viernes, 5 de octubre de 2012

LAS EMPRESAS-PAÍS Y LA GRAN TRANSFORMACIÓN III: FUENTES DE FINANCIAMIENTO DE LAS EMPRESAS-PAÍS





Dr. Hugo SALINAS




¿Cómo financiar la creación o desarrollo de una empresa? En la actualidad existen diversas formas de financiamiento. Por ejemplo, podemos utilizar nuestros ahorros. Si ello no es suficiente podemos pedir la participación de otras personas o instituciones. Incluso podemos recurrir a un préstamo, nacional o internacional. En todos estos casos, el financiamiento de la empresa se realizará a partir de personas o instituciones privadas. De ahí que, llegado el momento de repartir las utilidades de la empresa, cada uno recibe en proporción de su participación.


El financiamiento de las empresas-país, así como de los proyectos de inversión del sector a Repartición Igualitaria, será completamente diferente a la forma actual. El financiamiento provendrá del país. ¿El país puede financiar la creación de empresas? ¿Nos estamos refiriendo a un financiamiento a través del presupuesto público, o del aporte de cada uno de los ciudadanos? El financiamiento-país es completamente diferente a las formas utilizadas hasta la fecha, como lo veremos enseguida.


Los proyectos de inversión del sector a Repartición Igualitaria


Los proyectos de inversión pueden ser propuestos por diferentes actores. Ellos pueden ser, por ejemplo, las personas pertenecientes a un barrio que desean asfaltar una pista, las organizaciones de defensa que proponen la construcción de un dique ante las amenazas del desborde de un río, las instancias de la municipalidad que sugieren la construcción de una escuela, los profesores de una escuela que solicitan la refacción del establecimiento, etc.


Cada proyecto de inversión es discutido por las partes interesadas. Incluso, desde el inicio de la formulación de la idea, se solicita la participación de la Agencia Local del sistema financiero, de las instituciones educativas (universidades sobre todo), colegios profesionales, y personas especializadas en el tema, a fin de precisar los alcances técnicos y financieros del proyecto. Una vez madurada la idea, aprobada por las partes interesadas, el documento que sustenta la idea se le presenta ante la Agencia Local del sistema financiero. Y es a partir de este momento que comienzan los estudios para su ejecución correspondiente. Hasta aquí, en términos formales, es el corrido normal de cualquier proyecto de inversión.


Sin embargo, las diferencias del financiamiento-país con respecto a los proyectos de inversión tradicionales comienzan a aparecer. Primero, no hay ninguna restricción a la naturaleza del proyecto de inversión. Basta que tenga una demanda social. Segundo, la Agencia Local del sistema financiero no opone ninguna restricción al monto previsto del proyecto de inversión. Tercero, es la Agencia Local que, en definitiva, decidirá sobre la ejecución del proyecto de inversión. Indudablemente que la decisión no la toma sola. Este punto lo detallamos aparte.


Este mecanismo de aprobación de proyectos de inversión del sector económico a Repartición Igualitaria exige, además de la participación de todas las personas, instituciones y partes interesadas en el proyecto de inversión, la Descentralización del sistema financiero. Dicha descentralización permitirá que las decisiones sobre un proyecto de inversión sean tomadas a un solo nivel, el de la Agencia Local.


Esta característica en la aprobación de los proyectos de inversión, primero, facilita la rápida toma de decisión para la ejecución del proyecto de inversión y, segundo, no pone ningún límite al número de proyectos de inversión a desarrollarse, al mismo tiempo y en el mismo ámbito de la Agencia Local del sistema financiero.


Financiamiento gratuito e ilimitado


Los proyectos de inversión del sector económico a Repartición Igualitaria cuentan con una fuente de financiamiento gratuita e ilimitada. Es un modus operandi que se diferencia totalmente con la forma de financiar los proyectos de inversión actualmente. Aparentemente es imposible que exista una fuente de financiamiento gratuita e ilimitada. Sin embargo es posible, y por razones simples de comprender.


El financiamiento de los proyectos de inversión del sector económico a Repartición Igualitaria será gratuito, simple y llanamente, porque el propietario de dicho proyecto de inversión será el país y no aquellos que lo propusieron. Es el país que lo financia y, por consiguiente, es al país que le pertenece. En consecuencia, para quienes lo proponen será completamente gratuito.


Las empresas-país son financiadas por el país y, por consiguiente, le pertenecen al país. No irroga ningún gasto a los gestores de la idea. De ahí que, como el financista de la empresa-país es el país, las utilidades de la empresa le pertenecen en su totalidad. Y este principio es el que se encuentra en la base del nacimiento de la Remuneración de Base. Una remuneración que recibirán todos los habitantes del país en igualdad de condiciones y sin ninguna restricción.


Cabe anotar que los proyectos de inversión del sector a Repartición Igualitaria serán ejecutados únicamente por las empresas-país, o tendrán su control total. De igual modo es necesario remarcar que el financiamiento gratuito para los proyectos de inversión a ser ejecutados por las empresas-país es una ventaja que no la poseen los proyectos de inversión actuales. Este tipo de financiamiento facilita que poblaciones “sin capacidad de ahorro” ejecuten todas las obras y servicios que nunca antes fueron ejecutados. Abre la posibilidad de, rápidamente, ponerse a nivel con el cuadro de vida de los “países desarrollados”.


Pero la pregunta subsiste: ¿cuál será el mecanismo financiero que permita contar con un financiamiento ilimitado para el desarrollo de los proyectos de inversión del sector económico a Repartición Igualitaria? 


La creación monetaria, fuente de financiamiento ilimitada


El mecanismo financiero que permite contar con un financiamiento ilimitado es la creación monetaria. Este mecanismo de la creación monetaria será la principal fuente de financiamiento de los proyectos de inversión del sector económico a Repartición Igualitaria. No obstante, una inquietud subsiste. ¿Se puede crear moneda, en forma “ilimitada” sin producir inflación monetaria? En todo caso, ¿quién es el que está facultado para realizar una operación de creación monetaria?


Una de las fuentes más importantes en el financiamiento de los proyectos de inversión, que serán ejecutados por las empresas-país, serán los avances en dinero que les otorgará su sistema financiero. Basta que el proyecto de inversión tenga la autorización social correspondiente, y los estudios técnicos lo avalen, para que inmediatamente los desembolsos correspondientes se realicen, en función de los avances del proyecto de inversión.


Aquí es necesario remarcar sobre los plazos para el desembolso efectivo de los montos asignados al proyecto de inversión. Actualmente, según los procedimientos del sistema nacional de inversión pública, los desembolsos tardan meses, años e incluso, nunca se realizan. Los procedimientos del actual sistema son una traba real al desarrollo de los proyectos de inversión. Incluso, cuando ellos son autorizados para el gasto, el proyecto de inversión nuevamente tiene que ajustarse dado los cambios habidos entre tanto. Este no será el caso en el sistema financiero del sector económico a Repartición Igualitaria. Y la razón es simple. Las agencias locales del sistema financiero a Repartición Igualitaria son descentralizadas. Es decir, las agencias locales gozan de plena autonomía y sus decisiones serán a un solo nivel.


¿Y por qué los avances en dinero que financiarán los proyectos de inversión o las empresas-país serán ilimitados? El financiamiento será ilimitado puesto que, quien financia, es el Príncipe del sistema crediticio. Se le llama Príncipe porque, a nombre de la Nación, tiene la capacidad de crear dinero, de emitir dinero. Una capacidad que, en principio, es ilimitada.


Entonces, a la base del financiamiento ilimitado de los proyectos de inversión y de las empresas-país se encuentra el sistema crediticio del país, en cuya cabeza se encuentra el Banco Central de Reserva del país y el Jefe del Estado (presidente del país, primer ministro, Rey…). En un sistema descentralizado, ellos delegan la emisión monetaria a las agencias locales. Esto es lo que permite que se puedan ejecutar proyectos de inversión de cualquier monto y magnitud. No hay restricción al crédito en tanto sean proyectos de inversión, primero, respondiendo al estado de arte en la materia y, segundo, sean ejecutados por las empresas-país.


No obstante, en la práctica, existen tres restricciones al financiamiento ilimitado. La primera, y esencial, son los recursos físicos disponibles tanto para la ejecución del proyecto de inversión como para el funcionamiento de la empresa-país. La segunda restricción es el tiempo de maduración tanto del proyecto de inversión como de la creación o desarrollo de la empresa-país. Y la tercera es el grado de avance del proyecto de inversión. Sin embargo, es preciso remarcar que el financiamiento está disponible, solamente que por las razones expuestas no se puede ejecutar al ritmo deseado.


Las ventajas del financiamiento gratuito e ilimitado


La condición de “gratuito e ilimitado” pone al sector económico a Repartición Igualitaria en una posición de ventaja inigualada. Facilitará su crecimiento a tasas nunca antes imaginadas. Se suministrará los Bienes de Necesidad Básica y otros en un tiempo récord, y respetando las normas de calidad y precio de una economía de mercado. Es una de las características del sector a Repartición Igualitaria que facilitará un rápido alcance a lo logrado por los “países desarrollados”.


Por lo tanto, en principio, no hay ninguna necesidad de recurrir a la banca internacional de crédito para desarrollar proyectos de inversión. No existe ninguna obligación tampoco de recurrir a empresas multinacionales para desarrollar proyectos de inversión de interés nacional. Menos aún, no hay razón para recurrir al endeudamiento interno. Estos son vicios fomentados por una teoría económica neoliberal que solamente tiene por hipótesis de trabajo la propiedad individual y la Repartición Individualista del resultado neto de la actividad económica.


Vicios de la teoría neoliberal que, en circunstancias determinadas, ni los Estados Unidos los acepta. Aquí la prueba. Recientemente, con motivo de la crisis financiera originada a fines del 2007 en los Estados Unidos, los americanos estaban dispuestos a emitir un crédito por un monto igual al total del presupuesto público anual de su país. Una emisión monetaria que no tenía ningún respaldo real ni presupuestario. Algo peor, una emisión monetaria que no estaba destinada a proyectos de inversión, sino a cubrir errores financieros y por un monto igual al 100% de su presupuesto público anual. En la práctica, el Congreso de los Estados Unidos aprobó una emisión monetaria del orden de 787 mil millones dólares (aproximadamente el 27% del total de su presupuesto público anual). ¡En una sola emisión monetaria lanzó al mercado, más de un cuarto del monto de su presupuesto nacional! Sin que estuviera presupuestado, y sin ningún respaldo real.


Por lo expuesto, ha quedado establecido que una buena y acelerada ejecución de proyectos de inversión requiere de una Descentralización del sistema financiero y de una separación entre la política y la economía. En lo que acabamos de describir, no hay ninguna participación decisional de la autoridad política. Son los demandantes, las personas e instituciones concernidas con el tema, y el sistema financiero descentralizado quienes deciden, ejecutan y celebran las ceremonias correspondientes a cada uno de los proyectos de inversión.


La Descentralización del sistema financiero y la posibilidad de un financiamiento gratuito e ilimitado es lo que permite contar, como lo veremos más adelante, con “los mil caños de financiamiento y los mil proyectos de inversión, al mismo tiempo y en la misma localidad”.


Las Rentas producto del uso de los recursos naturales Dos casos de figura


Otra fuente importante en el financiamiento de los proyectos de inversión de las empresas-país, y de los proyectos de inversión, son las Rentas por la explotación de los recursos naturales del país. Los recursos naturales pertenecen al país y, por consiguiente, las rentas que generen pertenecen necesariamente al país. Con mayor precisión diremos que los recursos naturales pertenecen a todos y cada uno de los habitantes del país. Por consiguiente, las Rentas que provengan de su explotación pertenecen igualmente a todos y cada uno de los habitantes del país, en igualdad de condiciones.


Esta definición nos podría inducir a pensar, como en cierta manera sucede ahora, que el monto de la Renta se debería repartir, en partes iguales, entre todos los habitantes del país. De ser así, el monto total de todas las Rentas debería sumarse al total de las utilidades de las empresas-país y, por consiguiente, ser repartidos entre todos los habitantes del país, en partes iguales.


Sin embargo, es necesario hacer notar que, las utilidades de las empresas-país son el resultado de un esfuerzo realizado por la Fuerza de Trabajo, mientras que las sumas de dinero provenientes de Rentas son aleatorias, en tanto que existe el recurso natural. Es decir, en el caso de las utilidades, ante un nuevo esfuerzo desplegado por la Fuerza de Trabajo se las puede volver a obtener. En cambio, en las Rentas, una vez agotado el recurso, no existe el elemento que faculta obtener una Renta.


Es esta condición de “aleatorio” de la fuente de ingreso Renta que determina hacer un mejor uso del mismo. Y la mejor manera de utilizar una Renta es precisamente volverla reproductible. Y el medio de utilización es la ejecución de proyectos de inversión que permitan conservar el principal y, además, obtener un resultado neto. Es este resultado neto que puede ser lanzado nuevamente a la inversión o, si la sociedad lo decide, destinarlo al consumo. De esta forma, los recursos naturales del país habrán tenido un buen uso en provecho de la presente y futuras generaciones.


¿Quiénes deciden sobre el monto de las Rentas que da lugar la explotación de un recurso natural? Los que deciden sobre el monto de la Renta son todos los que están concernidos con dicha explotación, dentro de su marco de influencia. Además, por pertenecer dichos recursos naturales al país, pueden participar todas las personas que lo deseen. Es la sociedad civil, en sus diferentes estamentos y organizaciones que tomará la decisión. Dicha decisión será el resultado de una evaluación completa  de sus implicancias en la vida social, económica, política y otros de las comunidades inmersas dentro del ámbito de dicha explotación.


Es a partir de los resultados de la evaluación del proyecto de explotación del recurso natural que se decidirá, a nombre del país, los términos del acuerdo y el monto respectivo por el concepto de Renta de explotación de dicho recurso natural.


Partiendo de este mismo principio, las Rentas no tendrán un destino específico. Ellas ingresarán a una Caja Única manejada por el sistema financiero. El único destino será el de la ejecución de proyectos de inversión a cargo de las empresas-país, o la creación y desarrollo de las mismas empresas-país.


Los Royalties por el uso de patentes pertenecientes al país.


Una tercera fuente de financiamiento son los Royalties por el uso de patentes, invenciones, y otros, pertenecientes al país. A medida que se desarrolle el proceso de trabajo de concepción, como lo veremos líneas abajo, el número de patentes y el monto de Royalties irán en crecimiento.


Los royalties son otra fuente importante de financiamiento que será recaudado por la Caja Única del sistema financiero, y su destino será la ejecución de proyectos de inversión a cargo de las empresas-país, o a la creación y desarrollo de las mismas.


Las Donaciones


Una cuarta fuente de financiamiento de los proyectos de inversión o la creación y desarrollo de las empresas-país son las Donaciones, tanto nacionales como extranjeras. Ellas serán recaudadas por la Caja Única del sistema financiero del sector a Repartición Igualitaria. Salvo acuerdo establecido, y en casos muy excepcionales, las Donaciones serán orientadas al financiamiento de un proyecto de inversión predefinido.


El co-financiamiento de los proyectos de inversión Dos casos de figura


También existe como una fuente de financiamiento el co-financiamiento de proyectos de inversión. Condiciones particulares para el desarrollo de un proyecto de inversión, como lo veremos líneas abajo, sobre todo en el desarrollo de la economía inmaterial, exigen la participación de países o empresas a Repartición Individualista. En estas circunstancias, el co-financiamiento es posible a condición de que se efectúe en condiciones de igualdad, reciprocidad y reconocimiento de la soberanía nacional.


La condición de igualdad supone que ambas partes manejarán el proyecto en igualdad de condiciones tanto en la parte gerencial como en la parte técnica del proyecto de inversión. No habrá ningún aspecto del desarrollo del proyecto de inversión en donde no participe la parte nacional, a través de una empresa-país.


Asimismo, habrá reciprocidad en el manejo del proyecto de inversión en la medida que el resultado neto del total de la inversión sea repartido entre ambas partes en función de los aportes de cada uno. Los aportes pueden ser en stock como en flujo.


La gran Transformación no exige ni nacionalización ni expropiación


La gran Transformación no exige ni nacionalizaciones ni expropiaciones por las razones siguientes. Primero. Es necesario siempre recordar que el país cuenta con una forma de financiamiento que hace innecesario la demanda de capitales extranjeros para realizar un proyecto de inversión a ser ejecutado por las empresas-país. Con ello queda establecido que si existe necesidad de levantar una empresa cualquiera, existen los recursos necesarios y suficientes.


Segundo. La experiencia nos enseña que las nacionalizaciones no han sido, nunca, un buen negocio para el país que efectuó la nacionalización. En todos los casos, en el proceso de nacionalización, las empresas privadas han utilizado toda suerte de argumentos para que, de un lado, el monto de la nacionalización sea exorbitante con relación a su real precio y, de otro lado, la cosa nacionalizada nunca haya tenido el resultado esperado. Por lo general, las nacionalizaciones han terminado en un desastre nacional.


Por ello, es mucho más conveniente, en una economía de mercado, hacer jugar todos los elementos de la economía mercado para que, si la empresa privada no acepta ceder la producción del bien económico o devolver la explotación del recurso natural, ella quiebre simplemente. Un ejemplo bastará para mostrar todas las posibilidades que tiene un país, en economía de mercado, para hacer valer sus derechos y su soberanía nacional.
En el caso de las empresas multinacionales mineras, por ejemplo. Ellas crean empresas-enclave por tres razones básicas. Primero, porque la mano de obra es increíblemente barata. Segundo. El monto por el concepto de Renta que exige el gobierno es increíblemente bajo. Tercero. Porque los países en donde las empresas multinacionales deciden realizar su explotación minera, los gobiernos nacionales, caso del Perú, son corruptos por tradición.


Entonces, si partimos del supuesto de que se encuentra en el Poder un gobierno con real intención de hacer respetar las decisiones nacionales, y tiene un respaldo popular, es suficiente solicitar a la ciudadanía que nadie trabaje para esta empresa privada. En esta condición, a la empresa privada, nacional o extranjera, le será muy costoso traer personal del extranjero para seguir produciendo o explotando la empresa en cuestión.


Es decir, existen mil argumentos para disuadir a cualquier empresa privada que siga produciendo o explotando en el país, si el pueblo ha decidido lo contrario. El control de la salida de utilidades de la empresa, el control de inmigración, el control de importación de máquinas y otros, la supervisión de los contratos de producción o de explotación, la vigilancia de carreteras, etc., son tantos elementos que proporciona el proceso artificial de producción para imponer la decisión nacional, sin necesidad de pasar por una nacionalización o expropiación.


Una vez más, en el caso de las empresas multinacionales mineras, por ejemplo, no se debe perder de vista que el objetivo nacional no es la producción minera sino, suministrar los Bienes de Necesidad Básica, y desarrollar las empresas ligadas al proceso de trabajo de concepción. Y en este proceso, se aumentará rápidamente el salario mínimo hasta alcanzar el estándar internacional. Es decir, el país estará creando condiciones, en forma paralela, para que la empresa multinacional minera, por sí sola, decida cerrar su planta o avenirse a la propuesta nacional.


En todo caso, es importante anotar que, esto no significa avalar actos de corrupción mediante el cual se han hecho mal uso de los bienes del país, o se han expedido normas contrarias al interés nacional. Para ello existen los canales correspondientes a fin de establecer las acciones y sanciones correspondientes. Pero dichos actos de corrupción en ningún caso justifican una nacionalización o una expropiación.


En igual forma diremos que el modus operandi del sistema de financiamiento de las empresas-país impide el ingreso del dinero de la mafia, de procesos especulativos u otros, que pongan en riesgo el normal funcionamiento de una economía real de mercado a dos sectores, en donde el sector a Repartición Igualitaria es el hegemónico.


Ferreñafe, el pueblo de las dos Fe, octubre 4 del 2012

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