05 dic 2025
La mayoría de nosotros tiene
una canción favorita capaz de elevarnos el ánimo, despertarnos
recuerdos o incluso sacarnos lágrimas. Pero ¿qué ocurre exactamente en el
cerebro cuando escuchamos ese tema que nos conmueve tanto? La neurociencia
lleva años investigando este fenómeno y hoy sabemos que la música puede activar
algunos de los circuitos más profundos y primitivos de nuestra biología.
1. Un estallido de dopamina: el mismo sistema de recompensa que con la comida o el sexo
Cuando escuchas tu canción favorita, el cerebro libera dopamina, el neurotransmisor del placer y la motivación. Lo interesante es que este “chasquido químico” no solo ocurre en el clímax musical —el estribillo que más te emociona—, sino incluso anticipándolo. Es decir, tu cerebro aprende cuándo llega “ese momento” y se adelanta liberando dopamina antes, como si premiara la expectativa.
Esto activa el núcleo
accumbens, una región profunda asociada al placer, y refuerza el deseo de
volver a escuchar esa canción una y otra vez.
2. La música conecta emociones y memoria autobiográfica
La canción que más te gusta no solo te resulta agradable: te evoca momentos concretos de tu vida. Esto se debe a que la música activa simultáneamente el hipocampo (memoria) y la amígdala (procesamiento emocional). Por eso un simple acorde puede transportarte a un verano concreto, a una relación pasada o a una etapa escolar.
Esa combinación de emoción + recuerdo es una de las razones por las que tu canción favorita se vuelve tan difícil de reemplazar.
3. Tu cerebro se sincroniza: un fenómeno llamado “entrainment”
La música tiene estructura: ritmo,
armonía, patrones repetitivos. Cuando escuchas tu tema preferido, las ondas
cerebrales se adaptan al ritmo, un proceso conocido como entrainment.
Esto mejora:
-La concentración
-La coordinación
-El estado de ánimo
-La percepción del tiempo
Por eso ciertas canciones “te
activan” para entrenar, mientras que otras te calman casi de inmediato.
4. Activa regiones que normalmente no trabajan juntas
La música es uno de los pocos
estímulos que moviliza todo el cerebro a la vez. Tu canción
favorita involucra simultáneamente:
-Áreas motoras (aunque estés quieto,
tus neuronas “ensayan” el movimiento)
-Áreas auditivas
-Regiones del lenguaje
-Zonas emocionales
-Circuitos de recompensa
Este encendido global explica por qué
la música es tan eficaz en terapias contra el alzhéimer, el párkinson o la
depresión: obliga al cerebro a “trabajar en red”.
5. Te da una identidad sonora
Más allá de lo biológico, la canción
favorita tiene un componente social. Tu cerebro integra esa música dentro de
tu autoimagen: lo que te gusta “dice algo de ti”. Por eso defender
tu canción —o tu género musical preferido— activa áreas relacionadas con la
identidad y el apego.
6. ¿Por qué no cambia fácilmente
nuestra canción favorita?
Porque está profundamente anclada en tres capas:
-Placer biológico (dopamina)
-Memoria autobiográfica (hipocampo)
-Identidad personal (corteza prefrontal)
Un tema nuevo puede gustarte, pero difícilmente tendrá la carga
emocional y biográfica que ha acumulado tu favorita durante años.
Fuente: https://noticiasdelaciencia.com/art/55642/asi-transforma-tu-cerebro-tu-cancion-favorita
No hay comentarios:
Publicar un comentario