19-11-2012
Sostener esto no es ningún descubrimiento de última hora, sino que es una
ley universal irrefutable, pues ya los clásicos teóricos y prácticos
advirtieron hace demasiado tiempo de que “no hay socialismo revolucionario, sin
derrotar al capitalismo” .Y que muchos se empecinan en querer descubrir.
Adornar y tergiversar teorías científicas y experiencias, algo que sin derrotar
al sistema capitalista y que por obra del espíritu santo o no se de quien,
venga por antonomasia y junto a una verborrea revolucionaria embustera, el
verdadero socialismo como antesala del comunismo.
Es una realidad patente de las crisis en que se está debatiendo el sistema
capitalista, (pareciera que ya no sólo son cíclicas, sino de largo aliento) y
las muestras de su desesperación que se plasman en los abusos que ha seguido
cometiendo con las diferentes invasiones y destrucción de pueblos y sus
constantes amenazas a quienes osan criticar y oponerse a sus innumerables
atropellos a la condición humana y al derecho internacional.
Es evidente además que los pueblos están respondiendo a este momento de
descalabro del sistema, tanto en Europa como la más afectada, así como en otros
lugares del planeta y en procesos populares con membretes de izquierda y
revolucionarios que se dan especialmente en América latina, pero con respuestas
que poco y nada inquietan al sistema, salvo con la excepción de Venezuela, que
por su liderazgo contestatario y su programa de gobierno que cada día se
encamina con dificultades, al cambio de las relaciones de propiedad de los
medios de producción y la organización del empoderamiento del pueblo en las
cuestiones del poder popular, como una de las condiciones indispensables para
transitar hacia la construcción del verdadero socialismo revolucionario.
Acompañado de sus realidades nacionales como una adecuación de la teoría a la
práctica revolucionaria y sus condiciones reales, sin condimentos caseros que
pretendan revisar, sino adecuar las experiencias de muchos años de lucha del
movimiento revolucionario mundial.
Sobre Venezuela se puede aseverar que sí, está tocando desde hace tiempo al
sistema capitalista en diferentes formas y maneras en especial donde más le
duele, la economía, y es esa una de las causas del intervencionismo descarado
norteamericano con sus diferentes agencias y testaferros en la política del
gobierno venezolano.
Argentina y Brasil con sus gobiernos progresistas, pero con sus economías
secuestradas por las transnacionales, sólo caminan y avanzan hasta donde no le
toquen al sistema capitalista, pueden seguir diciendo que son anticapitalistas
y al sistema no le hace cosquillas.
Algo parecido está pasando en Ecuador, sigue siendo de izquierda pero cada
día más se cuida de tocar el sistema capitalista, para evitar las
contradicciones, mientras habrá que esperar hasta cuando se agudicen las mismas
y ver la palabra del pueblo ecuatoriano.
Del Uruguay es muy poco lo que podemos agregar a lo que estamos viendo en
otros lugares, y sólo recordar aquí las palabras de ese valeroso dirigente
revolucionario, proveniente de una izquierda escarmentada por tantos atropellos
del pasado el compañero José Mujica que antes de ser Presidente en un acto
político dijo:”ojo con los que suben al gobierno por la izquierda y gobiernan
por la derecha”, y según los trabajadores uruguayos para lamento de todos, eso
está pasando también en el Uruguay. Confiamos en el pueblo uruguayo que sigue
reclamando.
Bolivia, donde el Presidente Evo empezó con volapié en 2005, tomando
medidas políticas y económicas y sociales importantes en obediencia a sus
votantes, un mandato con gran apoyo popular y una reelección envidiable donde
tiene dos tercios en ambas cámaras, o sea el poder total para poder plasmar y
desarrollar las políticas por las que dimos nuestros votos, es decir la “agenda
de octubre”. Pero padece del mismo mal de otros procesos mucha retorica
antiimperialista, anticapitalista, criticas a los EE, UU, criticas permanentes
del intervencionismo de USAID, pero no se atreve a expulsarla.
Considerable cantidad de dinero en las reservas fiscales(machaconamente
mostrada como proeza gubernamental), contratación de créditos para desarrollar
el país especialmente en el rubro de costosas carreteras y al mismo tiempo
emisión de “bonos soberanos” y sobre todo satisfacción gubernamental por parte
de los organismos internacionales, operadores del sistema como el F.M.I. y el
B.M. por el “buen” manejo macro económico de la economía boliviana, que se basa
principalmente en la exportación de nuestros hidrocarburos aprovechando el
momento de los excelentes precios internacionales de nuestras materias primas,
petróleo ,gas y minerales y en la participación mayoritaria debido a la
“nacionalización” de los hidrocarburos.
Como lo dijo el compañero Petras tiempo atrás, una política de “un
capitalismo normal”, condimentado con anticolonialismo y con una retorica anti
Estados Unidos que ni siquiera le da la tos al sistema, hasta ahora todos los
remilgos del Presidente contra Obama y su política, ni siquiera han merecido
ninguna respuesta del imperio .pues hasta aquí, Evo no toca el sistema, más
bien lo fortalece y eso es lo que le interesa al imperialismo, lo demás pasa
como un quejido insignificante. Aquí también el pueblo y nosotros quienes
seguimos apoyando el proceso, tenemos que seguir haciendo escuchar nuestra palabra
y acción, o esto será un gobierno pos neoliberal más, al desaprovechar esta
coyuntura histórica, en política no hay nada irreversible ese es el peligro de
pretender gobernar por encima de las clase. O es con Dios o es con el diablo.
Sobre Colombia, sólo esperar que la trampa que pretende el estado
paramilitar bajo instrucciones norteamericanas no prosperen las intenciones de
engaño al pueblo colombiano y a los pueblos del mundo, pues ellos no quieren la
paz, quieren comprometer al diálogo y luego obligarlos a los compañeros de las
FARC, con diferentes maniobras y acciones bélicas en el terreno a abandonar
para luego acusarlos ante el mundo, pero todos estamos avisados de las
intenciones del gobierno Colombiano y su artífice Santos. Hay que seguir hasta verle
el hueso al diálogo y después veremos, yo confío en los compañeros de las FARC.
Santos no sólo que no toca el sistema, sino que es un payaso del mismo
De Paraguay solo decir que Lugo no era muy de izquierda, ni tocó al sistema
capitalista, ahora ha vuelto al redil de los norteamericanos y hay que esperar
hasta el próximo año la palabra de los paraguayos.
La lucha de los pueblos europeos no deja de ser interesante inclusive en
los EUA, están en manifestaciones grandiosas, tomas de instituciones, marchas,
luchas campales contra las policías, etc...Pero al sistema poco le inquieta
eso, sino se golpea al sistema en su parte mas importante que es la economía,
seguirá dando peligrosos coletazos, ojala que la delantera de esas luchas en
todos los lados la tomen los trabajadores, para así, parar el sistema de
producción y exigir en los respectivos lugares los cambios que reclaman cada
pueblo.
El único idioma que entiende el sistema capitalista es tocarle el bolsillo
y su estructura de explotación, lo demás es sólo seguir dándole un poco de
oxigeno.
José Justiniano Lijeròn es ex Dirigente de la Central Obrera Boliviana.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su
libertad para publicarlo en otras fuentes.
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