I
Ayer, por la tarde, se realizó la primera reunión de preparación del Seminario Socialista. Éramos cuatro personas. Visto negativamente este número podría decirse que éramos los "cuatro gatos" famosos del imaginario popular. Visto positivamente este mismo número podría decirse que éramos los "cuatro hermanos Ayar" que fundaron -no sin contradicción- el Tahuantinsuyo.
La realidad es la realidad. A veces es dura, a veces es tierna. A veces es dulce, otras amarga. A veces nos dá a manos llenas, y otras nos quita hasta la camisa. Pero hay que partir de ella, siempre, si se aspira a ser marxista.
La burguesía, tanto a nivel mundial como local, sabe o intuye que se acerca, inexorablemente, su final. Pero no está dispuesta a renunciar a sus privilegios de clase explotadora; por lo tanto se prepara a defender su sistema inhumano con todos sus recursos -que son muchos-.
El primer gran recurso que tiene la burguesía a su disposición, es, evidentemente, Don Dinero. Que como sabemos, es Poderoso Caballero. Este Señor compra todo lo que se le ofrece, o se le opone; pues en el sistema capitalista todo o casi todo es susceptible de ser una mercancía.
Otro gran recurso es la educación, que sigue siendo - a pesar de los avances de la informática- privilegio de la clase expropiadora. La burguesía invierte mucho en la educación de sus vástagos -que desde los primeros grados tienen computador personal- y, aparte de los viajes de estudio al extranjero ( el heredero del grupo Gloria, Rodríguez Huaco, ha cursado estudios de negocios en Londres, por ejemplo ) se esfuerzan por traer al Perú, casi semanalmente, a los mejores expositores internacionales sobre temas de organización, de administración, etc.
Una de esas teorías burguesas de organización señala que, para que una reunión sea fructífera, productiva, no debe exceder al número de siete personas o al mínimo de cinco. Ayer, por la tarde, en pleno debate del Temario del Seminario del Socialismo Peruano, llegó un joven estudiante de Derecho de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Raúl. Y como dice el sufrido pueblo aficionado a la tauromaquia: no hay quinto malo. Con Raúl se completó la "Pentarquía" diría otro entusiasmado.
La Dialéctica nos enseña la relación entre cantidad y calidad. Cinco golondrinas no hacen un verano -y menos en pleno invierno limeño- pero son la señal de que hay tierra a la vista.
II
El pequeño Larousse ilustrado, edición del 2007 -no me animo a gastar el poco dinero que poseo en una edición más actual que poco o nada puede agregar- define la palabra SEMINARIO en su segunda acepción como : " Conjunto de conferencias sobre un tema determinado ". Y bien, cuál es el tema del Seminario del Socialismo Peruano?
Evidentemente, el Socialismo Peruano y sus Tesis fundamentales, en su mayoría -sino en su totalidad- presentadas por José Carlos Mariátegui La Chira, el Amauta.
Toca al Seminario averiguar cuáles son estas Tesis fundamentales, y, sobre todo, su vigencia.
Por ejemplo, el libro 7 Ensayos de Interpretación de la Realidad Peruana es una requisitoria total, de principio a fin, del feudalismo en el Perú o de sus rezagos. Y José Carlos señala clara y reiteradamente la necesidad de superar el latifundismo feudal, el gamonalismo político. Así escribe en el tercer ensayo EL PROBLEMA DE LA TIERRA: " El problema agrario se presenta, ante todo, como el problema de la liquidación de la feudalidad en el Perú". Edición de Bolsillo.2007.pág.51.
La pregunta que surge, y que el Seminario debe tratar de responder es: se ha liquidado la feudalidad en el Perú?
Fue la Reforma Agraria de 1969 la liquidación del latifundismo feudal en el Perú? O, tal vez, la insurrección armada organizada y dirigida por el Partido Comunista del Perú conocido como Sendero Luminoso en las décadas aciagas de los ochentas y noventas?
Seguimos siendo un país feudal o semifeudal como en el año 1928 constataba el Amauta?
Se han extirpado los "raigones de la feudalidad" como plásticamente lo expresaba José Carlos?
Sin tener claridad en este tema no es posible avanzar.
Lima, 15 de julio del 2012.
Manuel Velásquez Rangel.
Rumbo al Bicentenario 1818-2018.
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