Lenin Moreno en Guayaquil luego de declarar el
estado de excepcion
Análisis
04/10/2019
La caída
vertiginosa de la credibilidad del presidente ecuatoriano Lenín Moreno, la
imposición del paquetazo impuesto por el Fondo Monetario Internacional
(FMI) y la declaración del estado de excepción ante el reclamo popular, se
suman a las denuncias de corrupción, que van abonando el mismo camino que
debieron seguir sus antecesores Abdalá Bucaram, Jamil Mahuad y Lucio Gutiérrez.
Con la
declaración del estado excepción que durará 60 días, con posibilidad de
renovación (según la ministra de Gobierno María Paula Romo) el presidente Lenín
Moreno, pretende "garantizar la seguridad" ante los "focos
localizados" de violencia. "La gente piensa que no tomo decisiones,
pero sí lo hago", aseguró Moreno.
La ola de
movilizaciones respondió a un “paquetazo” económico decretado por el gobierno e
impuesto por el FMI, que incluye el incremento del precio del diésel y gasolina
extra, producto de la eliminación del subsidio estatal, además de reformas
laborales y tributarias. El gobierno pretende ahorrar 1.400 millones de dólares
anualmente.
A las
manifestaciones de los transportistas se sumaron organizaciones sociales,
indígenas y estudiantes universitarios que rechazan lo que tildan de
“paquetazo”. Lo cierto es que desde la medianoche del miércoles no hay transporte
y las clases han sido suspendidas en todo el país y el jueves el ambiente de
las protestas subió de tono.
La gasolina
extra ha pasado de costar 1,85 dólares por galón a 2,22, respectivamente. El
diésel, habitual combustible del transporte de mercancías, estaba entre un
dólar y 1,37 dólares, dependiendo del tipo, y ahora sube a casi el doble, con
algo más de 2,10 dólares el galón.
"Las
medidas que tomamos en conjunto están en firme, no existe posibilidad de
cambiar, principalmente las relacionadas con el subsidio que causa tanto daño
al país que distorsionaba la economía", dijo Moreno desde la casa de
gobierno.
El Fondo
Monetario Internacional (FMI) señaló el miércoles desde Washington que las
reformas anunciadas por Moreno tienen como objetivo mejorar la resiliencia y la
sostenibilidad de la economía ecuatoriana, y fomentar un crecimiento sólido e
inclusivo.
Destacó
asimismo que las autoridades “están trabajando en importantes reformas
destinadas a apoyar la dolarización de Ecuador, incluida la reforma del Banco
Central y el Código Orgánico de presupuesto y planificación”. El 11 de marzo,
el FMI avaló un acuerdo técnico de asistencia financiera a Ecuador por 4.200
millones de dólares, que permitió el desembolso inmediato de 652 millones de dólares
Assange, los
INA Papers, Unasur, Opep
Lenín Moreno
sorprendió el jueves 11 de abril al revocar el asilo que Ecuador le había
concedido a Julián Assange, situación que le fue exigida por el vicepresidente
estadounidense Mike Pence y, según señalan algunos analistas, por el Fondo
Monetario Internacional para otorgarle los créditos solicitados.
La medida
acabó con su estadía de casi siete años en la embajada ecuatoriana en Londres y
permitió que la policía británica lo arrestara, para entregarlo al gobierno
estadounidense. Moreno aseguró que Assange “prácticamente convirtió a la
embajada en un centro de espionaje internacional y terrorismo informático”,
quebrando las normas de convivencia y hasta manchando con sus heces las paredes
de la sede diplomática.
Existe una
evidente relación causal y temporal entre las revelaciones de Wikileaks acerca
de los INA Papers y la expulsión de Julián Assange de la embajada de Ecuador en
Londres. Las revelaciones sobre los sobornos recibidos amenazaron con acabar
con la carrera política de Moreno, e incluso, dar con sus huesos en la cárcel.
En marzo de
2012, en la capital de Belice, el hermano del presidente, Edwin Moreno Garcés
constituyó una empresa fantasma offshore bajo el nombre INA Investment Corp
(acrónimo de las tres últimas letras del nombre de las tres hijas que del
mandatario: Irina, Carina y Cristina), con el fin de recibir dineros de coimas
que se recaudaban por medio del “empresario” y a la vez su testaferro Xavier
Macías Carmignani.
Los sobornos
comprobados se recibieron de empresas como la china Sinohydro y la panameña
Recorsa pagaban por el lobby efectuado en las adjudicaciones de determinadas
concesiones con el estado. En uno solo de esos movimientos se pagaron ni más ni
menos que 18 millones de dólares.
Los INA
Papers son una importante serie de documentos que confirman la existencia de
una organización criminal liderada por Lenín Moreno. Por medio de al menos una
docena de sociedades fantasmas constituidas en diversos paraísos fiscales,
cometió una serie de delitos que incluyen lavado de activos, defraudación
fiscal y tributaria, tráfico de influencias y el cohecho en perjuicio del
Estado ecuatoriano, cuyos alcances han derivado en lo que Interpol categoriza
como crimen transnacional.
Las últimas
semanas Lenín Moreno no sólo decidió la salida de la Unión de Naciones
Suramericanas (Unasur), bombardeando el esfuerzo de integración política
regional, sino también el vaciamiento de la sede en la mitad del mundo, que
incluyó quitar la estatua del expresidente argentino Néstor Kirchner. Y anunció
también el retiro del país de la Organización de Países Exportadores de
Petróleo (Opep).
Presidentes
expulsados
Los
ecuatorianos saben de levantamientos populares contra presidentes que los han
engañado, impulsados por movimientos populares e indígenas, desde, al menos, la
década de 1980 hasta el ingreso en el nuevo milenio.
Abdala
Bucaram, fue alcalde de Guayaquil tras ser electo en 1984. Fue enjuiciado por
injurias a las Fuerzas Armadas y peculado en 1985. En su intento por huir de la
prisión preventiva en el juicio por peculado, viajó a Panamá. En 1987 el
Congreso le dio amnistía, permitió que participe en las elecciones de 1988 en
la que perdió contra Rodrigo Borja, y los juicios en su contra volvieron a
activarse inmediatamente y tuvo que volver a Panamá.
En 1992 el
Congreso le otorgó amnistía por segunda vez y se postuló para los comicios
presidenciales de 1992 en los que volvió a perder. Su tercera candidatura fue
en 1996 y ganó. En 1996, la entonces Corte Suprema de Justicia presentó dos
juicios en su contra debido a mal manejo de gasto público y un sobreprecio en
la adquisición de mochilas escolares. En 1997 el congreso lo calificó de
‘incapacidad mental’, fue destituido y viajó a Panamá, lugar en el que ha
permanecido exiliado.
Jamil Mahuad
fue electo presidente en 1998 y destituido de sus funciones en enero del 2000,
tras poner al país al borde de la hiperinflación. Esto llevó a la quiebra o
cierre de 21 de los 42 bancos existentes en esa época. Mahuad decretó un
congelamiento de depósitos y dolarizó al país. Se produjo una devaluación
acelerada. El precio del dólar había subido de 4.500 a más de 25.000 sucres en
menos de un año.
El 21 de
enero de 2000 fue derrocado cuando las Fuerzas Armadas le quitaron su apoyo. El
gobierno de Chile le ofreció asilo diplomático pero Mahuad se fue a dar clases
en la universidad de Harvard. El 27 de mayo de 2014, la Interpol emitió una
circular roja para poder detener a Mahuad en cualquier parte del mundo y
llevarlo a los tribunales de Ecuador, pero fue retirada en menos de un mes.
La justicia
ecuatoriana lo busca por el presunto delito de peculado —mal uso de fondos
públicos— que significaría una pena de 12 años en prisión.
El 21 de
enero del 2000 Lucio Gutiérrez participó en una rebelión indígena y de
militares de bajo rango que derrocó al presidente constitucional Jamil Mahuad.
Fue arrestado por golpista y confinado en el Fuerte Militar Atahualpa, donde
permaneció por 120 días hasta que el Congreso le otorgó la amnistía. En las
elecciones del 2002 se lanzó como candidato presidencial y ganó en la segunda
vuelta.
El mandato
de Gutiérrez experimentó casos de corrupción dentro de las Fuerzas Armadas.
Creó la Pichi Corte donde se buscaba eliminar los juicios para los ex
presidentes Gustavo Noboa y Abdalá Bucaram. El aumento del costo del
combustible y el no cumplimiento de su plan político llevó a la ciudadanía a
protestar durante varias semanas hasta que, el miércoles 20 de abril de 2005,
Gutiérrez dejó la presidencia. A bordo de un helicóptero del Ejército.
La renovada
represión marca la ruta de su posible futuro, sobre todo cuando las guarismo de
las últimas elecciones regionales marcaron un sostenido aumento del poder
popular del expresidente Rafael Correa, denostado, permanentemente atacado por
Lenín Moreno, quien supo ser su vicepresidente y su candidato a sucederlo.
Moreno no
tiene ningún poder de mando, pero aún le resta cumplir con algunos objetivos de
los sectores de poder, como desdolarizar caóticamente, que es lo que aspiran
los grandes importadores, los grandes exportadores y los banqueros, sobre todo.
No sería
descartable que dada la debilidad de Moreno, esos mismos sectores sean los que
aceleren la asunción del vicepresidente para que pueda seguir con las medidas
económicas y el camino trazado. Algo similar sucedió, recuerda el
exvicecanciller Kintto Lucas, en el año 2000 con Mahuad-Noboa cuando se declaró
la dolarización.
Eloy Osvaldo
Proaño
Analista
e investigador ecuatoriano, asociado al Centro Latinoamericano de Análisis
Estratégico (CLAE)
No hay comentarios:
Publicar un comentario