Venezuela y Socialismo
Siglo XXI
VENEZUELA:
¿GUERRA ECONÓMICA O ERRORES DEL GOBIERNO?
27/09/2016
Opinión
Recordando
el contexto en que nace
1. Cuando Chávez triunfa en las elecciones presidenciales de 1998 ya el
modelo capitalista neoliberal estaba haciendo aguas por todas partes. El dilema
no era otro que refundar el modelo capitalista neoliberal, evidentemente con
cambios, entre ellos una mayor preocupación por lo social, pero movido por la
misma lógica de la búsqueda del lucro; o avanzar en la construcción de otro
modelo. [i]
2. Chávez optó por esta última alternativa. Para denominarla decidió
rescatar la palabra socialismo a pesar de la carga negativa de la que había
sido históricamente cargada, pero especificando que se trataba del socialismo
del siglo XXI para diferenciarlo del socialismo soviético implementado durante
el siglo XX, advirtiendo que no se debía “caer en los errores del pasado”, en
la “desviación estalinista” que burocratizó al partido y terminó por eliminar
el protagonismo popular; en el capitalismo de Estado que puso el acento en la
propiedad estatal y no en la participación de los trabajadores en la conducción
de las empresas.
3. Chávez concebía el socialismo como un sistema económico centrado en el
ser humano y no en la ganancia, con una cultura pluralista y anticonsumista en
que el ser tuviese primacía sobre el tener. Un socialismo provisto de una
democracia verdadera y profunda donde el pueblo asumiese el rol protagónico.
Este es un elemento que lo distancia de otras propuestas de socialismo
democrático. Para él, la participación de la gente en todos los espacios era lo
que podía permitir que las personas ganasen confianza en sí mismas y se desarrollasen
humanamente.
4. Pero esto hubiese quedado en meras palabras si él no hubiera promovido
la creación de espacios adecuados para que los procesos participativos pudiesen
darse plenamente. Por eso fue tan importante su iniciativa de crear los
consejos comunales (pequeños territorios autogestionados), los consejos de
trabajadores, los consejos estudiantiles, los consejos campesinos. De lo que se
trataba era de ir conformando una genuina construcción colectiva que debía
plasmarse en una nueva forma de Estado descentralizado cuyas células
fundamentales deberían ser las comunas.
5. Construir con la gente significaba para él conquistar su mente y su
corazón para el nuevo proyecto de sociedad. Tenía claro que esta meta no se
alcanzaría mediante de prédicas sino a través de la práctica: creando
oportunidades para que la gente fuese entendiendo el proyecto en la medida en
que iba participando en la construcción del mismo. Por eso advertía: “cuidado
con el sectarismo, si hay gente [...] que no participa en política, que no
pertenece a partido alguno, bueno, no importa, bienvenidos. Digo más, si vive
por ahí alguien de la oposición, llámenlo. Que venga a trabajar y a ser útil.
La patria es de todos, hay que abrirles espacios y ustedes verán que con la
praxis mucha gente se va transformando...” [ii]
6. Uno de los logros históricos del proceso revolucionario bolivariano
fue haber podido convocar a una Asamblea Constituyente y aprobar luego una
nueva Constitución que cambiaba las reglas del juego político y ponía trabas al
neoliberalismo, planteándose contra el latifundio y la privatización de la
empresa venezolana del petróleo; a favor de los pequeños pescadores en desmedro
de las empresas transnacionales de la pesca; por la propagación de las empresas
cooperativas y del microcrédito; contra la privatización de la educación y a
favor de una enseñanza gratuita; contra la privatización de la seguridad
social. Esta Constitución aboga también por los derechos de los pueblos
indígenas, de los niños y niñas, por el derecho a la libre información y
reivindica un modelo participativo, en el que los ciudadanos jueguen un papel
protagónico.
Pero todos estos
planteamientos hubiesen quedado como letra muerta si el gobierno no hubiera
dictado las leyes que permitirían poner en práctica los principios
constitucionales. Fue entonces cuando la oligarquía venezolana comenzó a
sentirse amenazada en sus intereses económicos y su respuesta no se dejó
esperar. Golpe militar, sabotaje petrolero, referéndum revocatorio. Aunque uno
tras otro los intentos de poner fin al proceso liderado por Chávez fueron
derrotados, él no era un iluso como algunos podrían pensar. Sabía que las
fuerzas que se oponían a la materialización de este proyecto eran enormemente
poderosas.
7. Pero ser realista no significa caer en la visión conservadora de la
política concebida como el arte de lo posible. Para Chávez el arte de la
política era hacer posible lo imposible, no por simple voluntarismo sino
porque, partiendo de la realidad existente, buscaba crear las condiciones concretas
para que ésta cambiase mediante la construcción de una correlación de fuerzas
favorable a los cambios. Él entendía que para hacer posible en el futuro lo que
en ese momento parecía imposible era necesario alterar la correlación de
fuerzas tanto en el plano interno como internacional y durante todos los años
de su gobierno trabajó de forma magistral para lograrlo, entendiendo que para
construir fuerza política no bastaban los acuerdos de cúpula sino que lo
principal era construir fuerza social.
Sus
esfuerzos por crear una nueva correlación de fuerzas internacional
8. No se puede entender el proceso venezolano sin sopesar el contexto
mundial en el que éste tuvo que insertarse. Existía una correlación mundial de
fuerzas muy negativa para las fuerzas progresistas: tras la derrota del
socialismo en los países del Este y, especialmente en la URSS, había
desaparecido el campo socialista con todo su peso simbólico y práctico, y
Estados Unidos se había transformado en la primera potencia militar mundial sin
contrapeso alguno. La situación era muy diferente cuando triunfó la revolución
cubana o durante el gobierno de la Unidad Popular en Chile.
9. Consciente Chávez de que con esa correlación mundial de fuerzas no
podía llevar adelante una revolución social en forma aislada, se dedicó a
construir una fuerza internacional de apoyo al proceso bolivariano. Impulsó
procesos de integración suramericanos y caribeños orientados bajo el signo de
la solidaridad. Privilegió la relación con la Organización de Países Exportadores
de Petróleo (OPEP) y se acercó a otros polos de poder mundial como India, Rusia
y China, estrechando, al mismo tiempo, los vínculos con los foros de naciones
emergentes, como el Grupo de los 15 de cooperación Sur-Sur y el Grupo de los 77
y el Movimiento de Países No Alineados. En el Cono Sur, Chávez buscó una
alianza con Brasil para oponerse al ALCA e ingresar como miembro pleno en el
Mercosur.
10. Junto a otros presidentes latinoamericanos logró derrotar el proyecto
estadounidense del ALCA, levantando una propuesta de integración alternativa:
el ALBA [Alianza Bolivariana para las Américas que hoy se denomina: Alianza
Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América]. Estrechó sus relaciones con
Cuba, suministrando a la isla hasta petróleo en condiciones especiales de pago,
a cambio de sus servicios: médicos, venta de medicinas genéricas y asistencia
técnica en los sectores agrícola, turístico y deportes. Financió la “Misión
milagro” que devolvió la vista a millares de personas de bajos recursos en América
Latina. Estableció también un compromiso de suministrar a 11 países
centroamericanos y caribeños un trato preferencial en la venta de petróleo,
como un gesto de cooperación.
11. Chávez también entendió que la política debía ir antes que la economía
y por ello jugó un papel fundamental en la creación de espacios de encuentro de
los presidentes de la región aunque éstos tuviesen diferentes enfoques
económicos como la Unión de Naciones Suramericanas [Unasur] y la Comunidad de
Estados Latinoamericanos y Caribeños [Celac]. Lo importante era lograr reunirse
sin la presencia de los Estados Unidos. En este mismo sentido se orientan la
creación del Banco del Sur y del Banco del Alba.
12. Y como entendía bien que no se podía construir fuerza política sin
construir fuerza social, junto a estas iniciativas de encuentro de gobernantes,
apoyó iniciativas de encuentro de los movimientos sociales de la región.
13. Bajo su inspiración fue también creada Telesur, una iniciativa
fundamental para hacer frente a la guerra mediática que necesariamente tendrían
que enfrentar los gobiernos progresistas de América Latina. Chávez solía
repetir una sentencia de Simón Bolívar: “Nos dominan menos por la fuerza que
por la ignorancia y la superstición.” Gracias a esta señal televisiva estamos
correctamente informados de lo que realmente ocurre en la región.
14. Coincido con Atilio Borón [iii] en que TeleSUR es peligrosa porque
muestra la verdad de lo que ocurre no solo en esta parte del mundo sino en todo
el planeta y, al mostrar los estragos que perpetra el imperialismo, despierta a
los pueblos y alienta su rebeldía en contra de un orden imperial que a diario
acaba con la vida de decenas de miles de personas en todo el mundo. Por eso se
ha vuelto una grave amenaza y las fuerzas políticas más retrógradas harán todo
por silenciarla.
15. Y aunque hoy haya algunos retrocesos en la región, nadie puede dudar
que existe un abismo entre la América Latina que Hugo Chávez recibió y la
América Latina que nos dejó.
Guerra
económica que repite estrategia seguida en Chile
16. Aprovechándose del gran vacío de liderazgo que deja su desaparición
física, han recrudecido los ataques contra el proceso revolucionario
bolivariano, tanto desde dentro como desde fuera del país. Y como resulta muy
difícil intentar otro golpe de Estado contra el presidente Nicolás Maduro
—quien ha tratado de ser consecuente con el legado de Chávez— se ha agudizado
la “guerra económica” iniciada ya durante el período anterior: el gobernante
venezolano ha recibido “en poco más de tres años el equivalente de los ataques
que recibió Chávez en catorce años” y uno de sus objetivos ha sido afectar el
sistema de acceso a alimentos básicos a precios subsidiados que se impulsa
desde 2003 a través de la Misión Mercal, con resultados sustantivos en la
garantía del derecho a la alimentación.
17. El tema de la guerra económica ha sido abordado recientemente por el
destacado intelectual venezolano y ex ministro del gobierno de Maduro, Reinaldo
Iturriza [iv], de quien he tomado muchas de las ideas que expondré a
continuación al referirme a esta estrategia de la derecha venezolana. Pero
quiero empezar por decir que algo muy similar ocurrió en Chile para
desestabilizar el gobierno de Salvador Allende. [v]
18. Recordemos que en este país las medidas empiezan a ser aplicadas
inmediatamente después del triunfo electoral: corrida bancaria, contrabando de
dólares, paralización de algunas industrias, cese de importación de materias
primas y repuestos necesarios para el funcionamiento de las industrias, etcétera.
Bloqueo de los intentos del gobierno por modificar la injusta estructura
tributaria usando para ello su mayoría parlamentaria, negativa a aprobar
recursos presupuestarios para llevar adelante sus planes de carácter social,
instigación planificada para crear temor en los inversionistas extranjeros y
empresarios locales, provocando a mediano plazo un estancamiento productivo.
19. Dicho plan fue plenamente compartido por el gobierno de Nixon y los
consorcios multinacionales, que consumaron una operación de cerco económico que
se tradujo en: reducción de créditos, obstaculización de la renegociación de la
deuda externa, embargo de bienes por parte de las compañías expropiadas,
divulgación internacional de la imagen de un país en bancarrota para cercarlo
más desde el punto de vista financiero. El gobierno de Allende, que no quería
afectar la capacidad de negociación de los trabajadores, no tuvo otra
alternativa que ampliar la cantidad de dinero circulante, sabiendo que esto
acarrearía fuertes presiones inflacionarias. Al mismo tiempo, la ofensiva del
gobierno norteamericano le impidió mantener un volumen de importaciones
alimenticias acorde con la mayor capacidad adquisitiva alcanzada por los
sectores populares. Los problemas de abastecimiento se agudizaron día tras día.
Sobre esta base objetiva, los esfuerzos de la reacción se encaminaron a agravar
la situación económica mediante la especulación, el acaparamiento y el fomento
del mercado negro; mientras la prensa por ella controlada desataba una campaña
sistemática destinada a magnificar el desabastecimiento y a constituirlo en el
centro de sus ataques. A este macabro plan sumaron: cacerolazos,
manifestaciones callejeras, paros de transportistas, huelgas en el cobre,
manifestaciones contra los militares que apoyaban al régimen.
20. En Venezuela se han aplicado principalmente dos estrategias para
afectar el desarrollo económico y crear, con ello, descontento en la población:
la inflación inducida y el desabastecimiento programado. [vi] Según la
economista venezolana, Pasqualina Curcio, esto se logra, por una parte,
mediante la manipulación del tipo de cambio en el mercado paralelo e ilegal,
que sintomáticamente se incrementa exponencialmente durante en los meses
previos a los procesos electorales [vii] , y, por otra, a través de la
manipulación de los mecanismos de distribución de bienes esenciales para la
vida para crear artificialmente desabastecimiento.
Inflación
inducida
21. Según Curcio estas estrategias son viables en razón de características
y determinaciones históricas de la economía venezolana. Pues, de hecho, existe
una “concentración de la producción, de las importaciones y de la distribución
de los bienes y servicios en pocas manos”: 3% de las unidades económicas
registradas en el país controla las divisas para importaciones, y, por otra,
existe una “alta dependencia de las importaciones”.
22. Estos monopolios importadores y banqueros, que no producen bienes sino
que obtienen ganancias extraordinarias de la diferencia de precios entre lo que
compran afuera y lo que venden dentro del país, fijan oligopólicamente los
precios de los bienes que importan (bienes de primera necesidad, entre ellos
los alimentos, y los requeridos para la producción y el transporte) asumiendo
el tipo de cambio paralelo que es mucho mayor (14,5 veces) al valor real de los
productos estimado en moneda nacional. Con ello han acumulado un gran poder
económico que se traduce en influencia política y se refleja en el plano
institucional.
23. No sólo se perjudica al pueblo venezolano al elevar los precios de los
productos de primera necesidad, sino que también desfavorece a los sectores
burgueses productores de los restantes bienes de uso en la vida cotidiana
(agricultores capitalistas e industriales manufactureros). Como éstos se ven
obligados a comprar las materias primas y otros bienes que se incorporan al
proceso de producción a los precios fijados por esos monopolios importadores,
para que sus empresas sean rentables deben vender sus productos a cada vez más
altos precios. Y como el poder adquisitivo de la población se ha visto
severamente mermado por la alta tasa de inflación existente, la gente se ha
visto obligada a priorizar la compra de los artículos de primera necesidad
(alimentos, medicamentos, transporte), restringiendo la compra de artículos de
consumo menos vitales. Y esto sólo ha favorecido al gran capital importador,
reduciendo las ventas de las empresas que producen esos bienes afectando con
ello su rentabilidad.
Desabastecimiento
programado
24. Y en cuanto al desabastecimiento programado, Curcio precisa que esta
práctica —que es iniciada en el 2003, afectando a unos contados productos— se
generaliza en el 2013. Se habla de desabastecimiento programado, ya que la
ausencia de determinados productos en el mercado nacional no guarda relación
con los niveles de producción o de importación de dichos rubros. Los enemigos
del proceso crean un desabastecimiento artificial no colocando de manera
regular, oportuna y en cantidades suficientes esos productos en los estantes de
los establecimientos comerciales.
25. ¿Cómo no denominar guerra económica a estas estrategias de la derecha
para producir en Venezuela un caos económico que conduzca a un desprestigio del
gobierno y siente las bases para su derrocamiento por la vía electoral?
26. Por desgracia, el gobierno venezolano no ha logrado hacer frente a la
nefasta campaña mediática nacional e internacional con argumentos contundentes.
Tal circunstancia ha generado que importantes sectores de la población
venezolana y una inmensa mayoría de quienes siguen el proceso bolivariano desde
el exterior a través de las cadenas mediáticas, tiendan a atribuir al gobierno
y no a los verdaderos actores la responsabilidad del desabastecimiento y la
inflación.
27. Por supuesto que estos ataques se producen sobre un terreno fértil
producto de las debilidades de la política económica llevada adelante por el
gobierno que fue incapaz de prevenir la baja del precio del petróleo. A ello se
sumó una política de control de cambio y una política masiva de importaciones
que desestimuló la producción nacional colocando al país en una situación de
creciente dependencia de las importaciones. Pero nadie puede negar que un
sector de la burguesía venezolana y de la burocracia estatal corrupta están
aprovechándose de esta situación objetiva para ahondar la crisis y sepultar el
proyecto emancipador bolivariano, tratando de restaurar la Cuarta República,
paraíso de unos pocos y sufrimiento y marginación de la mayoría del pueblo.
28. Concuerdo plenamente con Reinaldo Iturriza en que la burguesía ve al
chavismo como algo “maldito”, “no tanto por su capacidad para aglutinar el
descontento, sino por su decidida actuación contra el statu quo” y el hecho de que haya impuesto límites
a los poderes económicos.
29. Según el investigador venezolano, ese chavismo está vivo pero “está
ausente de muchos de los análisis que se hacen sobre Venezuela. Omisión que
obedece, con frecuencia, a la intención deliberada de continuar ignorando a los
invisibles históricos, hoy sujetos políticos de un proceso de cambios
revolucionarios, y otras veces a la ceguera de cierta izquierda que, impedida
de ver realizada la revolución que siempre soñó, despacha como pesadilla la
revolución que hacen los hombres y mujeres de carne y hueso."
Los
desafíos que hoy debe enfrentar el proceso revolucionario bolivariano
30. Coincido con Pasqualina Curcio en que uno de los primeros desafíos que
tiene por delante el gobierno venezolano es lograr una eficiente intervención
del Estado en la regulación de los monopolios. Es difícil entender —como dice
Reinaldo Iturriza— que una parte de la burocracia siga favoreciendo a los
monopolios u oligopolios importadores, o a los intereses de la banca.
31. Por otra parte, de lo expuesto anteriormente queda claro que
objetivamente existen intereses contrapuestos entre los diferentes sectores de
la burguesía venezolana y que esto se refleja en el escenario político. La
oposición no es una unidad homogénea. Hay contradicciones enormes en su seno.
Hay un sector de la oposición que en lugar de preocuparse de resolver los
problemas del país, juega a derrocar al gobierno usando todos los medios a su
alcance, especialmente el estrangulamiento económico. Y a ello contribuyen los
sectores corruptos de la burocracia estatal importadora. Con ese sector es
imposible llegar a acuerdos. Pero hay otros sectores con los se podría llegar a
acuerdos si se siguiese una táctica correcta, aquellos que están dispuestos a
poner por encima los intereses del país.
Abandonar
ataques verbales y mantener un diálogo constructivo
32. Deberíamos ser suficientemente hábiles como para explotar estas
contradicciones y llevar adelante un proceso de diálogo coherente llamando a la
oposición a buscar soluciones para el país y evitando de lado y lado los
ataques verbales que impiden crear un ambiente de mínima confianza, que es una
de las condiciones fundamentales para poder mantener un diálogo constructivo.
Recientemente se ha anunciado que ha habido un acuerdo entre el gobierno
venezolano y la oposición para invitar al Sumo Pontífice a ser uno de los
mediadores en ese diálogo. Eso abre un horizonte de esperanza.
33. Y en relación con este tema no puedo dejar de citar extensamente al
Papa Francisco. Veamos algunas de las cosas que dijo en su visita a Paraguay:
[El diálogo no puede ser
un] diálogo-teatro en el que juguemos al diálogo [y
sólo nos escuchemos entre nosotros].
[...] el diálogo
presupone y nos exige buscar una cultura del encuentro [...] que sabe reconocer
que la diversidad no sólo es buena, es necesaria. [...] Por lo que el punto de
partida no puede ser: Voy a dialogar pero aquel está
equivocado. No, no, no podemos presumir que el otro esté equivocado.
Yo voy con lo mío y voy a escuchar qué dice el otro, en qué me enriquece el
otro, en qué el otro me hace caer en la cuenta que yo estoy equivocado, y en
qué cosas le puedo dar yo al otro. Es una ida y vuelta, ida y vuelta pero con
el corazón abierto. Con presunciones de que el otro está equivocado, mejor irse
a casa y no intentar un diálogo, [...]”
[...]. Dialogar no es
negociar. Negociar es procurar sacar la propia tajada. [...] Si vas con esa
intención no pierdas tiempo. Es buscar el bien común para todos. Discutir
juntos, pensar una mejor solución para todos.
[...] Al tratar de
entender las razones del otro, al tratar de escuchar su experiencia, sus
anhelos, podemos ver que en gran parte son aspiraciones comunes. [viii]
Elaboración de una amplia plataforma de
lucha para enfrentar la crisis
34. Otro de los desafíos que debemos enfrentar es la elaboración de una
amplia plataforma de lucha para enfrentar la crisis que se está viviendo.
Consideramos que esta no puede ser muy radical, porque el proceso bolivariano
hoy no es lo suficientemente fuerte como para proponerse cambios radicales. La
correlación de fuerzas después de las elecciones ha dado una señal, se perdió
una batalla, había que recomponer las fuerzas para prepararse para futuras
batallas consolidando posiciones. No se puede pretender lanzar una ofensiva
exitosa que revierta la situación en esas condiciones..
Explicar
al pueblo las dificultades
35. Otro de los desafíos que tenemos es el de ser capaces de explicar al
pueblo las dificultades que el país está enfrentando: “Hay quienes piensan que
no hay que decirle al pueblo los problemas porque se puede deprimir. Yo creo todo
lo contrario, nuestros pueblos son lo suficientemente inteligentes como para
entender y apretarse el cinturón cuando es necesario hacerlo si somos capaces
de explicarle con toda claridad el origen de la situación de crisis que existe,
reconociendo con honestidad que la derecha se está aprovechando de las
debilidades y errores que se han cometido. Claro que eso debe ir acompañado con
el ejemplo de la alta dirección del gobierno y del partido: si se pide
austeridad al pueblo hay que partir con el ejemplo de sus líderes.
Qué no hicimos bien y
qué fuimos aprendiendo en el camino
36. Por último, así como nadie le echaría la culpa a la receta de cocina
por el flan que se quemó al poner muy fuerte el horno, de la misma manera, las
dificultades actuales por las que atraviesa Venezuela no pueden servir de
argumento para sostener que la historia ha demostrado que el proyecto de
socialismo del siglo XXI propuesto por Hugo Chávez es inviable. Lo que tenemos
que analizar seriamente es qué no hicimos bien y qué fuimos aprendiendo en el
camino que no debemos repetir. Muchos de esos errores son comprensibles dado
que no existían modelos pre-hechos que indicaran el camino a seguir y se hacía
necesario “inventar para no errar” —como decía Simón Rodríguez, tutor de Simón Bolívar.
Podríamos hablar de que han sido errores necesarios.
Formemos un cordón de
defensa del proceso revolucionario bolivariano.
37. Venezuela fue el inicio de un ciclo de cambios en América Latina. Fue
el renacimiento de la esperanza, fue gobernar para resolver los problemas de
los más desfavorecidos, entendiendo que no se podía resolver el problema de la
pobreza si no se daba poder a los pobres. Fue la encarnación de la solidaridad
con los pueblos hermanos de la región que estaban en dificultades económicas.
Hoy, que esta nación está sufriendo más que otros países, los embates de la
crisis mundial del capitalismo y de la guerra económica desplegada contra ella,
concentrando las mayores agresiones de las fuerzas reaccionarias del mundo,
merece toda nuestra solidaridad. Sepamos corresponder a su noble e
increíblemente extendida generosidad con las naciones y pueblos más pobres de
la región y del mundo formando un cordón de defensa del proceso revolucionario
bolivariano.
38. Para terminar, que creo que podemos ser optimistas. Sin duda alguna la
siembra de Chávez ha marcado a su pueblo y lo ha hecho madurar, como pude
constatar en persona durante los años que viví en ese país. Pienso que toda esa
gente, a la que se le otorgó la oportunidad de estudiar, de pensar, de
participar, de construir, de decidir —y que creció enormemente en autoestima y
maduró humanamente— defenderá el proceso.
40. Yo siempre he dicho que hay que medir al proceso revolucionario
venezolano no tanto por las medidas transformadoras adoptadas —que son muchas—,
sino por el crecimiento del sujeto revolucionario, y esa obra es obra de
Chávez. El proceso podrá haber cometido errores y tener muchas debilidades —y
con mucho dolor yo en su momento las fui señalando— pero lo que él logró con su
pueblo, eso ¡nadie lo podrá borrar jamás!
Notas
[i] . Las ideas que
desarrollo en esta parte del artículo proviene de: Marta Harnecker, El principal legado de Chávez: Construir con la gente una
sociedad alternativa al capitalismo, La Segunda, Stgo. de Chile, 6
marzo 2013.
[ii] . Primer Aló
Presidente teórico, 11 de junio de 2009.
[v] . Ver: Marta
Harnecker,Reflexiones sobre el gobierno de Allende. Estudiar el pasado para
construir el futuro.
[vii] . Las
variaciones más altas se han registrado en los meses de octubre 2012
(elecciones presidenciales en las que vence Hugo Chávez), diciembre del mismo
año (elección de gobernadores), abril 2013 (elecciones presidenciales por
fallecimiento de Hugo Chávez), diciembre 2013 (elecciones municipales). Desde
ese momento en adelante el incremento del dólar paralelo ha sido sostenido y
desproporcionado explicando el resultado desfavorable al gobierno de las
elecciones parlamentarias. Op.cit.
[viii] . Palabras en
encuentro con representantes de la sociedad civil en Paraguay, Estadio León
Condou del colegio San José, Asunción, sábado 11 de julio de 2015. Extraje sólo
lo esencial, el Papa aborda el tema con mayor amplitud.
fecha: 27 de
septiembre de 2016, 13:22
asunto: [alai-amlatina]
Alainet.org Al Día - 27/09/16
cifrado: alainet.org
no cifró este mensaje Más información
Mensaje importante
principalmente por los integrantes de la conversación
COLECTIVO PERÚ INTEGRAL
30 de septiembre 2016