El enfrentamiento entre la derecha
tradicional (PPK y sus aliados) y la derecha chicha (fujimoristas y cia) tuvo
un epilogo esperado por los grupos de poder económico pertenecientes a la gran
burguesía financiera.
Y si bien es cierto fue un poco
sorpresivo por la actitud de Kenji Fujimori y sus 9 seguidores, sin embargo el
tiempo transcurrido entre el día de la votación por aceptar que se debata la
vacancia presidencial y ayer sirvió para que, no solo los allegados a PPK
estuvieran muy atareados por ganar adeptos entre los congresistas que mostraban
dudas y vacilaciones frente a una decisión trascendental sino, también los
medios de comunicación cuyos propietarios pertenecen a esa derecha tradicional
se la jugaran a su favor.
Ahora bien, se dice que el tema del
indulto a Alberto Fujimori hizo que su hijo Kenji no votara a favor de la
vacancia, eso es algo que se podrá comprobar en el mediano plazo, pero
definitivamente con esos 10 votos ganaba el fujimorismo. En esta escaramuza
entre los sectores de la derecha que comparten el poder, la derecha tradicional
o “light” se impuso aunque con algunas “magulladuras”.
Lo preocupante, para nosotros, ha
sido observar una gran indiferencia en el sector popular frente a este
episodio. Se comprueba una vez más que la mayoría de la población le interesa
más por lo que sucede en la farándula o en el futbol que en la vida
política y las consecuencias nefastas de su aprovechamiento por parte de los
aplicadores del modelo económico neoliberal capitalista.
Frente a una crisis en las alturas
prolongada, más visible desde febrero pasado, la mayor parte de las
organizaciones que se reclaman de izquierda o clasistas (en el caso de los
sindicatos) han demostrado estar al margen de la lucha de clases del día a día.
Teóricamente hablan de cambio social, estructural, etc pero no hacen nada para
aplicarlo en la práctica, solo se hacen notar cuando cumplen tareas
propias a su interés particular.
Las convocatorias a las marchas en
los últimos días fueron dirigidas a “defender la democracia contra el golpe
fujimorista” según rezaban en sus cartelones, pero nunca fue para condenar al
modelo neoliberal que tanto PPKausas y fujimoristas defienden. Otros pedían
“nuevas elecciones y nueva constitución”, pero ¿a quién pedían? Pese a la
debilidad que muestran estos grupos políticos, nadie se atrevió a emprender el
camino del pueblo con una AUTOCONVOCATORIA a una ASAMBLEA CONSTITUYENTE POPULAR
con capacidad de gobernar y elaborar una nueva constitución.
Definitivamente ha quedado demostrado
que el FRENTE político de masas que el pueblo necesita para un verdadero cambio
estructural, por el momento, aun es un deseo. ¿Quiénes serán capaces de demostrar
que no son solo teoría? Lo veremos en el mediano plazo, mientras tanto gracias
a la indiferencia los corruptos seguirán haciendo de las suyas en el país.
22 / 12 / 2017
MI PALABRA
No hay comentarios:
Publicar un comentario