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martes, 3 de marzo de 2015

EL LEGADO POLÍTICO DE MUJICA ES EL VIRUS DE LA HORIZONTALIDAD




El 1 de marzo de 2015 asume Tabaré Vázquez como Presidente de Uruguay. Le entrega la banda presidencial su antecesor en el cargo, José Mujica. Además del cargo, Vázquez asume un legado. Lo más importante de ese legado es, curiosamente, el propio Mujica. Será un escenario pleno de desafíos: un país, un partido político hegemónico, dos liderazgos nacionales en el mismo partido y dos estilos personales y políticos bien definidos y bien diferentes.

Comprender esa dinámica es, además, un buen desafío para la psicología política.

Tabaré Vázquez: la verticalidad de un Presidente

Vertical. Ordenado. Jerárquico. Secuencial. Reflexivo. Metódico. Firme. Paciente. Así es el liderazgo de Tabaré Vázquez.

Este médico oncólogo de hablar claro y amable fue Intendente de Montevideo, la capital de Uruguay, entre 1990 y 1994. Por entonces formaba parte del Partido Socialista, integrante de la coalición de izquierdas Frente Amplio.

El Frente Amplio había sido constituído en 1971 y agrupaba comunistas, socialistas, demócrata-cristianos, independientes de izquierda y escindidos de los tradicionales partidos Nacional y Colorado.

Entre 1973 y 1985 una dictadura cívico-militar prohibió, reprimió, persiguió y castigó violentamente a esa fuerza política, pero finalizada la dictadura el Frente Amplio seguía en pie y en poco tiempo conquistaba por primera vez el gobierno de Montevideo. Tabaré Vázquez, sin mayor actividad política previa, fue factor clave para aquel triunfo municipal. Con él la izquierda logró 2 avances extraordinarios: carisma y experiencia.

En 1994 Tabaré Vázquez fue candidato presidencial del Frente Amplio. Su muy bien valorada experiencia de gobierno y el carisma de su personalidad ayudaron decisivamente a que por primera vez en la historia el país político se dividiera en tercios entre el Partido Colorado (ganador de aquella elección y fuerza hegemónica durante todo el siglo 20), el Partido Nacional y el Frente Amplio.

En 1999 el Frente Amplio, siempre con Vázquez como candidato presidencial, ya era la mayor fuerza política del país a pesar de ser derrotado en la segunda vuelta presidencial. Finalmente el Frente Amplio ganó las elecciones de 2004 y Tabaré Vázquez fue el Presidente de Uruguay entre 2005 y 2010.

El primer Presidente de izquierdas en la historia uruguaya culminó su mandato con inéditos índices de aprobación popular a su gestión. Algunas de sus iniciativas más perdurables fueron el combate frontal contra el tabaco y el programa de una computadora por niño. El contexto de esas iniciativas fue la estabilidad económica e institucional, la fuerza de las políticas sociales y el crecimiento económico. Al mismo tiempo continuaban su declive la seguridad pública y la educación, áreas de buen desempeño en términos latinoamericanos pero de creciente insatisfacción en base a los estándares de calidad de vida de Uruguay.

José Mujica: la horizontalidad de un Presidente

Horizontal. Impulsivo. Contradictorio. Emocional. Apasionado. Discutidor. Impaciente. Así es el liderazgo de Mujica.

En 2010 José Mujica recibió la banda presidencial de manos de Tabaré Vázquez. Había ganado las elecciones de 2009 y era portador de una larga historia política.

En 1958 la histórica hegemonía del Partido Colorado fue quebrada por primera vez en el siglo 20 por su eterno adversario, el Partido Nacional. Allí estaba el joven José Mujica. En la militancia, en la campaña electoral y luego en el gobierno de ‘los blancos’ (como se denominan en Uruguay los simpatizantes del Partido Nacional).

Luego vino la decepción de muchos de aquellos jóvenes blancos que abandonaron el Partido Nacional pero mantuvieron sus tradiciones rebeldes, su nacionalismo y su mística revolucionaria derivada de las épicas revoluciones armadas que protagonizaran los blancos a fines del siglo 19 y principios del 20. Esos jóvenes confluyeron con otros muchos que venían de grupos católicos de base, de la izquierda radical, de varios pequeños grupos de origen marxista, y de desprendimientos socialistas y comunistas. Surgía la lucha armada, la guerrilla. Surgía el Movimiento de Liberación Nacional (MLN-Tupamaros), la mítica guerrilla urbana uruguaya. Allí estaba Mujica.

Durante una década entera José Mujica hizo vida de guerrillero. Entrando a un banco pistola en mano, secuestrando a una figura pública, enfrentado a balazos primero con la policía y luego con el ejército, salvando su vida de milagro luego de ser acribillado, ocultándose en montes de tupida vegetación o en sótanos o en zulos en el campo o en casas de compañeros, circulando, escapando, atacando, moviéndose, cambiando de nombre, pistola al cinto o fusil al hombro, evadiendo patrullas, encarcelado, escapando de la cárcel por un túnel…

Mujica ya estaba encarcelado cuando en 1973 comenzó la dictadura militar. Y fue liberado al retornar la democracia en 1985. Durante más de una década había sido torturado sistemáticamente y mantenido detenido en condiciones infrahumanas.

En 1989, el año que Tabaré Vázquez gana la Intendencia de Montevideo, el MLN-Tupamaros ingresa al Frente Amplio. Muchos de sus cuadros políticos y militares todavía consideraban una segunda época de irrupción armada. Pero poco a poco la organización fue derivando hacia la vía política pacífica representada por el Frente Amplio. Allí estaba Mujica, procesando esa contradicción.

José Mujica acompañó el ascenso electoral de la izquierda. Primero como dirigente, luego como Diputado y finalmente como Ministro del gobierno de Tabaré Vázquez. El foco guerrillero quedaba en el pasado. El presente era la gramsciana acumulación de fuerzas. Al finalizar la presidencia de Vázquez hacía ya un buen tiempo que Mujica era una de las figuras más carismáticas del país.

En la serena y sólida institucionalidad uruguaya, el ex guerrillero José Mujica fue electo Presidente en el año 2009. Su gobierno continuó por el camino de la estabilidad política, el crecimiento económico y las políticas sociales. El aborto, el matrimonio homosexual y la marihuana fueron elementos de gran repercusión de su agenda social. Y uno de los logros más perdurables fue la consolidación de una formidable revolución energética que pone al país en lugares de alto destaque mundial en energías renovables. También, por otra parte, continuaron las dificultades en materia de seguridad pública y de educación. Pero su saldo final en la opinión pública fue ampliamente favorable.

Mujica como legado de Mujica

La institucionalidad uruguaya no permite la reelección del Presidente en funciones. Por eso Tabaré Vázquez no volvió a ser candidato al final de su mandato sino 5 años después, en 2014. Y ganó por muy amplio margen. Y José Mujica encabezó la lista al Senado más poderosa.

El Presidente Vázquez recibió un gran legado de Mujica. Y la pieza clave del legado político es el propio Mujica, ahora la principal cabeza parlamentaria del Frente Amplio. El escenario es distinto al de la primera Presidencia de Vázquez: ahora tiene en Mujica a un interlocutor con ideas propias, con gran peso político, con prestigio nacional e internacional.

La relación Vázquez-Mujica tiene a favor la defensa del proyecto común del Frente Amplio, el cierre de filas ante ataques opositores, la vasta zona de coincidencias entre ambos y la inteligencia negociadora que los dos pueden poner en juego.

Pero esa misma relación tiene en contra una también amplia zona de divergencias. Zona que puede ser potenciada por 2 estilos políticos diferentes y por 2 personalidades muy marcadamente diferentes.

El legado de Mujica es Mujica. Allí está, tal vez sonriendo socarronamente. Viendo a ese Presidente de su misma fuerza política. Ese Presidente tan formal para hablar, para vestir, para actuar.

Mujica sabe que ha plantado un virus en el sistema. El virus de la informalidad, de la autenticidad, de las emociones. El virus de la horizontalidad y la transgresión.

El Presidente Vázquez también lo sabe.

Autor: 
Daniel EskibelFinal del formulario


(Nota: este artículo lo publiqué con ligeras variaciones en la revista española Beerderberg)
Fuente: http://maquiaveloyfreud.com/legado/
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"MUJICA DEJA SU IMPRONTA DE QUE LA POLÍTICA SE HACE SIN FINES DE LUCRO”





Entrevista a Alejandro Sánchez, Presidente de la Cámara de Diputados en Uruguay

03-03-2015

Alejandro “Pacha” Sánchez ha sido recientemente electo presidente de la Cámara de Representantes (Diputados) en Uruguay, con apenas 34 años. Además, integra la dirección nacional del MPP, espacio del saliente José Mujica, quien el pasado domingo entregó la banda presidencial a Tabaré Vázquez. En esta entrevista, habla sobre la renovación en el Frente Amplio, sobre los logros de Mujica en el gobierno, y además se propone enumerar los desafíos de los gobiernos posneoliberales de la región en los próximos años.

- Mucho se habló en la prensa regional de una “falta de renovación” en el Frente Amplio, análisis seguramente condicionado por la avanzada edad de tres de sus principales dirigentes -Tabaré, Mujica y Astori-. Sin embargo tu caso es particular: con sólo 34 años te convertiste en presidente de la Cámara de Representantes. ¿Sos parte de una nueva generación de dirigentes dentro del propio Frente Amplio? 

- Me han hecho varias veces esta pregunta, y yo siempre remarco mi discrepancia con ese análisis. El Frente Amplio ha tenido renovación y bastante, capaz que no en edad pero sí en las formas de ver, analizar y trabajar en la sociedad uruguaya; el Frente Amplio (FA) ha roto muchos esquemas. Quizá el mejor ejemplo de ello es José Pepe Mujica, el de mayor edad, pero el que más revolucionó la política uruguaya.

El Uruguay en los 60 y 70 vivió una crisis social y política muy grande. Y justamente, de esas luchas, nacieron referentes como Danilo Astori, en la academia, el Pepe Mujica en la lucha social y política, y muchos otros compañeros y dirigentes. Esos jóvenes o referentes de los 60 y 70 dieron sus luchas en pos de mejorar las condiciones de vida de los y las uruguayas. Por tanto, el FA es hijo de estas luchas. Haber llegado al gobierno nacional posibilitando un plan de transformaciones es también hijo de ellos. Pero estas transformaciones tienen sus límites porque las nuevas generaciones promueven y reclaman más y mejor democracia. A nuestra generación nos toca la responsabilidad de cuidar los logros de esas luchas, de mantener y consolidar lo obtenido, pero principalmente tenemos la tarea de pensar para adelante, pensar el país en clave de desarrollo inclusivo y sostenible, donde todos estén dentro y se sientan participes de él.

- En los últimos años, el accionar legislativo del Frente Amplio fue importante y se pudieron avanzar en leyes importantes desde los derechos individuales y colectivos -aborto, matrimonio igualitario, regulación del cannabis, ley de medios-. ¿Qué proyectos de ley podés adelantar como importantes para el próximo período de gobierno que se inicia en marzo con la asunción de Tabaré Vázquez como presidente? ¿Qué evaluación hacés de las leyes que el Frente Amplio promovió durante estos años? ¿Cuáles son las tareas pendientes?

- Es verdad, en los dos gobiernos se ha avanzado muchísimo en Uruguay. Motor de esto han sido las diversas leyes aprobadas por el Frente Amplio en los gobiernos de Vázquez y Mujica. En el primer gobierno se sacó a miles de uruguayos de la pobreza, se comenzó a reconstruir un país en ruinas, en ruinas tanto social como económicamente. En el segundo gobierno – el de Pepe- se continuó combatiendo fuertemente a la pobreza y a la indigencia, pero además se avanzó en la concreción y ampliación de distintos derechos económicos, sociales y culturales de nuestro pueblo.

Es cierto que las leyes mas “taquilleras” son estas que nombrás, pero también hubo una revolución en materia de matriz energética, con la posibilidad de que Uruguay pueda abastecerse totalmente de energías renovables, eólica, hidráulica etc. Además, se continuó con la ampliación de recursos a la educación, se creó la Universidad Tecnológica con presencia a lo largo y ancho de todo el país, entre otras muchas cosas.

Con relación a lo pendiente, nos faltó jerarquizar con rango legal la instrumentación del Fondo para el Desarrollo (FONDES), fondo creado, en el gobierno de Mujica, que permite utilizar el 30% de las utilidades del Banco República Oriental del Uruguay, banco de propiedad estatal, en beneficio de proyectos asociativos y cooperativos. Para hablar claro: este fondo ha permitido recuperar varias empresas a manos de sus trabajadores y posibilitar a otros grupos a acceder a la viabilidad inicial de sus proyectos. Esta será probablemente una de las leyes mas importantes del próximo período, establecer que este FONDES tenga rango legal y por tanto sea un programa a largo plazo. Para ser la piedra fundacional hacia un Banco Nacional de Desarrollo.

- Sos miembro de la dirección nacional del MPP, el espacio de José Mujica, presidente saliente. La evaluación popular sobre su mandato parece haberse visto en las urnas: 6 de cada 10 uruguayos votaron al FA, y el espacio de ustedes fue nuevamente el más votado, con Mujica electo como senador. ¿Qué deja José Mujica como presidente del Uruguay? ¿Qué pensas que debe/puede/tiene que tomar Tabaré Vázquez de la experiencia de Mujica en el gobierno?

- Lo que deja es su impronta, es remarcar que la política se hace sin fines de lucro, todos los días, en todos lados. No la hace una clase en sí, no existe una casta política, y que la política es principalmente ver, preocuparse y ocuparse por la realidad y los problemas de nuestros vecinos. Ejemplo de esto es el propio Pepe, florista, vendedor en las ferias vecinales de su barrio, que vive, come, habla y se viste como la grandes mayorías del pueblo uruguayo, y que siendo presidente no abusó de los privilegios de la investidura -todo lo contrario, donó el 85% de su salario al Programa Socio Habitacional - Juntos, plan pensado y diseñado por él-.

En este programa se impulsa que las brigadas voluntarias de vecinos, sindicatos (como el de la construcción – SUNCA), estudiantes, entre otros, colaboren con los beneficiarios, quienes son los que con su trabajo construyen sus propias y nuevas casas.

Plan en el que la gran mayoría de los beneficiarios son madres, solteras con hijos a cargo, los mas desprotegidos de la sociedad que nos dejaron las políticas neoliberales de los 90.

También aportó a nuestro Frente Amplio y al Uruguay en que esa solidaridad no se da o expresa tan solo en el barrio, en lo micro, sino también en la mirada en grande. Su visión de Integración regional es eso: es solidaria con el vecino, no dando lo que te sobra sino dando lo que el otro necesita. Su propuesta por ejemplo de darles a Paraguay y Bolivia salida al mar por intermedio de nuestro mar territorial es ejemplo de esto.

- La derecha uruguaya clásica ha sido probablemente de las más dañadas en la última elección, con un claro retroceso de Bordaberry -Partido Colorado-. ¿Crees que hubo un giro a la izquierda y el progresismo más pronunciado? ¿A que atribuís el retroceso electoral de la derecha uruguaya?

- Es cierto que está habiendo un cambio en la elección de los uruguayos: ha sido por que el programa de transformaciones expresado en estos 10 años de gobierno frenteamplistas hace que la gente se plantee mantener los cambios y seguir profundizando

Lo que ha sufrido un retroceso es la credibilidad en esa forma de hacer política por parte de la derecha conservadora, Ese contenido, gobernar en beneficio de una minoría y hacernos pagar al resto, a la gran mayoría, el disfrute de unos pocos.

- ¿Ves en Raúl Sendic, vicepresidente electo, otra carta de renovación dentro del propio Frente Amplio? ¿Cómo te imaginás de acá a diez años?

- Raúl es un claro ejemplo de esta renovación en la manera de hacer política, es decir, la renovación marcada en los ejes expresados en la primer pregunta, el de pensar la política en beneficio de las grandes mayorías y no de unos pocos.

Hoy mis compañeros me encargaron la tarea de ser legislador, en 10 años me veo, en la de siempre, militando en pos de las grandes transformaciones junto a mis compañeros del MPP y del Frente Amplio, acompañando el proceso del pueblo en las velocidades que las correlaciones nos dejen. Mi lugar es siempre el lugar que me otorguen los compañeros y el pueblo uruguayo. 

- En 2014 la izquierda latinoamericana venció con contundencia en Brasil, Bolivia y Uruguay. Sin embargo, hoy se comienzan a ver nuevos intentos de desestabilización en diversas latitudes. ¿Cómo ves la situación de la región en este 2015? 

- La región en este 2015 tendrá el reto de mantener las políticas que la llevaron a mejorar los niveles socio-económicos de su población. Además tendrá el gran desafío de seguir profundizando esas políticas; lo que, lógicamente, genera reacción por parte de los privilegiados de siempre, los sectores de las oligarquías nacionales y trasnacionales que han perdido parte de sus privilegios. 

Estos sectores han reaccionado a lo largo de nuestra historia de manera disímil y han utilizado los peores métodos para defender sus intereses, por lo que debemos estar siempre atentos y dispuestos a defender a rajatabla la democracia en nuestros países, porque los gobiernos emanan de la voluntad de nuestros pueblos, y con ellos los logros que se han podido concretar para nuestras sociedades gracias al apoyo popular.
Es así que debemos llamar permanentemente a la organización del pueblo en sus diversas ramas - gremios, sindicatos, cooperativas de viviendas, estudiantiles, barriales, campesinas- para lograr la movilización popular que permita darle continuidad a estos procesos revolucionarios.

¿Qué papel crees que tienen hoy los medios masivos de comunicación en América Latina?

Los medios de comunicación siempre han sido funcionales a los intereses de sus dueños, si sus dueños forman parte de las oligarquías defenderán los intereses de esas corporaciones. En general los medios masivos de comunicación responden a estos sectores, por esto es de vital importancia el ejemplo de TeleSur en nuestra América. El Comandante Hugo Chávez tuvo la inteligencia de analizar esta situación y construir un espacio de contrapeso al discurso hegemónico, que verdaderamente responda a los intereses de nuestros pueblos, eso es TeleSur y gracias a su ejemplo han nacido otras experiencias, que con distintas fortalezas continúan su camino.