ACTIVISTA Y ENTORNO POLÍTICO: NACIONALISTAS

ACTIVISTA Y ENTORNO POLÍTICO

2.- NACIONALISTAS

Los asistentes y participantes que se reclaman del Socialismo Peruano, en las reuniones actuales parten básicamente de dos puntos de vista respecto al nacionalismo. (En nuestro país actuó por décadas el nacionalismo “antiimperialista”, pero ahora está totalmente autodesenmascarado). Entonces, unos enarbolan el nacionalismo indigenista, otros el nacionalismo proletario. ¿Cómo luchan ambos por el Cambio Social?

En los comienzos del siglo pasado, el indigenismo estuvo representado por ilustres estudiosos de la realidad peruana, Luis Valcárcel entre ellos, y décadas después por César Guardia Mayorga. Actualmente está representado, entre otros por Isaac Humala, abogado laboralista, que ha trabajado durante largos años por forjar el Movimiento Etnonacionalista Peruano, o Movimiento Etnocacerista (en honor a Andrés Avelino Cáceres, héroe de la resistencia en la Guerra del Pacífico). En la segunda mitad del siglo pasado, Humala integró el grupo Cahuide dentro del PC-Unidad, y formó círculos de estudios en los que participaron Héctor Béjar (que formaría después el Ejército de Liberación ELN) y Vargas Llosa (ahora Premio Nobel de Literatura). Y formó parte del Movimiento Izquierda Revolucionaria MIR de Luis de la Puente y Guillermo Lobatón, caídos en cruel represión. Eran años de insurgencia y de lucha por la reivindicación del Socialismo Peruano.

En 1989 funda el Instituto de Estudios Etnogeopolíticos (IEE). El 2000 el etnocacerismo propició un levantamiento militar contra el gobierno Fujimori (en Locumba). El 2003 funda el Movimiento Nacionalista Peruano MNP. El 2005 se levanta contra el gobierno Toledo (en Andahuaylas). El 2011 el etnocacerismo, en coalición (Gana Perú) gana las elecciones presidenciales (con Ollanta Humala, hijo de Isaac Humala).

El etnocacerismo reivindica la “raza cobriza”, a los indígenas, originarios (etimológicamente indígena significa originario). Evidentemente, este nacionalismo es nacionalismo excluyente, totalmente desfasado de la composición demográfica del país.

El nacionalismo proletario también propugna el indigenismo pero “no sueña con utópicas restauraciones. Siente el pasado como una raíz, pero no como un programa” (JCM, Nacionalismo y Vanguardismo, 27.11.25). Aún más, plantea que “Un movimiento histórico en gestación no puede ser entendido, en toda su trascendencia sino por los que luchan porque se cumpla. (El movimiento socialista, por ejemplo, sólo es comprendido cabalmente por sus militantes)” (JCM, Prólogo a Tempestad en los Andes, --.10.27). Y aún más, “Proclamamos que éste es un instante de nuestra historia en que no es posible ser efectivamente nacionalista y revolucionarios sin ser socialista” (Énfasis agregado)

Este nacionalismo proletario quedó marginado al quedar marginado el PSP, lo que aprovechó el nacionalismo “antiimperialista”, y por eso pudo engañar por un tiempo. Es que para comprender el nacionalismo proletario hay que ser socialista, y para ser socialista hay que militar y no situarse con seudo autosuficiencia “por encima de la contienda”.

El nacionalismo proletario incluyente se expresa en una concisa fórmula: “No es mi ideal el Perú colonial ni el Perú incaico sino un Perú integral” y que “La reivindicación que sostenemos es la del trabajo. Es de las clases trabajadoras, sin distinción de costa ni de sierra, de indio ni de cholo” (Polémica con L. A. Sánchez, 11.03.27) Por eso:

Perú Integral + Reivindicación del Trabajo = Nacionalismo Proletario.

23 noviembre 2011

Ragarro