6 DE SEPTIEMBRE DE 2020, 12:08
Si no fuese por la premisa no
escrita del periodismo hegemónico de que todo lo bueno de Cuba no se cuenta,
llamaría la atención que la noticia haya pasado prácticamente desapercibida:
por estos días, la vacuna “Soberana 01” comenzó los ensayos clínicos en humanos
y se convirtió en la primera de América Latina –y de todo el mal llamado “mundo
subdesarrollado”- en avanzar a esa segunda fase.
Hasta ahora hay registradas 167
vacunas potenciales contra el Covid-19. La cubana se sumó a otras 29 que la OMS
ya aprobó para estudios clínicos, seis de las cuales se encuentran en la fase
3, la de testeo en humanos a gran escala. En Latinoamérica hay otra docena de
vacunas autóctonas en desarrollo pero, salvo la cubana, todas en fase
preclínica.
El
candidato vacunal que produce la isla camina a paso firme. Desde que arrancó
los ensayos clínicos el 24 de agosto, “reporta cero evento adverso grave luego
de la inyección de los primeros 20 voluntarios”, según tuiteó Dagmar
García Rivera, directora de investigaciones del Instituto
Finlay, el centro científico estatal cubano que dirige el proyecto. La muestra
incluirá a 676 personas de entre 19 y 80 años y se prevé que los resultados
estén el 1° de febrero. En caso de final feliz, Cuba tendrá su propia vacuna
contra el coronavirus disponible para la población en el primer trimestre del
2021.
Camina
a paso firme y acelerado. “Lo que normalmente se hace en años, se ha logrado en
poco menos de tres meses -apunta Vicente Vérez Bencomo,
director general del Finlay-. En la fase de desarrollo farmacéutico y estudios
preclínicos en animales presentó bajos riesgos, pocas incertidumbres y
alentadores resultados”. A partir de esos indicadores iniciales, el 28 de julio
la vacuna fue probada en tres de sus investigadores, que también presentaron
una alta respuesta inmune.
Que
Cuba marche, una vez más, a la vanguardia en el campo científico- sanitario es
fruto de una larga experiencia acumulada en medicina preventiva, inmunización
masiva y el desarrollo de una industria biotecnológica de innegable prestigio
internacional. Desde el triunfo de la Revolución en 1959 se impulsó la
formación profesional desde las universidades y se creó un Polo Científico con
la orientación de combinar investigación con producción.
La
elaboración de vacunas es uno de los logros más significativos: Cuba produce
ocho de las once vacunas de su programa nacional de inmunización, que tiene una
cobertura superior al 98% y, naturalmente, es gratuita y universal. En 1962 se
realizó la primera campaña de vacunación con la cual se convirtió en el primer
país en erradicar la poliomielitis. Otro de sus hitos fue lograr, en 1990, una
vacuna propia contra la Hepatitis-B, consiguiendo prácticamente la desaparición
de esa enfermedad. Y un dato destacable: la plataforma de investigación médica
cubana, compuesta por 32 empresas estatales con más de 10 mil trabajadoras y
trabajadores dedicados a la producción de medicinas y vacunas, está integrada
mayoritariamente por mujeres.
Soberanía, la palabra clave
Lograr
una vacuna 100% nacional en un país con grandes limitaciones económicas
-centralmente por el bloqueo de Estados Unidos- reviste una importancia vital.
El presidente Miguel Díaz-Canel remarcó
el concepto que nombra y descifra a “Soberana 01”: “El nombre de la vacuna
recoge el sentimiento de patriotismo y de compromiso revolucionario y humanista
con que se ha trabajado. Hazañas como estas nos reafirman el orgullo de ser
cubanos”.
La
política de fabricación y aplicación de vacunas es sólo una pata de un sistema
sanitario integral ejemplo en el mundo. En 1959 Cuba contaba con apenas 6 mil
médicos y hoy tiene más de 100 mil, el número por habitante más alto de América
latina y uno de los más altos a nivel global. También es el único país de la
región que eliminó la desnutrición infantil severa: ninguno de los 146 millones
de niños bajos de peso que viven hoy en el mundo es cubano.
El
énfasis en la medicina preventiva fue clave también para el control del
coronavirus. Tras casi seis meses de pandemia, Cuba registra poco más de 4 mil
contagios y sólo 95 muertes; uno de los índices de mortalidad más baja del
mundo con 8 fallecidos por millón de habitantes (el mayor es Perú con 871).
La
formación sanitaria de la isla tiene su baluarte universal en la Escuela
Latinoamericana de Medicina (ELAM), donde en 20 años se graduaron 7.248 médicos
de 45 países, incluidos unos 200 estadounidenses.
Quizá
esa solidaridad internacionalista sea el sello principal del modelo cubano. Las
brigadas médicas, que se despliegan desde hace seis décadas por todo el mundo,
han puesto el cuerpo en todas las catástrofes naturales y epidemias (desde el
terremoto en Chile de 1960 hasta el ébola en África).
Previo
a la pandemia eran unos 30 mil trabajadores y trabajadoras de la salud
prestando servicio en 61 países, a los que se sumaron 46 brigadas que partieron
este año para colaborar en la lucha contra el Covid-19. No suena alocada
entonces la propuesta que viene tomando fuerza de otorgarle al “ejército de
batas blancas” –como le llamó Fidel Castro- el Premio Nobel de la Paz.
Fuente. Nodal
EL SALVAVIDAS
SOBERANA 01, LA ESPERANZA PARA EL MUNDO
Por | 09/09/2020 | Cuba
Fuentes: Rebelión
Probablemente de todos nuestros sentimientos el
único que no es verdaderamente nuestro es la esperanza. La esperanza le
pertenece a la vida, es la vida misma defendiéndose.
De la gran obra literaria Rayuela, su
creador fue Julio Cortázar.
Practicamos nuestra solidaridad con hechos, no con
bellas palabras.
Presidente Fidel Castro.
El
Instituto Finlay, que es el núcleo cubano del que parte toda la investigación
sobre la Covid 19. El doctor Vicente Vérez Bencomo, director del Instituto
declaró que los ensayos se realizaron con bajos riesgos, pocas
incertidumbres y alentadores resultados, a ello se prestaron voluntarios
tres de los investigadores del centro y les fue inyectada la vacuna. La
respuesta fue totalmente positiva, no presentaron ningún problema. Entonces se
pasó a una segunda parte de la comprobación científica, y se inyectó la
consiguiente dosis a otros 20 voluntarios entre los 20 y los 80 años de edad,
igualmente se pudo comprobar que no presentaba ninguna alteración. Soberana 01
sigue en periodo de prueba en busca de la total garantía de preservación de la
salud y la vida. Para la Revolución cubana ese ha sido siempre el objetivo
desde su triunfo el 1º de Enero de 1959. El 1º de Febrero de 2021, habrán
finalizado todas las comprobaciones y si hay garantía de ese propósito se
comunicará su distribución social y gratuitamente a toda la población en un
máximo de dos meses. La esperanza que produce la investigación Revolucionaria
cubana es la esperanza de vida, y en ella se ha defendido siempre en todas las
dimensiones de la existencia.
La OMS, ante las declaraciones de Trump afirmando que él va a tener una
vacuna antes de las elecciones, ha hecho saber que la Organización no
recomendará ninguna vacuna contra el coronavirus si no ha demostrado su
seguridad.
Siguiendo
los intereses de los grandes capitalistas la CNN informaba que quienes
representan a tales señores han declarado como gobernantes que EEUU no se unirá
a la investigación contra la Coronavirus en la que trabajan 170 países para
conseguir una vacuna eficaz. Lo confirma el que la Administración del
Medicamento y Alimentación del país (FDA por sus siglas en inglés), mediante su
responsable Stephen Hann ha hecho saber al Financial Times que podría autorizar
el uso de una vacuna contra la Covid 19 sin que se hubiesen completado los
ensayos de fase 3.
Los
datos que ha dado a conocer la Universidad Johns Hopkins: en EEUU hay una media
de más 40.000 infectados diarios. Ya se sobrepasan los 6 millones de
infectados. El número de muertos sobrepasa 184.000.
La
Covid 19 ha dividido al mundo: EEUU y el resto de los países, el 1% y el 99%.
La población mundial no espera nada de semejante núcleo dedicado a hostigar al
resto en base a los intereses más abyectos: robar las vacunas como ha robado
las mascarillas, como ha robado gobiernos, como ha robado riquezas naturales.
Ahora ante la Covid 19 ha mostrado su decadencia y la avaricia de su clase
dirigente para vender una vacuna de la que ya se advierten peligros quizás
irreversibles. Y el pueblo de EEUU sin sanidad universal, pero Trump le promete
una vacuna de esa clase que el recomienda para comprar votos
en el juego electoral ya de por sí corrupto. Su anterior sugerencia causó
centenares de muertos y los mismos científicos de su país lo lamentaron.
Este
intermedio es preciso porque la comparación sobre objetivos y métodos permitirá
separar la esperanza de la desesperanza.
La ciencia en Cuba ha adquirido un nivel de desarrollo que es
reconocido como de primer orden en todo el mundo. Su dedicación a prevenir ha
conllevado una continua investigación, y ésto es debido a que no
observa el cuidado de la salud del pueblo cubano como un negocio sino como un
deber de la Revolución, del Estado Revolucionario para con todo su pueblo.
Con tal premisa se atendieron envenenamientos, plagas, infecciones, todo lo que
el imperialismo en su empeño por acabar con la conquista de la soberanía cubana
regaba con aviones y mercenarios. Semejantes actos criminales han entrado en el
propósito del bloqueo, es necesario recordarlo. El objetivo era/es rendir por
hambre al pueblo que se le había rebelado y resiste.
La experiencia científica cubana ha crecido de tal manera que su sanidad es
capaz de atender los desastres naturales, pandemias y enfermedades a las que
solo ella ha hecho frente como política de Estado: salvar vidas de todo país
que solicite su ayuda, la solidaridad, como se dice en Cuba, es compartir lo
que se tiene, no dar solo lo que sobra.
El
personal médico de Cuba que cuida de la salud del mundo es el que cuida en
igualdad de la salud de su pueblo. La prevención ha servido a la medicina en la
isla de gran motor para su industria biotecnológica. Ningún Estado de esos que
tanto odian a Cuba y se suman al bloqueo estadounidense puede mostrar las
conquistas cubanas. Los millones y millones de dólares pesan tanto en los
bolsillos de su clase minoritaria de esas naciones que no deja que ni sus pies
ni su conciencia se muevan por los pueblos sobre los que mandan. De este modo
se ponen así mismos, clase opulenta gobernante, como los ejemplos más
declarados de abandono, desidia y explotación comercial de la salud, a eso se
llama inhumanidad, y tiene una calificación jurídica penal.
En
el caso de Cuba la Revolución desde el comienzo dispuso de una nueva
perspectiva: el bien de la mayoría es la riqueza social, y su programa de
transformación mostró que formar culturalmente en ciencia e investigación
médica era una barrera de defensa y un bien, y se dio a crear un Polo
Científico que causa asombro: entre los tratamientos aportados dispone de 11 vacunas
con las que más del 98% de la población cubana está alejada de las enfermedades
que afectan comúnmente y hasta de manera excepcional. Y para dolor de los Bill
Gates, éste que ha dado la orden a todos los medios de difusión para que le
llamen filántropo, las vacunas cubanas son gratuitas y universales,
el único beneficio es la esperanza de vida que dan. Con esas vacunas en Cuba se
ha hecho desaparecer la poliomelitis (fue el primer país en erradicarlo), la
Hepatitis B, tiene la primera vacuna contra el cáncer de pulmón, que además
sirve con otras para luchar contra la Covid porque el virus ataca a los
pulmones entre otros organismos, y cuántas más soluciones, siempre gratuitas y
universales, que a muchos nos harían falta en el mundo capitalista. Con la
prevención, Cuba, ha conseguido que no pase de 4.000 infectados entre los más
de 11 millones de habitantes, y, 95 fallecidos, el 2,8% el nivel de
infectación, son cifras que la sitúan entre los países con menos afectados del
mundo. Compárese con EEUU, o, si prefiere salirse del imperio hágalo con uno de
sus subalternos, por ejemplo España.
Cuba
es una gran potencia mundial en cuidados de la salud, dispone del mayor número
de médicos y médicas de todo el continente por número de habitantes, son más de
100.000. Las doctoras y doctores de Cuba han resultado el oxígeno para muchos
países en medio de la crisis pandémica levantando admiración por donde pasan:
son médicos y médicas que cuidan del mundo en apuros.
Es preciso que se sepa que EEUU impidió que Cuba comprase material médico
y le roba cuanto puede del que contrata. Un ejemplo, la Revolución consiguió
que llegase un barco al puerto de Mariel con material para la producción de
medicamentos, pero una vez allí EEUU amenazó de tal manera a los exportadores
que el barco debió salir con los contenedores sin haberlos descargado.
Es preciso que se sepa que además EEUU ha impuesto el bloqueo
informativo sobre cualquier noticia que pudiese referirse a las conquistas de
Cuba, impidiendo que se conozca su aportación fundamental con la esperanza que
significan sus avances científicos para conseguir una vacuna. El bloqueo
informativo, guerra contra la información sobre Cuba, alcanza al conocimiento
público de su sistema de prevención para evitar la enfermedad, como por ejemplo
el que para ello se emplean interferones y nasoferon por vías respiratorias y otros
junto con vacunas mencionadas como la vacuna contra el cáncer de pulmón.
Es preciso que se sepa que a la primera vacuna con el nombre de Soberana
1, nombre que habla de la independencia representada en el bien que significa,
seguirá otra vacuna para garantizar definitivamente la salud y la vida de la
población cubana. El magnífico logro se consigue sin que las manos de la usura
capitalista caigan sobre el pueblo de Cuba.
Es preciso que se sepa… que… después de haber
realizado 600.000 misiones internacionalistas en 164 países, en las que han
participado más de 400.000 trabajadores de la salud, Cuba tiene el salvavidas Soberana 01, la esperanza para
su pueblo y que ofrece a los pueblos del mundo.
Ramón Pedregal Casanova es autor de los
libros: Gaza 51 días; Palestina. Crónicas de vida y Resistencia;
Dietario de Crisis; Belver Yin en la perspectiva de género y Jesús
Ferrero; y, Siete Novelas de la Memoria Histórica. Posfacios. Presidente
de la Asociación Europea de Cooperación Internacional y Estudios Sociales
AMANE. Miembro de la Comisión Europea de Apoyo a los Prisioneros Palestinos.
Miembro del Frente Antiimperialista Internacionalista.
Fuente: https://rebelion.org/el-salvavidas-soberana-01-la-esperanza-para-el-mundo/
No hay comentarios:
Publicar un comentario