía brasileña, menciona como parte de presuntos pagos ilícitos por obras en el exterior, lo siguiente: GIP (Peru)-US$ 50,0000, relacionado a “político”, “García”, “campanha”, que se habría realizado en mayo de 2006, en plena campaña electoral.

El mismo informe policial refiere que otra anotación dice PPV (Peru)-US$ 106,944 relacionado con los nombres Toledo, Max Vanderlei y JR.

Los documentos señalan que de un contrato en el Perú por US$180,373.536, Camargo Correa pagaría sobornos por US$ 6.313.075. Este dinero se pagaría, US$ 5.411.207, a la firma del contrato y US$ 901,868 para "JR" (en el documento no se menciona el nombre completo, solo estas iniciales).

De estos pagos se precisan que se había aprobado un pago a "JR" de US$ 106,944, de los cuales US$ 15,277 se pagarían en efectivo y US$ 91,667 en una cuenta bancaria en el Reino Unido.

La fiscalía peruana ya ha establecido que esos 91 mil dólares fueron depositados en una cuenta de Josef Maiman, amigo y colaborador del ex presidente Alejandro Toledo.

La colaboración de Camargo Correa permitirá documentar y establecer la identidad de todos los involucrados en este pago.

La policía brasileña también refirió que se encontró una planilla que da cuenta de pagos mensuales de 175 mil dólares, realizados en octubre del 2007 por la carretera Interoceánica. Son pagos fraccionados que totalizan un millón 50 mil dólares, monto que supone el 0.5% del valor inicial fijado para el tramo 4 de la interoceánica: 98 millones de dólares.

Sobre este tema, el fiscal Hamilton Castro ha podido confirmar que 55 mil dólares fueron depositados en una cuenta en el Ocean Bank relacionada con Enrique Saco Jaramillo, un personaje vinculado al fallecido ex ministro de Vivienda y Construcción Juan Sarmiento Soto en el segundo gobierno de García.

Obras
  • Desde el 2004. Camargo Correa ha trabajado en el Perú, solo o en consorcio con otras empresas brasileñas y peruanas, en siete proyectos de infraestructura financiados por el gobierno.
  • Carreteras. Camargo Correa participó en la construcción del tramo 4 de la carretera Interoceánica Sur, junto a Queiroz Galvao. Luego, en la carretera Chiclayo -Chongoyape, Llama-Cochabamba, en Cajamarca, y un puente en Pumahuasi.
  • Agua. También intervino en la construcción de la bocatoma de la Planta de Tratamiento de Agua en Huachipa.

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